miércoles, 15 de abril de 2020

SIN CACHORRO… NO HAY NAVIDAD…




Capítulo 24: No me importa tu pasado…


Notas del capítulo: Todos los seres humanos solemos cometer errores, unos peores que otros, y con el paso del tiempo cuando comenzamos a ver la vida de otra manera, nos damos cuenta de lo inmaduros que éramos al comportarnos de manera incorrectas. Hay personas que se avergüenzan de las equivocaciones que han cometido en sus vidas, y no quieren que nadie lo sepa, temen a ser rechazados, a que otros los juzguen sin saber, a sufrir bulín o discriminación, son muchas las razones del por qué no nos gusta hablar sobre nuestras vidas.

Nos encerramos tanto que no nos damos la oportunidad de volver a confiar en las demás personas, nosotros mismos creamos una barrera difícil de derribar, y nos aislamos en nuestro propio mundo sin darle espacio a nadie, entonces….

¿Qué sucede cuando la vida nos quiere dar una segunda oportunidad? ¿Cómo podríamos abrirle nuestro corazón ante las personas que de verdad nos quiere ayudar? ¿De qué manera se puede recuperar la confianza en las demás personas? ¿De qué manera podremos amar a alguien sin ser lastimados de nuevo? ¿Estaremos listos para poder comenzar una nueva relación?

A veces, sin darnos cuenta conocemos a ese ser especial que nos valora, nos respeta, y nos hace sentir cómodo con nosotros mismos, y lo más importante es que nos demuestra cuanto nos quiere al decirnos que no le importa nuestro pasado, y que lo único que desea es pasar más tiempo con nosotros…


AVISO IMPORTANTE: No me hago responsable por romperles su kokoro (corazón). Soldado avisado, no muere en guerra, leer bajo su propio riesgo.


Declaimer: Noticia de último momento… “YU – GI – OH!, No es mío”… Mucho menos sus personajes… Son propiedad de su respectivo autor, pero toda la trama de esta historia si es creada por mí. Amo inventarles historias nuevas a mis queridos personajes, es una manera de expresar lo que siento, y tener la dicha de poderlo compartir con todos ustedes.  ^_^

******************************

Días después…

Un hombre de estatura alta, cabellos castaños, y ojos azules, estaba en su oficina tratando de concentrarse en su trabajo, pero su mente se lo impedía hacerlo, no dejaba de pensar una y otra vez la discusión que había tenido con su hermano días atrás.

         “¿Qué pasaría si Joey estuviera embarazado?” – Era la pregunta que resonaba constantemente en su cabeza. – ¿Un hijo? Eso sería maravilloso, si él estuviera embarazado soy capaz de perdonarlo, con gusto lo recibiría con los brazos abiertos, mi cachorro tendría un lindo cachorrito. – Sonrió de felicidad al estarse imaginando todo lo que pensaba. – No, no debo pensar en tonterías, él no puede tener hijos, y si pudiera, de seguro que ese engendro no llevaría mi sangre. Y esa duda me estaría matando por dentro. ¿Por qué me engañaste? ¿Por qué rompiste mi confianza? Es que no te das cuenta que has acabado con mi vida, yo te amaba, te lo di todo, me entregué a ti en cuerpo y alma… ¿Y es así cómo me pagas? Burlándote de mí a mis espaldas, engañándome con esa mujer. – Se levantó bruscamente de la silla de su escritorio, caminó hacia un gran ventanal que había en su oficina, para poder mirar el cielo. – ¿Cuántas veces me habrás engañado? ¿Con cuántos hombres te habrás acostado ya? No sólo destruiste nuestro matrimonio, sino que además has destruido nuestros sueños, y eso a ti no te ha importado. – Unas finas lágrimas comenzaban a salir de sus hermosos ojos azules. – No puedo verte en estos momentos, es que si lo hago, soy capaz de hacerte daño con mis propias manos, y eso es algo que quiero evitar. Me dio tanto coraje cuando ese hombre me gritó en mi propia cara que yo no te merecía, que cómo era posible que pudieras aguantarme por tantos años, y eso es algo que no he dejado de pensar. Sé que he cometido muchos errores, y que muchas veces te hice llorar sin querer, pero considero que no era motivo para que me engañaras de esta manera, ¿por qué no me lo dijiste a la cara? ¿Por qué tuviste que esperar a que yo te descubriera? Pudimos haberlo hablado, y tal vez juntos hubiéramos buscado una solución. También sé que nuestro matrimonio no era perfecto, tuvimos nuestras bajas y altas, pero aun así nunca dejé de amarte, a veces pienso que yo tuve la culpa, casi no te dedicaba tiempo, pero creí que me comprenderías, que me apoyarías cuando te dije que la Corporación Kaiba estaba teniendo un déficit en el mercado. Por esa razón es que me dediqué por completo a mi trabajo, había días en que llegaba cansado, y estresado. De verdad te digo que no era mi intención desquitarme contigo, no he dejado de pensar en aquel incidente, cuando estábamos por cumplir nuestro tercer aniversario de bodas.

FLASH BACK

         Hola amor, ¿qué tal tu día?

         Horrible, ni te lo imaginas. – Contestó molesto.

         Tengo una sorpresa para ti, ya verás que te va gustar. – Hablaba todo ilusionado.

         Ahora no cachorro, quizás otro día.

         Acompáñame por favor, te prometo que no te quitaré mucho tiempo.

         Bien, pero que sea rápido.

El rubio guio a su esposo hasta una habitación, y antes de entrar le pidió un favor.

         Cierra los ojos.

         Te quieres dar prisa. – Seguía molesto.

         Por favor, sólo será un momento.

         De acuerdo.

Una vez que entraron, el ojimiel le indicó que ya los podía abrir, en cuanto este los abrió, no podía creer lo que estaba viendo.

         ¿Qué significa esto?

         No te vayas a enojar por favor, te acuerdas cuando te dije que me gustaría tener un bebé.

         Si, también recuerdo que te dije que no quería ningún bebé por el momento.

         Sé que por el momento estas pasando por una difícil situación en la empresa, pero estoy seguro que con un bebito en casa las cosas podrían ser diferentes. Y… Pues… Pues… – Buscaba la manera de decírselo sin que el otro se alterara. – Llevo meses intentando que aprobaran nuestra solicitud de adopción, y esta mañana me acaban de aprobarla. – Le mostraba la hoja que tenía en sus manos. – Seto, tú y yo podemos adoptar un hijo.

         TE HAS VUELTO LOCO, EN QUÉ CABEZA TE CABE QUE YO QUIERO ADOPTAR UN BEBÉ.

         Cálmate por favor.

         NO ERES MÁS QUE UN ESTÚPIDO PERRO, ¿POR QUÉ DEMONIOS TIENES QUE HACER LAS COSAS A TU MANERA? ¿POR QUÉ NO RESPETAS MIS DECISIONES? SABES MUY BIEN QUE NO ME GUSTA HABLAR DE LO MISMO DOS VECES. – El hombre estaba furioso, no medía sus palabras y ni de lo que estaba a punto de hacer. – AHORA MISMO TE ENSEÑARÉ A QUE DEBES DE RESPETAR LO QUE DIGO, Y QUE NO HAGAS LAS COSAS A MIS ESPALDAS.

         No Seto, ¿qué haces? No lo hagas por favor.

El castaño comenzaba a romper todo lo que había dentro de la habitación, el lugar estaba decorado con muchas cosas hermosas para un bebé, había una cuna, un mueble para cambiarle el pañal, una mecedora, la ventana tenía hermosas cortinas, otro pequeño mueble para guardarle su ropita, juguetes, todo era muy bello. Lo que el ojiazul no sabía, era que muchas de las cosas que había en ese cuarto, Joey lo había decorado con sus propias manos.

         CON ESTO APRENDERÁS A NO TOMAR DECISIONES QUE NO TE CORRESPONDEN, TAL VEZ ASÍ APRENDAS A RESPETARME, A QUE CUANDO DIGA NO, ES UN NO.

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Por favor, detente… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…  Por favor, no lo hagas… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Por favor Seto, te lo suplico… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… No lo hagas… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… ¿Por qué destruyes el cuarto de nuestro hijo?... Snif, snif, snif, snif, snif, snif…

         YA CÁLLATE PERRO, NOSOTROS NO TENEMOS HIJO, ENTIÉNDELO.

Seguía rompiendo las cosas, estaba por hacer pedazos la cuna, pero el rubio se le tiró encima para detenerlo, esto ocasionó que el mayor lo empujara con fuerza lejos de él, haciendo que su cachorro cayera con violencia al suelo.

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Ya no sigas… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Por favor… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Basta por favor… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Por lo que más quieras, no destruyas la habitación… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…  – Se encontraba sentado en el suelo viendo como su esposo destruía todo.

         PERRO ESTÚPIDO, ESTO TE PASA POR NO HACERME CASO A LAS COSAS QUE TE DIGO, ESTO TE PASA POR ACTUAR A MIS ESPALDAS, POR NO CONSULTARME PRIMERO TUS ESTÚPIDAS IDEAS. Y LA VERDAD ES QUE YA ME ESTOY CANSANDO DE QUE SIEMPRE HACES LO QUE TE DA LA GANA. AHORA MIRA LO QUE HAGO CON TU MALDITA SOLICITUD.

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif… NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO... Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif…  – Gritó destrozado al ver como rompía la página en mil pedazos.

         Espero que hayas aprendido la lección perro. – Salió del lugar sin importarle dejarlo tirado en el suelo, todo lastimado, no físicamente, si no que había herido su corazón y destrozado sus ilusiones.

Al cabo de una hora, el rubio comenzó a levantarse del suelo lentamente, miraba con tristeza como había quedado la habitación toda hecha pedazos, los juguetes estaban rotos, las cortinas, y la ropa rasgadas, los muebles y la cuna destrozados, no quedó nada.

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif… ¿Por qué Seto?... Snif, snif, snif, snif, snif, snif…  ¿Por qué fuiste tan cruel conmigo?... Snif, snif, snif, snif, snif, snif… ¿Por qué destruiste todo?... Snif, snif, snif, snif, snif, snif… ¿Por qué no te das cuenta que lo único que quería era verte feliz y salvar nuestro matrimonio?... Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Pensé que con la llegada de un bebito a esta mansión, tú te pondrías muy feliz, y ya no viajarías tanto… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Me equivoqué… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… – Salió de esa habitación con el corazón roto.

Los días fueron pasando, nadie volvió a hablar de lo ocurrido, pero algo había cambiado, y es que Joey comenzaba a temerle a su esposo, trataba de evitarlo lo más que podía, en cambio el ojiazul se metía cada vez más en su trabajo. Al cabo de dos meses, cuando él llegaba a la mansión después de trabajar, le pidió a uno de los empleados que llamaran a su pareja. Uno de sus trabajadores le dijo que el joven llevaba días sin salir de su habitación, y que nadie había logrado que probara alimento, ni siquiera su hermano. Al escuchar la terrible noticia, salió hecho un cohete hacia la habitación de huéspedes, ya que desde el  incidente, su cachorro ya no dormía con él, porque seguía enojado por lo que le había hecho.

Al llegar a la habitación…

         Joey… – Intentó llamarlo con un susurro, el joven se encontraba acostado de medio lado en la cama, dándole la espalda al recién llegado. – Joey... – Usó el tono de su voz un poco más fuerte. – Cachorro, no me digas que sigues enojado por lo que pasó. – Trataba de llamar su atención. – Joey, escúchame…

         Vete… – Se escuchó un pequeño sollozo.

         Cachorro… Yo… Lo siento tanto, perdóname por lo que hice.

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Ya no importa… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Te perdono… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Ahora vete, quiero estar solo… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…

         Amor, fui un estúpido por haberme comportado así contigo, tú no tienes la culpa por los problemas que estoy pasando en la empresa, y la verdad es que no fue justo desquitarme contigo.

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Por favor… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Vete… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…

         No me iré hasta que me veas a los ojos. Mírame por favor, mírame Joey.

El aludido se daba la media vuelta lentamente, el castaño abrió los ojos como platos al ver a su esposo todo demacrado, pálido y triste. Tenía el mismo semblante de como cuando llegó por primera vez a su mansión. El rubio al notar la constante mirada de su neko, decidió por darle la espalda de nuevo, pero el otro se apresuró para acercársele y abrazarlo con todas sus fuerzas.

         Perdóname, perdóname por favor, yo no quería lastimarte… Yo…  – Sabía muy bien que no tenía palabras para lograr que lo perdonara, fue ahí que empezó a entender que sin querer había roto el corazón de la persona que más amaba en la vida. Y no le bastó con rompérselo, sino que también acabó con la ilusión que el tenia de poderle dar un hijo, un heredero.

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif… No tengo nada que perdonarte… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Perdóname tú a mí por ser un fracasado… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Ni siquiera soy capaz de darte un hijo… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Ni para eso sirvo… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…

         No cachorro, no digas eso… – Sentía un gran nudo en su garganta, se odiaba así mismo por ser el causante del sufrimiento de su cachorro. – Tú no eres ningún fracasado, y yo no tengo nada que perdonarte. – Sus ojos comenzaban a humedecerse. – Déjame enmendar mi error, pídeme lo que quieras, haré cualquier cosa para que puedas perdonarme. – Lo abrazaba sobreprotectoramente, y a la vez acariciaba sus hermosos cabellos dorados.

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif…  Yo… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…  No sé qué decir… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…

         Dime al menos que no me odias, que todavía me amas. – Lo miraba con ternura.

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Sabes muy bien que te amo… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…

         Ven, es mejor que te saque de aquí para que puedas comer algo. Anda levántate de la cama. – Lo ayudaba a ponerse de pie, una vez que lo hizo, los dos empezaron a caminar, pero a mitad del camino el rubio se desmayó, dejando a un neko todo preocupado.    

FIN DEL FLASHBACK

         Desde ese día cuidé de ti hasta que te recuperaste, las cosas volvieron a la normalidad, bueno, se podría decir que casi, dejé que pasara el tiempo, luego intentaba reanudar la conversación de la adopción, pero era un tema bastante delicado porque tú te ponías mal, te hacia recordar lo ocurrido de ese día, pasaron los meses, y años y me olvidé del asunto, y al parecer tu también lograste olvidarlo porque ninguno de nosotros volvió a hablar del tema. Sé que cometí muchos errores, pero no había necesidad de que me engañaras, no entiendo por qué jugaste conmigo, por qué me decías que me amabas cuando en realidad no era verdad, tal parece que te he perdido, sin ti me siento vacío y solo, no sé qué hacer, una parte de mí, me pide a gritos que vaya a buscarte, pero la otra parte teme encontrarte de nuevo con esa mujer. Maldición, odio sentirme tan vulnerable, ¿y si Mokuba tiene razón? ¿Y si voy a buscarlo para hablar con él? ¿Si lo hago, querrá verme? Demonios, nuevamente me estoy comportando como una estúpida colegiala, no sé por qué me pongo nervioso de sólo pensar que lo volveré a tener cerca de mí. Antes de tomar una decisión, primero hablaré con… – Todo esto se lo decía así mismo, sacó su celular de la bolsa de adelante de su pantalón, comenzó a marcar un número y esperó a que le contestaran.

******************************

         Bakura, ¿podemos hablar?

         Por supuesto que sí, siéntese por favor.

         Gracias.

         ¿Desea algo de tomar?

         No gracias.

         Dígame, sobre qué quiere hablar conmigo.

         En estos días he estado pensando todo lo que me ha dicho.

         Ya veo… – Hubo un pequeño silencio. – ¿Y qué ha decidido Ryou?

         Seré honesto con usted.

         Lo escucho.

         Usted me gusta, me gusta mucho.

El hombre medio sonrió al escuchar esas palabras.

         ¿Pero?

         Yo… No me siento capaz de volver a tener una relación, es sólo que…

         Ryou, está bien si no quieres decirme, yo…

         Por favor, déjeme terminar. – Lo interrumpió de golpe.

         Discúlpeme, continúe por favor.

         Le agradezco tanto por todo lo que ha hecho por mí, y a la vez le agradezco por ayudar a Joey, créame que estoy muy agradecido por todo el apoyo que nos ha dado, y sé que lo ha hecho sin condiciones y sin pedir nada a cambio. El caso es… – Trataba de ordenar sus ideas, se sentía algo nervioso al tratar de sacar sus sentimientos. – Lo que quiero decir es que, no entiendo cómo alguien cómo usted se ha podido fijar en alguien como yo.

         Ryou, desde que lo vi por primera vez, supe de inmediato que usted es una persona especial, es luchadora, no se da por vencido tan fácilmente, hace todo lo posible por superarse todos los días, eres honesto, responsable, pero sobre todo… He notado que tienes un gran corazón, y de eso a muchas otras cualidades que tienes es que sin querer me enamoré de ti.

         ¿Se enamoró de mí?

         Así es, hace mucho tiempo que quería decirle que lo amo. – La otra persona se sonrojó al escuchar esa palabra. – Ryou, ¿quieres ser mi novio? – En cuanto le hizo la pregunta, el joven empezó a llorar, haciendo que el otro se preocupara un poco. – Por favor no llores, mi intención no era lastimarlo.

         Lo sé, es sólo que jamás me imaginé que usted me pediría algo así.

         No tienes que responderme ahora, porque no te das un poco de tiempo para que puedas darme una respuesta.

         No es necesario pensarlo, me gustaría ser su novio, lo malo es que usted debe saber que yo tengo un pasado muy amargo. – Tenía la mirada baja. – Un pasado el cual me avergüenza mucho y no me atrevo a contárselo a nadie. – Gruesas lágrimas salían de sus ojos.

         Oh Ryou. – Se levantó de su silla para irlo abrazar. – No dejes que eso te atormente, hey, mírame por favor. – Levantaba la mirada poco a poco. – Debes saber que todos tenemos un pasado, unos peores que otros, pero eso hay que dejarlo atrás, y de una vez te digo que no me importa lo que hayas hecho en el pasado, no me importa cómo fue tu vida anterior, porque lo único que me importa es conocer el Ryou del presente, el Ryou que estoy viendo y abrazando en estos momentos.

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif… ¿De verdad está hablando en serio? – Lo miraba fijamente a los ojos.

         Estoy hablando muy en serio, y así como tú tienes tu secreto, igual yo tengo el mío, lo único es que temo que tú no me puedas perdonar si llegas a descubrirlo.

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Pero… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Me acaba de decir que todos tenemos un pasado, unos peores que otros, y no creo que usted haya tenido una vida tan complicada como la mía.

         Es posible que tengas razón, pero eso se sabrá a su debido tiempo. Lo importante ahora es disfrutar de este momento, y vivir la vida que decidimos llevar actualmente. – Le limpiaba las lágrimas con los pulgares de sus manos. – ¿Qué dices? ¿Aceptas ser mi novio?


Continuará…


N/A: ¿Qué respuesta le dará Ryou? ¿Qué clase de pasado habrán tenido ellos? ¿Seto, podrá perdonar a su cachorro? ¿Seto, descubrirá el embarazo de su esposo? ¿Se descubrirá quien es la mujer misteriosa? Todo esto y más lo sabrán es los siguientes capítulos, los invito a que no se pierdan la continuación. Muchas gracias por leer esta historia, no olviden dejar sus comentarios, debido a sus sugerencias que me dejen me ayudarán a que siga mejorando cada vez más.

Me despido cordialmente de cada uno de ustedes, les mando muchos besos virtuales y un fuerte abrazo virtual.

Atte.:

          KAT.



P.D.: Quiero agradecerles de todo corazón que me hayan acompañado en la primera fase de este proyecto, a partir de mañana comenzará la segunda fase, y es que empezaré a subir nuevos capítulos de la siguiente historia titulada: La leyenda del monstruo de ojos rojos. Invitarlos para que me acompañen en esta nueva aventura, y a la vez decirles que me digan que historia quieren que continúe al terminar la fase dos. Todas sus sugerencias y comentarios que me dejen los tomaré muy en cuenta.



No hay comentarios:

Publicar un comentario