Capítulo 57: Cena navideña con amigos.
Notas del capítulo: Tener una pequeña celebración
con amigos siempre es bueno para fortalecer la amistad que se tiene, para
compartir momentos inolvidables. Lo mismo suele pasar cuando se lleva a cabo
una cena navideña con amigos, es momento de compartir, pasarla bien, bailar,
intercambiarse obsequios, desearse lo mejor unos a otros y sobre todo… Hacer
nuevos planes para el año venidero.
Declaimer:
Noticia de último momento… “YU – GI – OH!, No es mío”… Mucho menos sus
personajes… Son propiedad de su respectivo autor, pero toda la trama de esta
historia si es creada por mí. Amo inventarles historias nuevas a mis queridos
personajes, es una manera de expresar lo que siento, y tener la dicha de
poderlo compartir con todos ustedes. ^_^
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Días después…
Finalmente se había llegado la celebración de la cena navideña,
todos comenzaban a reunirse en un sólo lugar para dar inicio con la pequeña
fiesta.
¿Joey ya estás
listo?
Ya casi salgo Ryou.
Apresúrate que no
tardarán en llegar nuestros amigos.
Está bien.
El joven se dirigía a la cocina para ultimar detalles, cuando en
eso escuchó el timbre de la puerta.
Buenas tardes amor.
– Le da un beso en los labios.
Buenas tardes Baki,
pasa por favor.
Gracias. – Caminó
hacia el interior de la casa y al llegar a la sala se sentó en uno de los
sillones. – ¿Y los demás invitados?
Aún no llegan.
Baia, al parecer he
sido el primero.
Así es amor, pero
estoy seguro que no tardarán en llegar.
Es verdad, aún es
muy temprano apenas son las 6:15 p.m. y la invitación estaba para las 6:30 p.m.
En lo que esperas,
¿te gustaría tomar algo?
No gracias amor, por
cierto, ¿dónde está Joey?
Sigue cambiándose en
su habitación, no tardará en salir.
Debo admitir que
Shizuka se lució con la decoración.
Es verdad, todo ha
quedado muy bonito.
Hasta parece mentira
que esté cambiando poco a poco.
Creo que se conmovió
por todas las cosas que le dijo Joey.
Pues me alegra que
alguien la haya puesto en su lugar.
No digas eso amor.
Si tienes razón,
discúlpame.
No te preocupes. –
Se quedó callado por un instante. – Amor.
Si dime.
Nunca te di las
gracias cuando me defendiste de Tristán en el Baby Shower de Joey, y quiero
aprovechar este momento para darte las gracias.
No hay nada que
agradecer, y ya que tocas el tema quiero decirte que yo te defenderé de quien
sea.
No tienes que hacer
eso.
Claro que sí, de
ahora en adelante deseo que todo el mundo sepa que tú ya no estás solo.
¿Lo dices en serio?
Hablo muy en serio
Ryou.
Yo… No sé qué decir.
Solamente dime que
me amas.
Te amo mucho Baki.
Ven acá pequeño. –
Le dio un fuerte abrazo, en eso se escuchó una voz detrás de ellos.
Ustedes sí que hacen
una bonita pareja.
¡Joey! – Exclamó el
dueño del departamento todo sonrojado. – Hace cuanto estas ahí.
Lo suficiente para
saber que tú ya no volverás a estar solo. – Medio le sonrió.
No digas eso que me
da pena.
Ja, ja, ja, ja, ja,
ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, no deberías de avergonzarte amor.
Pero es que…
No digas nada amor.
– Le da un beso en los labios. – Por cierto Joey, te ves muy bien con esa ropa.
Gracias Bakura.
Esa es la ropa que
le compró el señor Ishtar.
¿De verdad?
Sí, es muy cómoda
para hombres que están encinta.
Déjame decirte que
te ves muy guapo.
Gracias. – Se
sonrojó un poco.
Si lo sigues
adulando me pondré celoso. – Fingió estar molesto.
No sabía que eras
celoso Ryou. – Trataba de provocarlo.
Pues sí, si soy celoso
y mucho.
Oh, me alegra
saberlo.
¿Por qué dices eso?
Porque eso quiere
decir que si me amas.
Tonto, claro que te
amo. – Sin darse cuenta lo había ofendido.
Ja, ja, ja, ja, ja,
ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja,
ja, ja, ja… – Se escuchaban las carcajadas de ambos.
Ya, no se rían.
Discúlpame Ryou, es
que no puedo creer que sientas celos de tu amigo.
Lo siento mucho.
Tranquilo, tampoco
no es para tanto.
No lo decía por eso.
Entonces…
Me disculpaba por
haberte dicho tonto hace un rato.
Creo que me lo tenía
bien merecido.
No digas eso mi
amor.
Oigan, que les
parece si nos tomamos algunas fotos en lo que llegan los demás.
Estaba a punto de
sugerirles lo mismo.
******************************
Ciudad de Tokio…
Esto es bellísimo
amor.
¿Te gusta?
Claro que me gusta y
mucho.
Me alegra que te
esté gustando el paseo.
Sabes lo que más me
gusta.
No sé, tú dime.
Es estar contigo
aquí en Tokio.
No exageres.
No estoy exagerando,
todavía no puedo creer que estemos solos tú y yo. – Se aferra a su brazo.
Pues créelo, aquí
pasaremos un buen fin de semana, y espero que puedas complacerme en todo
estando estas noches contigo.
Tú no te preocupes
por nada, te complaceré tanto que después no querrás dejarme ir mi amor.
Bueno ya, deja de
abrazarme tanto. – Lo separó de golpe.
No seas tan brusco
mi amor.
Te he dicho hasta el
cansancio que no me abraces en público.
Está bien, como tú
quieras. – Manifestó molesto, en eso comenzó a caminar.
¿Qué crees que
haces? – Lo sostuvo del brazo con fuerza.
Suéltame, no me
acabas de decir que no te abrazara en público.
Si eso fue lo que te
dije, pero en ningún momento te dije que te alejaras de mí.
¿Quién te entiende?
Más vale que dejes
de hacer uno de tus berrinches.
Está bien mi amor,
no quiero que estés enojado Yami.
En ese caso
compórtate bien Tristán.
Claro mi amor, mejor
olvidemos este incidente y vayamos a un lugar donde podamos estar más
tranquilo.
De acuerdo. – Le da
un beso en los labios. – Voy a llevarte a un lugar bellísimo.
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Dos horas después…
El convivio se estaba llevando amenamente, todos se divertían,
unos bailando y otros conversando de muchas cosas, había música navideña,
comida, postres, luces navideñas, etc.
¿Quieres bailar
amor?
No soy muy bueno
bailando Baki.
No importa, yo te
enseño.
Me has convencido, vamos.
Quieres hacer lo
mismo que ellos amor.
Si me gustaría pero
no se bailar.
Tranquilo, yo te voy
a enseñar Noah.
De acuerdo, vamos.
Hoy si se ha lucido
señorita Shizuka.
Gracias, ¿le puedo
pedir un favor?
Si claro.
No me diga señorita,
me conformo con que me llame Shizuka, señor Ishtar.
En ese caso le voy a
pedir el mismo favor, llámeme Marik, solamente Marik.
Hecho.
Estoy feliz que
hayan llegado todos Yūgi.
Yo también estoy
feliz Joey.
Lástima que Tristán
no pudo venir.
Sí, es una lástima
Tea.
Al parecer todos se
están divirtiendo.
Hicimos bien en
hacer la cena navideña en el departamento de Ryou.
Estoy de acuerdo con
lo que dice Malik, se ve que todos la están pasando bien.
Yo estoy muy
agradecido en que hayan venido.
No hay nada que
agradecer Joey.
Chicos, sonrían para
la foto.
Listo Tea, tómala
ya.
Digan wisky…
¡Wisky!
Al cabo de veinte minutos los que se encontraban bailando llegaban
a sentarse para descansar un poco.
Estoy muerto.
No es para tanto
Noah. – Manifestaba alegremente.
Yo igual, vengo
muerto.
Para ser tu primera
vez bailaste bien amor.
No digas eso Baki
que me da pena.
Ja, ja, ja, ja, ja,
ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja,
ja, ja. – Reían todos los presentes.
Hola a todos.
Hola Shizuka. –
Respondieron al unísono.
¿Dónde está Joey?
Fue a la cocina por
una porción de pastel.
Es increíble que
todavía le dé antojos.
Por si no lo sabías
tu hermano sigue embarazado. – Comentó sarcásticamente.
Ya lo sé Ryou. – Le
respondió de igual manera. – Ya que todos están aquí quiero aprovechar el
momento para que me hablen de mi hermano.
¿De tu hermano?
Así es Ryou.
¿Qué quieres saber
de Joey?
Me gustaría saber
cómo es que llegó a la mansión de ese señor.
¿Hablas de mi
hermano?
Obvio que sí, de
quién más podría estar hablando.
Eres una antipática
Shizuka.
Ya basta, no vayan a
comenzar una pelea por favor.
Yo no estoy aquí
para pelear, más bien para ver si alguno de ustedes me cuenta lo que quiero
saber.
¿Y qué es lo que
quieres saber hermana?
Hola Joey. – Se
levantó del sillón para que él se pudiera sentar.
Llegas justo a
tiempo Joey.
¿A tiempo para qué?
Tu hermana nos
estaba pidiendo que le habláramos del día que llegaste a la mansión de mi
hermano.
¿Por qué preguntas
eso? – Volteó a ver a su hermana.
Solamente curiosidad
hermano, y porque me gustaría conocer un poco más de tu vida.
Está bien, supongo
que algunos de ustedes también les gustaría conocer esa historia.
Yo si quiero
conocerla.
Noah. – Lo reprendió
el pelinegro.
No lo regañes
Mokuba, mejor admíralo por ser el primero en responder.
¿Tú también Baki?
Así es amor, yo
también quiero saber.
Ja, ja, ja, ja, ja,
ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja. – Se reía el rubio. – Creo que es el momento
perfecto para que les cuente la historia, y la que más me gustaría contarles es
sobre la habitación prohibida.
¿La habitación
prohibida? – Preguntaron todos al unísono.
¿Joey, no me digas
que les contarás esa parte?
Por supuesto que si
Mokuba, no le veo nada de malo, pero si tu no quieres...
Está bien, hazlo.
Voy
a comenzar un poco desde el principio, sobre cuando Seto me recibió por primera
vez en la mansión hace aproximadamente como 8 años y medio atrás… Cuando por fin me habían
dado de alta en el hospital, Seto sin pensarlo dos veces decidió llevarme a su
mansión.
¿Cuánto tiempo
estuviste ingresado en el hospital Joey?
Un poco más de tres
meses Shizuka.
Continúa por favor.
Como les decía, Seto
decidió llevarme a su mansión, yo aún sentía miedo por todas las cosas que
había vivido con ese hombre, y la verdad es que no quería ir a vivir a la
mansión de Seto.
¿Por qué no querías
hermano?
Shizuka, si lo
sigues interrumpiendo nunca terminará de contar la historia.
Tengo todo el
derecho de preguntar. – Expresó de manera demandante.
Eres insoportable,
¿lo sabias?
No le hagas caso
Baki, solamente busca provocarte.
Tienes razón amor,
discúlpame.
Contesta mi pregunta
Joey.
Escúchame bien
Shizuka. – Decidió intervenir otra persona. – Más te vale que tengas cuidado
con las preguntas que le hagas a Joey, porque si él se pone mal te juro que…
Tú a mí no me
amenaces, sé muy bien lo que hago.
Suficiente, si
siguen peleando de esta manera lo mejor será que Joey no cuente nada.
¿Queeeeeeeeeeeé? ¿No
puedes estar hablando en serio Marik?
Por supuesto que
hablo muy en serio, y avalo lo que dijo Mokuba en que debes tener cuidado con
las preguntas que haces.
Está bien, si eso
los hace feliz. – Respondió molesta.
No te enojes
hermana, debes entender que mis amigos se preocupan por mi salud.
Supongo que tienes
razón. – Le sonrió con cariño.
Y con respecto a tu
pregunta, cuando conocí a Seto por primera vez, no nos llevábamos muy bien que
digamos, nos la pasábamos discutiendo todo el tiempo, siempre que nos veíamos
era para pelearnos, insultarnos y en ocasiones nos agredíamos físicamente. Y
cuando él me pidió que me fuera a vivir a su mansión, en ese momento sentí
miedo, no podía entender del por qué estaba siendo amable conmigo, pero con el
paso del tiempo fui comprendiéndolo todo.
Ahora entiendo por
qué le tenías miedo.
Como les decía
anteriormente, yo seguía afectado por todas las cosas que viví con ese viejo, y
creía que Seto iba hacer lo mismo conmigo.
Todos los presentes se quedaron boquiabiertos por lo que acababan
de escuchar.
¿Cómo pudiste pensar
eso de mi hermano, Joey?
Perdóname Mokuba,
pero era así como me sentía en aquel entonces.
Perdóname tú a mí
por juzgarte.
No tengo nada que
perdonarte.
Joey, continúa con
la historia por favor.
Está bien Noah.
Al llegar a su
mansión lo primero que hizo al recibirme fue…
Continuará…
N/A: ¿Alguien de ustedes se recuerda de la habitación prohibida? Muchos
de ustedes se habían quedado con la intriga de saber qué es lo que había en esa
habitación, pues bien, su espera ha terminado porque en el siguiente capítulo
les revelaré ese pequeño secreto que Kaiba tenía. Si hay alguien que no
recuerda esta parte le recomiendo que lea el capítulo número dos. Hagan sus
apuestas, ¿qué habrá encontrado el rubio en la habitación prohibida? La persona
que adivine mencionaré su nombre en cinco capítulos seguidos, anímense y
déjenme sus respuestas. Cambiando de tema, creo que se habrán sorprendido al
saber quién es el amante de Yami, muchas veces creemos que tenemos amigos pero
en realidad son los primeros en darnos una apuñalada por la espalda. No
quisiera decir esto pero quise reflejarlo de esta manera porque me hizo
recordar de como una de mis “amigas” se metió con mi primer novio y lo peor es que
quedó embarazada de él… Y pues, ya se imaginarán la gran decepción que me llevé
al enterarme. ¿Podrá Yūgi descubrir el engaño de Yami? ¿Quieren que esta pareja
queden juntos, o prefieren que no queden juntos? La decisión es de ustedes,
recuerden que estoy para complacerlos. No olviden dejar sus comentarios que yo
con mucho les responderé.
Me voy despidiendo de todos y cada uno de ustedes muy
cariñosamente, cuídense mucho, para los que estudian les deseo que todo les
salga bien, para los que trabajan cuiden de su trabajito porque en estos
dorados tiempos es muy difícil encontrar un buen trabajo. Otra pequeña
sugerencia es que no salgan de sus casas al menos que sea estrictamente
necesario, si salen lleven siempre sus mascarillas puestas y su botecito de
alcohol gel, y antes de entrar a sus casas no olviden que deben de sanitizarse
primero. Ahora sí, me voy, no sin antes decirles que nos leeremos el próximo
viernes, muchas gracias por todo el apoyo que me brindan. Les mando muchos
besos virtuales y un fuerte abrazo de oso virtual.
Atte.:
KAT.
P.D: Quiero dedicar este capítulo a uno de mis lectores, esta persona
se llama: Jenifer CarriGalin, la semana pasada me comentó lo que pasaría en el
viaje de Tokio, ahora se va saber si acierta, ¿Quién es el amante de Yami?
Gracias por sus comentarios.
