viernes, 3 de abril de 2020

SIN CACHORRO… NO HAY NAVIDAD…





Capítulo 12: Mi intención era protegerte…


Notas del capítulo: Hay ocasiones en que buscamos la manera de proteger a un ser querido para que no le pase nada, para que pueda salir adelante en su vida, evitamos que no ande en malos pasos, etc. Sin embargo, las cosas en exceso, se nos puede salir de las manos, y en vez de protegerlos, terminamos por lastimarlos…


Declaimer: Noticia de último momento… “YU – GI – OH!, No es mío”… Mucho menos sus personajes… Son propiedad de su respectivo autor, pero toda la trama de esta historia si es creada por mí. Amo inventarles historias nuevas a mis queridos personajes, es una manera de expresar lo que siento, y tener la dicha de poderlo compartir con todos ustedes.  ^_^

******************************

Un mes después…

Un hombre de alta estatura, piel morena, cabellos castaños, y ojos azules, estaba trabajando en su oficina, esta persona se miraba un poquito demacrada, como si llevara días sin poder dormir, había perdido algo de peso, y se le notaba claramente las ojeras que tenía de cansancio. Dejó por un momento lo que estaba haciendo, gruñó para sí mismo ya que no se estaba concentrando al cien por ciento, tenía muchas cosas en qué pensar, pero únicamente le inquietaba una de ellas.

         “Desde que mi hermano llegó a la mansión no ha sido el mismo de antes, pasó días que no quería salir de su habitación, se rehusaba a comer, y las pocas veces que salía andaba por toda la residencia como si fuera un zombi. Me duele verlo de esa manera, pero estoy seguro que él, podrá superar la ruptura de ese bueno para nada. Aunque debo de admitir que me sorprendió mucho que fuera el quien tomara la iniciativa de cortar con mi hermano, de seguro lo hizo para quedar bien conmigo, pero que ni crea que lo voy a perdonar por haberse fijado en Mokuba. Habiendo tantos jóvenes en el mundo no se pudo fijar en alguien más”. – Todo esto lo pensaba para sí mismo. – “Sólo quiero lo mejor para mi hermano, él se merece un joven que pueda brindarle todas las comodidades, y lujos a los que él está acostumbrado, no me gustaría que Mokuba trabajara tanto en la vida, que no pasara por las mismas cosas que yo tuve que pasar, y que no cometa los mismos errores que yo he cometido. Tarde o temprano deberá entender que el no pertenece a esa clase social tan mediocre, que no es necesario mezclarse con esa clase de gente, lo que mi hermano necesita es irse de viaje, y olvidarse de todo por algún tiempo. Eso le ayudaría bastante para despejar su mente, y abrir sus ojos. A pesar que ya ha pasado un mes, todavía lo sigo viendo deprimido”. – Su mente le hacía recordar la noche en que su hermano había llegado a la mansión…

FLASH BACK

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Seto…

         ¿Mokuba, qué fue lo que te pasó? – Preguntó sorprendido, e inmediatamente salía a su encuentro.

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Tenías razón… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Tenías razón en todo… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Debí de haberte escuchado… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Perdóname pro haber sido un grandísimo tonto… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…

         Shhhh… Cálmate por favor, vamos a la sala para que ahí me cuentes todo. – El menor asintió con la cabeza, y caminó en dirección al lugar indicado, el castaño le dijo a uno de los sirvientes que le trajeran un vaso con agua a su hermano.

Una vez que llegaron…

         ¿Qué fue lo que sucedió? – Se atrevió a cuestionar a su hermano.

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Noah y yo tuvimos una fuerte discusión… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Ambos nos dijimos cosas desagradables… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Y todo por haberme preocupado por él… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…

         No llores hermano. – Le ofrecía su pañuelo.

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Hace días, Noah había estado actuando muy raro, se alejaba de mí y casi no me dirigía la palabra… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…  

         ¿Y luego?

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Pues, de repente sin que ni para qué me dijo que ya no me amaba… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… – Su llanto se intensificó, el joven se miraba devastado.

         Mokuba, quiero que te calmes, y me expliques bien lo que sucedió.

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Tu tenías razón en todo, me siento un estúpido por no haberte echo caso cuando me lo advertiste… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Noah me echó en cara que andaba conmigo solamente por mi dinero… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Creí que me amaba, creí que no le importaba el dinero, ni de qué familia provengo… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…  Me gritó que yo era un chiquillo inmaduro, caprichoso, odioso, que podía sacar de quicio a cualquiera… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…  

El CEO sentía un gran coraje al escuchar a su hermano, ¿cómo era posible que ese estúpido hubiera llegado a lastimarlo de esa manera? Eso era algo imperdonable, ya después arreglaría cuentas con ese maldito miserable.

         Mokuba, odio decirte esto, pero… Te lo dije… Te dije que no anduvieras con ese tipo de personas, son unos oportunistas, que lo único que les interesa es el dinero. Ese imbécil se aprovechó de tu bondad, solamente te engatusó para sacarte todo el dinero que él quería, y tú caíste en su trampa.

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Creí que me amaba… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…

         TONTERÍAS, ESA CLASE DE GENTE NO QUIEREN A NADIE, LO ÚNICO QUE LES INTERESA ES EL DINERO, Y QUE ALGUIEN LOS MANTENGA PARA TENER UNA BUENA VIDA. DATE CUENTA QUE ESE MALDITO TE UTILIZÓ PARA SUS PROPIOS PROPÓSITOS. EL JAMÁS TE QUISO Y NUNCA TE QUERRÁ. 

El pelinegro sentía como su corazón se desgarraba al escuchar las palabras de su hermano, estaba siendo muy duro con él, pero sabía que lo hacía por su bienestar.

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Tal vez tengas razón hermano… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Pero yo todavía lo sigo amando… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…

         Mokuba. – Lo agarró del mentón para que lo viera a los ojos. – Entiendo cómo te sientes en estos momentos, pero escúchame por favor, tú eres muy joven todavía, y estoy seguro que podrás superar este dolor tan grande que estas sintiendo, ya verás que con el tiempo te olvidarás de ese idiota y lograrás conocer a alguien más. Sólo es cuestión de que te des la oportunidad para que encuentres esa persona especial, y te aseguro que cuando lo hayas encontrado, serás inmensamente feliz a su lado. – Le limpiaba sus lágrimas con sus manos, el menor lo miraba con tristeza a los ojos, posteriormente medio le sonrió.

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Gracias hermano…

         No hay nada que agradecerme, por ti haría lo que fuera.

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Lo sé.

         Es mejor que vayas a descansar, mañana podrás desempacar, y estarás más tranquilo.

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Si. – Le da un fuerte abrazo. – Gracias por escucharme.

         Te quiero mucho Mokuba.

         Y yo a ti.

FIN DEL FLASHBACK

         “Ese estúpido está teniendo lo que se merece, nunca debió de haberme desafiado, no es más que un insolente, haré que se arrepienta de haber puesto sus asquerosos ojos en mi hermano. Esto todavía no se ha acabado”. – Todo esto lo pensaba para sí mismo, se notaba a leguas que estaba furioso, en eso, sintió un terrible dolor en su estómago, se levantó rápidamente de la silla de su escritorio para salir corriendo al baño.

******************************

         Hola joven Ryou.

         Hola Bakura.

         ¿Le gustaría almorzar conmigo?

         Yo… Este… Pues…

El hombre medio sonrió al verlo todo nervioso.

         ¿Qué sucede? ¿Acaso no saldrá a almorzar?

         Sí, es sólo que aún tengo mucho trabajo por hacer, y…

         No se preocupe por eso, si usted quiere yo le puedo ayudar después del almuerzo, y así terminará más rápido.

         Pero… No me parece justo que lo ponga hacer mi trabajo.

         Oh vamos, no piense en eso, mejor considérelo como una gratitud por acompañarme a comer.

         Está bien. – Contestó apenado.

         Vamos a comer entonces.

         Puedo preguntarle, ¿a dónde iremos?

         Quiero que vayamos al restaurante donde trabaja Joey.

         ¿Qué? No podemos ir ahí.

         ¿Por qué no?

         Joey me dijo que ese lugar es muy elegante, y que la comida que hacen ahí es carísima… Y la verdad es que no podría pagar un plato de comida. – Musitó.

         No se preocupe, esta vez yo lo invito. – Comentó dándole a entender que lo había escuchado.

         No, como cree, de ninguna manera…

         Ryou, déjeme invitarlo por favor, recuerde que le dije que lo compensaría. – Lo interrumpió de golpe.

         Pero…

         Por favor, y de una vez podemos invitar a tu amigo para que coma con nosotros.

         ¿En serio? – Preguntó todo ilusionado.

         Claro que sí.

         De acuerdo, vamos.

Ambos caminaban, uno iba nervioso y el otro contento por haberse salido con la suya.

******************************

Mansión Kaiba…

         Te vez demacrado Mokuba. – Se decía así mismo mientras se miraba al espejo. – Tal vez mi hermano tenga razón, debo continuar con mi vida. – Manifestaba con tristeza. – ¿Por qué Noah? ¿Por qué me dijiste que ya no me amabas? ¿Por qué me engañaste todo este tiempo? ¿Por qué me utilizaste? ¿Cómo pudiste romper de esta manera mi corazón? No lo entiendo, de verdad que no lo entiendo. El tiempo que llevo viviendo en la mansión no he sabido nada de ti, ni siquiera me has llamado, y cuando fui a la universidad no te he visto. ¿Acaso me estará evadiendo? ¿Realmente te quieres olvidar de mí? – Unas finas lágrimas comenzaban a salir de sus ojos. – Definitivamente algo tuvo que pasarle, todo esto comenzó desde que lo vi tan callado ese día. No seas estúpido Mokuba, ¿por qué sigues pensando en él? Acéptalo, Noah salía contigo por conveniencia. No, no puedo creerlo, no puedo creer que el actuara de esa manera, algo debió de haberle pasado, y creo que llegó el momento de averiguarlo. Iré nuevamente a su departamento para enfrentarlo cara a cara para que me diga la verdad. Sí, eso es justamente lo que haré. – Terminó de arreglarse, y luego salió de su habitación para poder comer algo.

******************************

         ¿Qué esperas inútil? Date prisa en atender la mesa número 50.

         Si señor Johnson.

         Sí que eres lento, todavía te falta por lavar los platos.

         Lo siento mucho señor.

         Deja ya de dar tantas disculpas, y mejor apúrate.

         Si. – Se había ido a la mesa para poder atender a los clientes que acababan de llegar, pero se llevó una grata sorpresa al encontrarse con…

         Hola Joey.

         ¡Ryou! ¿Qué hacen aquí?

         Bakura, insistió en que viniéramos a comer aquí.

         Así es Joey, y también queremos que nos acompañes.

         Lo siento mucho, pero no puedo. – Bajó un poco la mirada.

         ¿Por qué Joey?

         Tengo mucho trabajo Ryou.

         ¿A qué horas sales a almorzar muchacho?

         No tengo un horario establecido, a veces logro comer a la una, o si no me toca almorzar hasta las cinco.

         ¿Qué, tan tarde?

         Si Ryou, todo depende si el lugar se llena.

         Joey… – Lo miraba preocupado.

         Joey, déjame hablar con tu jefe para que te dé permiso de comer con nosotros.

         Lo siento mucho Bakura, pero a los empleados no se les permite comer enfrente de los clientes.

         Esas son puras tonterías.

En ese momento, llega otro compañero de trabajo.

         Joey, dice el señor Johnson, que vayas a limpiar los baños, yo me quedaré atendiendo esta mesa.

         Está bien, adiós amigos. – Tuvo que irse para no meterse en problemas.

         ¿Qué desean ordenar? – Preguntó el mesero que se había quedado.

         Ordeno que se le permita a Joey comer con nosotros. – Manifestó seriamente el albino mayor.

         Lo siento mucho señor, eso no se va a poder, política de la empresa. – Contestó con sarcasmo.

         Entonces exijo hablar con el dueño, o el encargado.

         Disculpe mi atrevimiento pero solamente las personas importantes pueden hablar con el dueño, o el encargado.

La otra persona respiró profundamente para calmarse un poco, posteriormente volteó a ver a su acompañante.

         Ryou, por qué no vas al baño en lo que yo resuelvo este pequeño problema.

         ¿Eh? Pero…

         Ve por tu amigo. – Le susurró amablemente.

         En ese caso voy.

En cuanto se fue, el semblante del hombre cambió drásticamente, poniendo una cara que daba miedo.

         Si valoras tu vida, más te vale que accedas mi petición. – Su voz sonaba escalofriante que ha cualquiera se le helaba la sangre. La otra persona tragó saliva en seco, y decidió ir a buscar a su jefe.

15 minutos después…

         Increíble, ¿cómo logró convencerlo?

         Digamos que suelo ser muy persuasivo Ryou. – Medio le sonrió.

         Les agradezco mucho por haberme permitido comer con ustedes.

         No tienes nada que agradecer Joey.

         Bakura tiene razón, yo me siento feliz que te hayan dado permiso.

         No sé qué decirles. – Se sentía muy apenado.

         Tú tranquilo, y disfruta de esta deliciosa comida.

         Gracias Bakura.

******************************

Mansión Kaiba…

         Hermano, ¿qué haces tan temprano en la mansión?

         Decidí venir a almorzar contigo.

         Pues llegas justo a tiempo, estaba a punto de sentarme a la mesa.

         Entonces vamos.

         Si.

En cuanto llegaron al lugar, ambos conversaban amenamente en lo que esperaban a que les sirvieran la comida.

         ¿Cómo te has sentido Mokuba?

         He decidido seguir tu consejo.

         Que buena noticia, bien por ti.

         Gracias, lo he estado pensando, y creo que tienes razón al decirme que la vida debe de continuar.

         Eso es muy cierto, me gusta verte todo animado.

         Pues no lo estoy del todo.

         Tú no te preocupes, verás que poco a poco te irás sintiendo mejor.

         Eso espero.

Al poco tiempo, llegaban varios sirvientes a servir la comida en la mesa, pero en cuanto colocaron los platos, el castaño se volvió a sentir mal, y se levantó rápidamente para ir al baño, dejando a su hermano muy preocupado.

         Seto ¿Estás bien? – Lo cuestionaba en lo que caminaba detrás de él.

Cuando llegó al baño, decidió esperarlo afuera, y desde ahí podía escuchar las grandes arcadas de su hermano mayor. Al cabo de un rato, salió del lugar.

         Hermano, te vez fatal. – Lo miraba angustiado.

         Estoy bien, no te preocupes.

         Pero… Ya llevas varios días sintiéndote mal, deberías de ir a ver un médico.

         Sabes muy bien que odio los médicos.

         Pero…

         No te preocupes, ya se me pasará, de seguro comí algo que me hizo daño.

         Pues a mí se me hace raro que estés vomitando cada vez que miras la comida, eso no es normal.

         No digas tonterías, ya te dije que pude haber comido algo que me hizo daño. Tomaré algo para el estómago, y enseguida estaré como nuevo.

         De acuerdo, pero si te sigues sintiendo mal, prométeme que irás a ver un Doctor.

         Para que estés más tranquilo, te lo prometo. Ahora regresemos a la mesa a comer, esta vez pediré algo más liviano.

         Está bien, vamos.

Los dos hombres se dirigían nuevamente al comedor, lo único es que uno de ellos iba muy pensativo.

         “Hace un mes que mi hermano sale corriendo a vomitar, es como si al ver la comida le diera asco, y debido a eso es que ha bajado un poco de peso. Sólo espero que no sea nada grave”.

Continuará…


N/A: ¿Podrá Mokuba descubrir toda la verdad? ¿Estará enfermo el neko? ¿Tendrá problemas Joey en su trabajo por haber comido con sus amigos? Todo esto y más lo iremos descubriendo en los siguientes capítulos. Muchas gracias por leerme, y por brindarme su apoyo, no olviden dejar sus comentarios, y yo con mucho gusto les responderé. Nos vemos mañana  ^_^

Me despido cariñosamente de ustedes, mandándoles muchos besos virtuales y un fuerte abrazo.

Atte.:

           KAT.



No hay comentarios:

Publicar un comentario