viernes, 27 de septiembre de 2019

Los Ojos... Son El Reflejo del Alma...






Capítulo 69: Confié en ti… Y me decepcionaste… II Parte.



Declaimer: Como siempre… Bla, bla, bla, bla, bla, bla… Los personajes de YU – GI – OH!, “No me pertenecen”… Chiquiris maquiris, son propiedad de su respectivo autor, abra cadabra, solamente hago este fic porque me encanta escribir, y que ustedes se diviertan de mis locuras… Es mi manera de expresar lo que siento, y tener la dicha de poderlo compartir con todos mis lectores…


******************************

Días después…

            Buenas tardes.

            Buenas tardes.

            ¿Se quedará a almorzar?

            Me gustaría, pero tengo mucho trabajo por hacer.

            Por favor quédese, y después se podrá ir a su trabajo ya comido.

            Siento raro que alguien se preocupe por mí.

            Pues no debería, además lo hago con mucho gusto.

            Eso lo sé muy bien Jou.

            En ese caso, vamos a la mesa para que desayunemos juntos.

            Estando con usted me siento como un niño pequeño y consentido.

            Entonces no desaproveche la oportunidad que se le está presentando, Seto. – Medio le sonrió.

            Tiene razón, solamente espero que no me vaya mal acostumbrar. – Le seguía la broma.

            No se preocupe, eso no sucederá.

Ambos se trataban con respeto y cariño y caminaban en dirección a donde estaba la mesa del comedor.

******************************

            Buenas tardes hijo.

            Buenas tardes padre.

            Siéntate por favor para que almuerces conmigo.

            Está bien, tengo algo de tiempo para quedarme a comer.

El joven se sentó en una de las sillas del comedor para estar con su padre.

            Últimamente has estado un poco deprimido, dime, ¿cómo vas en la universidad?

            Voy bien, todo bien. – Después de responder le da un sorbo al jugo de naranja.

            No te veo muy convencido que digamos.

            De verdad padre, voy muy bien en la universidad.

            Entiendo… ¿Tienes algún problema que no me has querido contar?

El joven suspiró profundamente.

            Me he peleado con mi mejor amigo.

            Ya veo, y eso es lo que te tiene tan deprimido.

            Si, padre.

            Bakura, no preguntaré el por qué ustedes se pelearon, porque confío en que podrás resolverlo, lo que sí puedo decirte es que si se presenta la oportunidad en que ustedes hagan las paces no la dejes ir, aprende a valorar la amistad que han tenido por años.

            Le agradezco por su consejo, padre.

            Si necesitas hablar con alguien sabes que puedes contar conmigo.

            Si, lo sé.

            Estoy muy orgulloso de ti, Bakura.

            Muchas gracias, padre.

******************************

            Buenas tardes mi amor.

            Buenas tardes. – Intentó levantarse pero no pudo al sentir dolor en su parte intima. – ¡Auch! – Murmuró bajito.

            No debes levantarte de la cama todavía, creo que nos excedimos al estarlo haciendo toda la mañana.

            Está bien, no te preocupes.

            No, no está bien Yūgi, detesto que salgas lastimado.

            Gracias por preocuparte por mí, creo que es normal que me duela ya que llevábamos algún tiempo sin hacerlo.

            Te agradezco que seas tan comprensivo conmigo.

            No tienes nada que agradecer, sabes que te amo.

            Yo también te amo, Yūgi. Ya que has despertado, te iré a preparar el baño.

            ¿No irás a la universidad?

            Claro que no, hoy pienso quedarme contigo todo el día.

            Muchas gracias, Yami.

******************************

            Buenas tardes hermano.

            Buenas tardes.

            Qué haces aquí a esta hora, normalmente almuerzas afuera.

            Decidí venir para que comiéramos juntos y a la vez conversar un poco.

            ¿Acaso hice algo malo?

            No Ryou, no has hecho nada malo, es más, estoy orgulloso de ti, Ishizu ya me contó que le has estado ayudando en el museo.

            No es para tanto hermano, solamente le ayudo parte de la mañana y parte de la tarde.

            No importa, te felicito por ayudarle a tu hermana.

            Sabes que me gusta hacerlo, sobre todo me ha llamado la atención conocer un poco de historia.

            Haces bien Ryou.

            ¿Y de qué quieres hablar conmigo?

            Almorcemos primero y luego platicamos.

            De acuerdo.

******************************

Una vez que habían comido y bañado, se quedaron en la habitación conversando un poco.

            ¿Por qué no me habías dicho que discutiste con tu amigo Bakura y con tu madre?

            No quería inquietarte amor, y no deseaba distraerte en tus estudios.

            Aun así me lo hubieras dicho. Ahora entiendo el por qué estabas todo molesto.

            Discúlpame por favor Yūgi.

            Está bien amor, no te preocupes. Cambiando de tema, de verdad Kaiba te dio algunos días libres.

            Así es.

            No sabes lo feliz que eso me hace, ahora que no estas yendo a tu trabajo y que ya no voy a la escuela, puedo verte más seguido.

            Yo también estoy feliz por eso mi amor. Yūgi, aprovechando que estamos solos hay algo que quiero preguntarte.

            Yami, puedes preguntarme lo que sea.

            En ese caso, quiero que seas honesto conmigo. – El menor asintió con la cabeza. – Es cierto que tu amiga Tea ha estado hablando mal de Joey.

            Yami, no arruines este momento, no quiero hablar de él, ni mucho menos que pronuncies su nombre.

            ¿Por qué Yūgi?

            Porque cada vez que hablas de él, siento que me haces a un lado.

            Tu sabes que eso no es cierto, solamente contéstame mi pregunta.

            Yo no sé quién te ha dicho tal cosa, pero Tea es incapaz de hablar mal de Joey. – En eso, recordó uno de los consejos que le había dado su amiga. – No quiero pelear contigo mi amor. – El tono de su voz cambió a una más cariñosa.

            Ni yo contigo amor, únicamente busco la verdad.

            De acuerdo, para que veas lo mucho que te amo te contaré todo lo que quieras saber. – Se acercó a él de manera seductora, se sentó sobre sus piernas y se inclinó hacia adelante para darle un beso en los labios, beso que no tardó en profundizar el mayor, mientras que el menor, había llevado una de sus manos a la entrepierna de su pareja y comenzaba a jugar con el pene para excitarlo.

            Aaaaahhhhh… Yu… Yūgi… – Soltó un leve gemido.

            ¿Te gusta? – Apretó con fuerza la base del pene y luego se lo jalaba para estimularlo más.

            Aaaaaahhhhh… Ssi… Si…

            ¿Quieres que me detenga? – Al decir eso último comenzó en estrujar los testículos con ímpetu.

            Basta… Yūgi… Aaaaahhhh… Sólo quiero que hablemos… Aaaaahhhhh…

            ¿Estás seguro? – Le susurró en su oído, posteriormente le mordió el lóbulo de su oreja, pero antes de detenerse, siguió masturbándolo más rápido para hacerlo acabar.

            Aaaahhhh… Aaaaaahhhhh… Aaaaaahhhhh… Más rápido Yūgi… Si, así, más… Aaaaahhhh... Aaaaahhhh, aaaaaahhhh, aaaaaaaaaaaaaahhhhhhh. – El mayor se retorcía de placer, su novio se había vuelto un experto en excitarlo y no tardó en correrse. – Aaaaahhhhh, aaaaaaaaaaaaaahhhhhh… Me… Me corro… Me corro… Yūūūūūūūūūūūūūūgiiiiii… AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHH.

Trataba de normalizar su respiración ante el inminente orgasmo que había tenido, y a la vez miraba como su novio se llevaba su mano a la boca para probar su esencia.

            Eres delicioso mi dulce Yami. – Lo veía lujuriosamente.

            Yūgi, no digas eso que me da pena. – Sentía su cara arder al rojo vivo.

            Si quieres que te conteste tus preguntas, tendrás que pasar por lo mismo. – Decía de manera seductiva, dejando al mayor boquiabierto por las ocurrencias de su novio.

******************************

            Ryou, llegó el momento de decirte que…

            Que cosa hermano, ya me estas preocupando.

            Hace algunos meses atrás, Kaiba me pidió un favor. – El menor le prestaba atención a su hermano. – Él quiere que lo acompañe a buscar a la hermana de Joey.

            ¿Piensas irte de viaje?

            Así es, pero será por poco tiempo, en lo que Kaiba y yo convencemos a la señora Wheeler que deje ir a su hija con nosotros.

            Si ese es el motivo de tu viaje, no me puedo negar que te vayas, aunque voy a extrañarte mucho.

            Tú también me harás mucha falta. Kaiba, hizo muy bien en esperar a que las clases terminaran y que estuvieran de vacaciones, de ese modo no te distraerías en tus estudios.

            Marik, no crees que mejor se hubieran ido cuando estaba en la escuela.

            ¿Por qué dices eso?

            Estando de vacaciones sentiré más tu ausencia.

            Oh mi pequeño, te prometo que no tardaré en regresar.

            No te preocupes hermano, lo importante es que ustedes puedan traer a Serenity, estoy seguro que Joey se pondrá muy contento.

            Yo también así lo creo, y durante mi ausencia quiero que por favor le hagas caso a nuestra hermana, también le pedí ayuda a Malik que estuviera al pendiente de ti.

            Hermano, ya no soy un bebé, se cuidarme solo. Acaso no confías en mí.

            Ryou, créeme que confío plenamente en ti, pero entiéndeme tú también, mi deber es cuidarte, si algo te llegara a pasar, jamás me lo perdonaría.

            Tranquilo hermano, haré todo lo que me dices, puedes irte sin problemas.

            Muchas gracias Ryou. – Se levantó de la silla para irle a dar un beso en la frente. – Te quiero mucho.

            Y yo a ti Marik, te quiero un montón.

            Quieres que te traiga alguna cosa en particular.

            No es necesario, no quiero nada.

            De acuerdo, eso era todo lo que tenía que decirte.

            Te agradezco que lo hayas dicho.

            Era mi deber hacerlo. – Medio le sonrió.

            Por fin conoceré a la hermana de Joey.

            No estoy seguro si la podrás conocer.

            ¿Por qué?

            Porque no sé si su madre le dé permiso de quedarse algunos días.

El menor hizo un puchero de niño infantil, provocándole una pequeña sonrisa al mayor.

            No pongas esa cara.

            Es que ansío conocerla.

            Hagamos algo, si ella se queda unos días te prometo que te llevaré a conocerla, ¿de acuerdo?

            Sí, sí, sí, sí, sí.

            En eso quedamos entonces, ahora si ya debo irme para la oficina.

            Vete con cuidado hermano.

            Claro que si Ryou.

******************************

Horas más tarde…

Finalmente el día terminó trayendo consigo la noche, algunos llegaban a sus hogares todos cansados y otros contentos de haber pasado un día inolvidable.

            Muchas gracias por traerme Noah.

            No tienes nada que agradecer Mokuba.

            Pasamos una tarde increíble.

            Sí, tienes razón.

            Me gusta estar contigo, pero lo que más me encanta es tener que salir sin preocuparnos por estudiar.

            Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, eso es verdad y lo bueno es que mi padre me deja salir contigo.

            También mi hermano me deja salir contigo.

            Te amo mucho Mokuba.

            Y yo a ti Noah. – Se acercó a él para darle un beso en los labios.

            Ejem, ejem, ejem. – Interrumpió el chofer. – Joven Pegasus, se hace tarde y ya es hora de irnos.

            No me puedo quedar un ratito más. – Respondía con tristeza.

            Ánimo Noah, mañana podremos vernos de nuevo.

            Es verdad. – Medio le sonrió.

            Hasta mañana mi amor.

            Hasta mañana. – Contestó todo sonrojado.

En cuanto se fueron, el pelinegro entró a la mansión siendo recibido por el mayordomo.

            Buenas noches joven Kaiba.

            Muy buenas noches, ¿ya llegó mi hermano?

            Si.

            ¡Qué bien! En ese caso iré a verlo.

            Espere por favor.

            ¿Qué sucede?

            El señor Kaiba dio la orden de no ser molestado, dijo que venía muy cansado y se fue a dormir temprano.

            ¿Qué? ¿Tan temprano? A penas son las 8:00 de la noche. Bueno ni modo, lo tendré que ver mañana, gracias por avisarme.

            De nada, le gustaría cenar en su cuarto o prefiere hacerlo en la mesa del comedor.

            Cené en casa de mi novio, así que por favor guárdenmela para mañana.

            Como usted ordene joven. Con su permiso me retiro.

            Pase buenas noches.

            Buenas noches joven.

******************************

Iba conduciendo un Porsche alquilado, venia de dejar a su novio, en el camino pensaba en todo lo que había ocurrido ese día, no dejaba de recordar lo bien que se la pasó con su pareja, sonreía de oreja a oreja. Se detuvo en un alto y aprovechó el momento para mandarle un mensaje al amor de su vida, en eso logró ver a uno de sus amigos que estaba cruzando la calle.

            ¿Tristán? – Murmuró para sí mismo y luego le gritó. – ¡TRISTÁN!

El mencionado volteó a ver rápidamente para buscar la persona que lo estaba llamando.

            ¿Yami, qué haces aquí?

            Iba hacerte la misma pregunta.

            Acabo de salir de trabajar del negocio de mi padre, y como mi motocicleta se averió pues estaba a punto de esperar a que pasara el bus para irme a mi casa.

            No sabía que trabajabas, pero haces bien en ayudarle a tu padre. Fui a dejar a Yūgi a su casa, si quieres te llevo.

            No, como crees.

            Anda, súbete, y de paso buscamos algún lugar para comer, porque la verdad me estoy muriendo de hambre.

            Está bien, acepto tu oferta porque yo también tengo mucha hambre. – Medio se sonrojó de lo apenado que se sentía.

            Excelente, así podremos conversar un poco.

            Bien, vamos.

En cuanto se subió al vehículo, el mayor se puso en marcha.

******************************

            Seto, Seto, Seto, anda despierta por favor.

El aludido comenzaba a moverse de un lado a otro en la cama.

            Seto, Seto despierta.

            ¿Quién me está llamando? – Se preguntaba somnoliento.

            Seto, no tengo mucho tiempo, anda despierta.

            Esa voz, conozco esa voz. – Empezó medio abrir sus ojos. – ¿Cachorro? ¿Qué haces en mi habitación? ¿Cómo llegaste hasta aquí? De seguro Mokuba tiene que ver en esto.

            Seto, solamente he venido para darte las gracias.

            ¿Las gracias? ¿De qué estás hablando? No te entiendo.

            Así es, quiero darte las gracias por todo lo que has hecho por mí. Ahora sí, ya debo irme.

            ¿Irte, pero a dónde?

            Adiós, mi lindo gatito. – Medio le sonrió e instantáneamente desapareció.

Continuará…


N/A: Quiero agradecer infinitamente a todas las personas que me dejan sus comentarios en mi blog. Entre ellas están: Shinigami, Anónimo,  Unknown, Jaden_Yuki_19, Kar3nFdZ, también agradezco a todas las personas que se toman su tiempo para leer esta historia. Mil gracias a todos y cada uno de ustedes por apoyarme y seguirme hasta el final de esta obra. Cualquier duda que tengan, no olviden dejarme sus comentarios que yo con mucho gusto les responderé.

¿Qué creen que haya sucedido? ¿Habrá sido un fantasma? ¿Qué tendrá que decirle? ¿Se estará volviendo loco el gato pulgoso? Todo esto y más lo sabrán en el próximo capítulo, no se lo deben de perder.


Nos seguiremos leyendo en la continuación, hasta pronto y pórtense bien.

Atte.:

         KAT.


P.D.: Déjenme comunicarles que he tenido varias peticiones, hay lectores que me están sugiriendo que me haga un canal de youtube, la verdad es que no sé cómo hacerlo, ni qué decir en el vídeo, y ni siquiera sé si tengo el valor suficiente para salir en uno. (Kat entra en pánico).


Podrían ayudarme a darme ideas por favor, estaré eternamente agradecida si me ayudan con este pequeño problema.

sábado, 21 de septiembre de 2019

CORTO CIRCUITO EN LA CIUDAD DE SAN MIGUEL






El día viernes 20 de septiembre del presente año, pasé uno de los mayores sustos de mi vida, gracias a Dios nadie resultó herido y no se quemó ninguna casa. Lo que viví esa noche, no se lo deseo a nadie, el poste que cogió fuego es el que está enfrente de mi casa. Las explosiones fueron fuertes y aterradoras.

Todos los cables eléctricos se venían abajo con grandes llamaradas de fuego, créanme que esta situación solamente lo había visto en las películas. Pero en la vida real, todo es totalmente diferente, incluso el llamado de emergencia se tardó mucho en llegar. 

Primero Dios, no vuelva a pasar por lo mismo jamás...