Capítulo 11: ¿Un amor
imposible?... III parte.
Declaimer:
Noticia de último momento… “YU – GI – OH!, No es mío”… Mucho menos sus
personajes… Son propiedad de su respectivo autor, pero toda la trama de esta
historia si es creada por mí. Amo inventarles historias nuevas a mis queridos
personajes, es una manera de expresar lo que siento, y tener la dicha de
poderlo compartir con todos ustedes. ^_^
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A la mañana siguiente…
Buenos días amor, me
alegra que te hayas levantado, he preparado un delicioso desayuno para que
podamos comer juntos.
Buenos días Mokuba,
todo se ve muy rico. – Contestó con la mirada en el suelo.
Anda, siéntate para
que podamos comer.
Mokuba, necesitamos
hablar.
Desayunemos primero,
y después conversamos. – Trataba de animarlo un poco.
Lo siento, lo que
tengo que decirte no puede esperar.
Entonces dime, qué
es eso tan importante que tienes que decirme.
Quiero que te vayas
de mi apartamento.
¿Qué fue lo que
dijiste? – Preguntó incrédulo.
Lo que oíste, quiero
que te vayas.
¿Por qué?
Quiero que vuelvas
con tu hermano.
¿Con mi hermano? –
Se quedó pensando por un segundo. – Un momento… No me digas que Seto tiene algo
que ver en todo esto.
No trates de
evadirme el tema.
Ahora lo entiendo
todo, era por eso que tú estabas actuando extraño. Acaso mi hermano llegó a
decirte algo.
Tu hermano no tiene
nada que ver en esto, solamente quiero que te vayas, vete con tu hermano o a
dónde se te dé la gana.
Dame una buena razón
para que me estés echando, que yo sepa no te he hecho nada malo.
Bien, si eso
quieres, te daré más de una razón para que te vayas de aquí.
El pelinegro estaba estupefacto a todo lo que su novio le estaba
diciendo, no podía creer que él estuviera actuando de esa manera…
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No me digas que irás
a trabajar el día domingo.
Así es Ryou, me tocó
turno este día.
Pero los domingos es
nuestro día de descanso Joey.
Lo sé, pero no tengo
elección, si no voy podría perder el trabajo, y no puedo darme el lujo de hacer
tal cosa.
El albino suspiró profundamente.
Está bien,
únicamente porque acabas de entrar a ese lugar, pero procura no trabajar los
domingos.
No te prometo nada,
aunque veré qué puedo hacer.
¿Quieres que te
acompañe?
No te molestes,
mejor quédate a desayunar.
¿Y tú ya
desayunaste?
Si.
¿No me estas
mintiendo? – Lo miraba fijamente a los ojos.
Claro que no Ryou,
en serio ya desayuné.
De acuerdo te creo,
procura llegar temprano para que puedas descansar.
Algo más mamá. –
Bromeaba con su amigo.
No, solamente eso
hijo. – Le seguía la corriente.
Adiós Ryou, nos
vemos más tarde.
TEN MUCHO CUIDADO. –
Le gritó para que lo pudiera oír.
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Buenos días
dormilón.
Buenos días pamita.
– Bostezaba al contestar.
Ven, siéntate aquí
conmigo para que desayunemos juntos.
¿Dónde está papi?
Papá tuvo que salir
a trabajar.
¿El domingo también?
– Preguntó con tristeza.
Si cariño, recuerda
que tiene que trabajar los domingos.
Lo extraño mucho.
Oh, mi pequeño, sé
que lo extrañas mucho, pero recuerda lo que te prometió, en cuanto termine su
trabajo nos llevará a todos de vacaciones.
¿Cuándo será eso
pamita?
No lo sé cariño, creo
que será muy pronto.
Ya quiero que sea
pronto.
Ven acá mi niño
hermoso. – Lo abrazó maternalmente. – Shādī, quiero que sepas que nosotros te
queremos mucho.
Lo sé, yo también
los quiero mucho.
Anda, es hora de
comer.
Está bien.
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Buenos días Bakura.
Buenos días Ryou, me
dejas pasar.
Si claro, adelante.
Gracias.
Una vez dentro de la casa…
¿A qué debo el honor
de su visita?
Bueno… Verás, yo… –
Se había puesto un poco nervioso.
¿Pasa algo? –
Preguntó algo angustiado.
No, no pasa nada. – Carraspeó
su garganta. – Por cierto dónde está Joey.
Tuvo que salir a trabajar.
Entiendo… – Se quedó
por un momento pensativo. – Ryou, ¿te gustaría ir al cine?
¿Qué? – Exclamó
sorprendido.
Vine para invitarlos
al cine, pero en vista de que no está Joey, pues pensé que tal vez tú querías
ir conmigo.
Yo… – Sus mejillas
se ruborizaron. – La verdad no sé qué decir.
Acepte por favor,
creo que vine en un buen momento, así no te quedas solo todo el día en tu
apartamento.
Está bien. – Medio
le sonrió. – Déjeme terminar de hacer algunas cosas, y luego nos vamos.
¿Me dejas ayudarte?
No, como cree.
Si me dejas ayudarte
terminaremos más rápido.
Pero es que… – Bajó
un poco la mirada. – Me da mucha pena.
Descuide, no debe de
avergonzarse, y por favor acepte mi ayuda.
De acuerdo.
El albino mayor medio le sonrió, y a la vez sentía como su corazón
latía a mil por hora.
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En algún lugar de la Ciudad
Domino…
“No sé si habré hecho lo correcto en
llamarle a Bakura para decirle que Ryou iba a quedar todo el día solo en su
apartamento”. – Pensaba para sí mismo un joven de cabellos rubios. – “Solamente
espero que haya decidido en ir a verlo, no me gustó dejarlo solo, sobre todo
porque los domingos normalmente nos quedamos en casa. Creo que algo de compañía
le ayudará a no deprimirse mucho, como me gustaría que Ryou se diera la
oportunidad de conocer a Bakura, se ve que es un buen hombre, no es como ese
idiota del cual se enamoró siendo tan joven. Todavía me sigo preguntando, ¿qué
le habrá pasado para que desconfíe tanto en las personas? De seguro ese hombre
le ha de haber hecho algo terrible. Todavía recuerdo la primera vez que nos
encontramos, yo me encontraba devastado por la discusión que había tenido con
Seto, sin embargo, jamás me imaginé encontrarme con él, llevaba años de no
saber nada de Ryou, y cuando lo vi en ese mismo lugar, él estaba en peores
condiciones que yo. Estaba todo demacrado, sus ojos reflejaban mucha tristeza y
dolor al mismo tiempo, aparte de que lo vi bastante delgado y pálido, en sus
manos llevaba una pequeña bolsa de papel, al principio temía de que el siguiera
viviendo con ese hombre, pero en cuanto me dijo que vivía solo, fue ahí que me
arriesgué a irme a vivir a su apartamento. Una vez que llegamos, me preparó mi
cuarto, pero antes vi como se había ido a la cocina, y cuando salió ya no
llevaba la bolsa de papel que traía en sus manos. Me dio tanta curiosidad de
saber qué contenía esa bolsa, así que esperé para que se fuera a arreglar mi
habitación, posteriormente entré a la cocina, y comencé a buscar el objeto,
abrí todas las gavetas del estante, y nada. Iba a darme por vencido hasta que
se me ocurrió mirar en el bote de la basura, me sorprendí al ver que ahí estaba
lo que tanto buscaba, pero mi sorpresa fue aún mayor cuando vi lo que contenía.
No daba crédito a lo que estaba mirando, esa noche, Ryou pensaba en quitarse la
vida, sino me hubiese encontrado en la cafetería, a estas alturas él”… – Tragó
saliva en seco. – “Quizás el ya no estuviera con vida, a lo mejor fue el
destino que impidió que cometiera semejante locura, o tal vez, estábamos
destinados a encontrarnos para ayudarnos uno al otro a salir adelante. Sea lo
que sea que haya pasado esa noche, lo agradezco de todo corazón, no me hubiera
gustado perder de esa manera a mi amigo”. – Una voz fuerte lo sacó de sus pensamientos.
Oye tú, ya terminaste de lavar los
platos.
Ya casi termino.
Pues date prisa, eres más lento que una
tortuga.
Discúlpeme por favor.
Pedir disculpas los platos no se lavan
solos, apúrate que después tienes que ir a ordenar la bodega.
Si señor Johnson.
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Tú no puedes estar
hablando en serio.
Por supuesto que
hablo en serio. – Hacia lo posible para que sonara convincente. – Ya no te amo
Mokuba.
ESTAS MINTIENDO. –
Gritó molesto.
TE ESTOY DICIENDO LA
VERDAD, ENTIENDE QUE SOLAMENTE ME ACERQUÉ A TI POR TU DINERO, VI LA OPORTUNIDAD
PERFECTA PARA SALIR DE LA MISERIA EN LA QUE VIVO, TE UTILICÉ, TE ENAMORÉ PARA
QUE CAYERAS REDONDITO A MIS BRAZOS.
NO ES CIERTO. – Sus ojos
comenzaron a humedecerse.
¿EN VERDAD CREÍSTE
QUE TE AMARÍA DE VERDAD? QUE ILUSO ERES, JAMÁS ME FIJARÍA EN TI, Y SABES POR
QUÉ… – Podía sentir como su corazón se quebraba por dentro. – NO ERES MÁS QUE
UN NIÑO MIMADO, CAPRICHOSO, ERES ODIOSO, FASTIDIOSO, INGENUO, PETULANTE, ERES
UN SER DESPRECIABLE.
Snif, snif, snif, snif, snif, snif… CÁLLATE, CÁLLATE, NO PUEDO CREER NADA DE LO QUE ME ESTÁS
DICIENDO… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…
SÍ QUE ERES UN GRAN
TONTO MOKUBA, DEBISTE DE HABER ESCUCHADO A TU HERMANO CUANDO TE DIJO QUE YO TE
UTILIZARÍA, QUE NO MÁS ME INTERESABA TU DINERO, Y AHORA QUE YA OBTUVE LO QUE
QUERÍA, TÚ ME ERES INDISPENSABLE, YA NO ME SIRVES PARA NADA. AL MENOS RECONOZCO
QUE FUISTE BUENO EN LA CAMA.
¡PLAFT! – Se escuchó un ruido muy
fuerte, el pelinegro le había dado tremenda bofetada en la cara a su novio. – Snif,
snif, snif, snif, snif, snif… SI TODO LO QUE ME DICES ES VERDAD, NO SABES CÓMO
TE DETESTO, NUNCA ME IMAGINÉ QUE FUERAS UN SER TAN PERVERSO. ERES UN IDIOTA… Snif,
snif, snif, snif, snif, snif…
IDIOTA O NO, SUPE APROVECHARTE AL
MÁXIMO, Y SACARTE TODO EL DINERO QUE QUERÍA. – Se sobaba su mejilla con una
mano. – SI TE QUIERES SEGUIR QUEDANDO CONMIGO TENDRÁS QUE DARME MUCHO DINERO,
MI AMOR. – Expresó con sarcasmo.
Snif, snif, snif, snif, snif, snif… VETE
AL DIABLO NOAH, NO QUIERO VOLVERTE A VER EN TODA MI VIDA, TE ODIO, TE ODIO,
MALDIGO EL DÍA EN QUE TE CONOCÍ, TE MALDIGO NOAH... Snif, snif, snif, snif,
snif, snif…
YA DEJA DE HACER TANTO BERRINCHE,
PORQUE NO VAS HACERLE DRAMA A TU HERMANO, NO ESTOY PARA SOPORTAR TU ESTÚPIDO
COMPORTAMIENTO DE NIÑO MALCRIADO.
Snif, snif, snif, snif, snif, snif… ME
VOY NOAH, NO SIN ANTES DECIRTE QUE NO ERES MÁS QUE UN POBRE DIABLO, NO
VALORASTE EL AMOR SINCERO QUE TE DI, NO VALORASTE NADA DE MÍ. ES VERDAD QUE
TENGO DINERO, Y PODRÉ SER TODO LO QUE TU QUIERAS, PERO AL MENOS TENGO DIGNIDAD,
NO ANDO POR AHÍ EN LAS CALLES BUSCANDO A VER CON QUIEN ME ACUESTO SOLAMENTE
PARA SALIR DE LA POBREZA EN LA QUE VIVO. Y TE DIRÉ ALGO MÁS… – Se secaba sus
lágrimas con sus manos. – DAS ASCO NOAH, ERES UNA VERGÜENZA, TU PODRÁS SER
POBRE Y TODO, PERO TU AUTOESTIMA LA TIENES POR EL FANGO, PORQUE HAY PERSONAS
QUE SON MUCHO MÁS POBRES QUE TÚ, Y NO SE ANDAN REBAJANDO EN ACOSTARSE CON EL
PRIMERO QUE SE ENCUENTRE EN SU CAMINO, Y EN VEZ DE HACER ESO, LUCHAN POR SALIR
ADELANTE, TRABAJAN MUY DURO PARA GANARSE EL PAN DE CADA DÍA. Y ESO ES ALGO QUE
NUNCA ENTENDERÁS, MUCHO MENOS VALORARÁS. ADIÓS, MI QUERIDO PROSTITUTO BARATO,
SOY YO QUIEN YA NO REQUIERE DE TUS SERVICIOS. – Lo fulminó con la mirada
demostrando ser todo un Kaiba.
El
pelinegro se fue de la cocina para ir a la habitación, y hacer su maleta, en
cambio, la otra persona cayó al suelo de rodillas llorando como un bebé recién
nacido.
Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Perdóname
Mokuba, por favor perdóname, espero que puedas entender que todo lo hice por tu
bien… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…
******************************
La noche finalmente había caído, todas las personas regresaban a
sus hogares para descansar después de haber tenido un día largo de mucho
trabajo, en cambio otros, llegaban a casa algo felices por haber logrado pasar
una tarde de domingo muy bonito…
Le agradezco mucho
que me haya invitado a salir.
No hay nada que
agradecer, soy yo quien debería de darle las gracias.
¿A mí por qué?
Por haber aceptado
salir conmigo.
Yo… No sé qué decir.
– Sus mejillas se sonrojaban al rojo vivo.
¿Volverías a salir
conmigo?
El joven se quedó pensando por un segundo antes de responder…
Discúlpeme por lo
que voy a decirle, pero no estaría bien.
¿Por qué?
No es correcto que
yo estuviera saliendo con mi jefe.
Entiendo…
Por favor, no se
enfade por ser tan sincero con usted.
No Ryou, no estoy
enfadado, te agradezco que seas honesto conmigo.
Yo…
No digas nada por
favor, lo mejor será que me vaya.
Lo lamento mucho. –
Bajó la mirada, el albino mayor al verlo todo apenado se atrevió agarrarlo del
mentón para que lo mirara a los ojos.
Joven Ryou, nunca
debe de avergonzarse por decir las cosas que piensa y sienta en su corazón. Créame
que yo admiro mucho eso de usted.
Muchas gracias
Bakura.
De nada joven, ahora
sí me voy.
Pase buenas noches.
Buenas noches, Ryou.
En cuanto el hombre se fue, la otra persona se había quedado muy
pensativa, asimilando todo lo que había sucedido durante el día.
Continuará…
N/A: Pobre Noah, ¿creen
que hizo lo correcto? ¿Cómo le estará yendo en su nuevo trabajo a nuestro lindo
cachorro? ¿Seto, se habrá salido con la suya de haber separado a su hermano de
su novio? ¿Logrará Bakura conquistar a Ryou? Todo esto y más no se lo pierdan
en los siguientes capítulos. Muchas gracias por leer esta interesante historia.
Quiero pedirles su ayuda, escojamos un bello nombre para el bebé de nuestro
cachorro, acepto sugerencias, no olviden dejarme sus comentarios y yo con mucho
gusto les responderé. No se pierdan mañana la continuación del próximo episodio.
Me
despido de ustedes cariñosamente dejándoles muchos besos virtuales.
Atte.:
KAT.
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