domingo, 31 de mayo de 2020

ORACIÓN POR EL SALVADOR



ORACIÓN POR EL SALVADOR.


A todos mis amis, lectores, y público en general, les pido de favor que en este día oren por mi País El Salvador, estamos sufriendo la tormenta Amanda, y estos son los estragos por lo que estamos pasando en estos momentos.

Estamos viviendo una situación bastante difícil, eso sumándole a la pandemia del coronavirus, por favor incluyan El Salvador en sus oraciones. Dios me los bendiga a todos.

























viernes, 29 de mayo de 2020

SIN CACHORRO… NO HAY NAVIDAD…




Capítulo 28: No eres bienvenido y nunca lo serás…


Notas del capítulo: ¿Alguien les ha pasado llegar a una casa y no ser bien recibidos? ¿Qué actitud tomarían si les llegara a pasar? ¿Cómo se comportarían ante esta situación? ¿Volverían a poner un pie de nuevo en ese lugar? Les contaré un pequeño secreto que nadie lo sabe, y es que una vez me pasó a mí… Pero eso mis queridos lectores, ya es otra historia…


Declaimer: Noticia de último momento… “YU – GI – OH!, No es mío”… Mucho menos sus personajes… Son propiedad de su respectivo autor, pero toda la trama de esta historia si es creada por mí. Amo inventarles historias nuevas a mis queridos personajes, es una manera de expresar lo que siento, y tener la dicha de poderlo compartir con todos ustedes.  ^_^

******************************

Al día siguiente…

Un hombre de estatura alta, cabellos castaños y ojos azules, estaba llegando a la mesa del comedor para poder desayunar, al llegar se sorprendió ver a su hermano, por lo general el suele levantarse tarde los días sábados.

         Buenos días Seto. – Saludó con amabilidad.

         Buenos días. – Respondió seriamente.

         Disculpe joven. – Una mujer había llegado hasta donde estaba el pelinegro.

         Sí, dígame.

         ¿Ya podemos servir el desayuno?

         Si por favor.

         En seguida, con su permiso.

A todo esto, el hombre seguía teniendo un semblante muy serio.

         ¿Por qué pones esa cara hermano?

         ¿Qué te traes? – Le preguntó sin rodeos.

         ¿Quién yo?

         Mokuba.

         Nada, ¿por qué me lo preguntas?

         Será porque tu no sueles levantarte temprano los días sábados, y porque ordenaste preparar el desayuno, eso es muy raro en ti porque no sueles involucrarte mucho en la cocina. Quien solía hacerlo era… – Se quedó callado por un momento. – El punto es que algo te traes, y quiero saber qué es.

El pelinegro sonreía en sus adentros, sin querer su hermano lo había comparado con su cuñado, al menos estuvo casi a punto de hacerlo.

         No deberías de extrañarte Seto, lo hice únicamente para que pasáramos más tiempo juntos.

La otra persona no pudo decir nada, en ese momento habían llegado los sirvientes a servir la mesa, luego que terminaron de hacer el trabajo se retiraron.

         Mhg… – Se sentaba en la mesa sin despegarle la mirada a su hermano.

         Anoche me sentí mal por dejarte solo, y de alguna manera quise compensarte.

         Pues no debiste molestarte.

         Seto, lo único que quiero es que dejemos de discutir.

         ¿Es lo único que quieres? – Lo cuestionaba fríamente.

         Tu sabes que si hermano.

         En ese caso ya sabes lo que tienes qué hacer.

El otro suspiró profundamente para luego decir:

         Si te refieres a que debo de dejar a Noah, mi respuesta sigue siendo no. – EL ojiazul estaba por decir algo pero fue interrumpido. – Ni tampoco dejaré de visitar a Joey, por lo demás, estoy dispuesto hacer lo que sea para que dejemos de discutir.

         Si no estás dispuesto a aceptar mis términos, tus propuestas siguen siendo inútiles. – Se levantó de golpe de la silla.

         ¿A DÓNDE VAS?

         Lejos, a un lugar donde no tenga que estar escuchando tus tonterías.

         Seto, por qué no te das cuenta que lo único que quiero es que todo sea como antes. – Se dijo así mismo.

******************************

En algún lugar de la ciudad…

         ¡Bakura, qué hace aquí tan temprano!

         Les he traído el desayuno, y de paso aprovecho para estar contigo.

La otra persona se sonrojó al recibir la respuesta de su pareja.

         Muchas gracias.

         ¿Entonces qué, me dejas pasar?

         Eh… Si claro, discúlpame por favor.

Una vez dentro…

         ¿Dónde está Joey?

         Se está terminando de arreglar, no tardará en venir.

         Que bien, en ese caso hay que poner la mesa.

         No se moleste, yo puedo hacerlo.

         De ninguna manera, quiero ayudarte.

         Está bien.

Entre los dos terminaban de poner la mesa, en eso llegaba otra persona a unírseles.

         Buenos días. – Saludó muy contento.

         Buenos días Joey. – Contestaron al unísono.

         ¿Y toda esa comida?

         La trajo mi novio Bakura. – Bajó un poco la mirada, no quería que lo vieran sonrojado.

         Todo se ve rico. – Sus ojos se le iluminaban al ver la comida.

         Y no has visto lo mejor Joey.

         ¿En serio?

         Así es, también les traje un delicioso pastel de frutas.

El rubio al escuchar la palabra pastel se le hacía agua a la boca, en eso se llevó una mano a su pancita.

         ¿Joey, estás bien?

         Sí, no te preocupes Ryou, solamente se movió un poco.

         Me dejas tocarte Joey.

         Claro que si Bakura, ponga su mano aquí.

El hombre acariciaba la pancita del joven, en lo que lo hacía le hablaba de manera tierna al bebé, medio sonreía al sentir que se movía, este gesto alegraba a cierto albino, se entusiasmaba al ver como su novio estaba feliz por tocar la pancita de su amigo.

         Sí que da buenas pataditas.

         Es verdad, aunque hay veces que no me deja dormir. – Sonreía el rubio.

         Espera a que estés en el séptimo, y octavo mes, verás que se va a mover todavía más.

         Yo espero que no. – Bromeaba un poco.

         Vengan chicos, la comida está servida.

         Que bien, porque muero de hambre.

         Yo también. – Secundaba el albino mayor.

******************************

 No muy lejos de ahí…

         Fue muy amable en traerme el desayuno, no esperaba ese gesto de parte de él. – Se decía así mismo un hombre moreno, estatura alta, y pelo cenizo. – En ocasiones no me he dejado de preguntar quién es realmente ese hombre, por qué no pude encontrar mucha información sobre su persona, algunas veces he notado que tiene una mirada malévola, que a cualquiera le daría escalofrío con sólo verlo, pero cuando esta con Ryou, o con Joey, su mirada es totalmente distinta. Es como si quisiera ocultar su verdadera personalidad, ¿será peligroso? Al principio cuando lo conocí, pude percibir una mirada sombría, una mirada que únicamente la tienen las personas que han matado, obviamente no me dejé intimidar por su mirada, no sé por qué, pero hay algo que no me sigue gustando de ese hombre, cada vez que estoy con él, mi instinto me dice que no baje la guardia, que esté preparado para lo que pueda suceder. – Sacudió un poco su cabeza. – Cálmate Marik, han de ser imaginaciones tuyas, si él le quisiera hacer daño a Joey o a Ryou, hace tiempo que lo hubiera hecho. ¿Entonces, por qué siento esta sensación extraña al estar cerca de él? Lo más probable sea porque no tengo mucha información de ese hombre, no sé cómo, pero tengo que averiguar quién es realmente Bakura. – El sonido de su celular lo sacó de sus pensamientos. – Si, diga… Amor, ¿cómo estás? 

         Buenos días mi amor.

         Buenos días Malik, ¿qué tal esta nuestro pequeño hijo?

         Él está muy bien, no más que se la pasa extrañándote mucho.

         Me imagino.

         ¿Ya desayunaste?

         Sí, un amigo me invitó.

         ¿Un amigo?

         Así es, el hombre del que te hablé.

         Te refieres a la actual pareja de Ryou.

         Ese mismo.

         Acuérdame de darle las gracias cuando lo vea.

         Claro, no te preocupes.

         Te llamaba para disculparme contigo por no haberte podido responder tu llamada anoche.

         No te preocupes mi amor.

         ¿Para qué me llamaste?

         Iba a pedirte un favor, pero creo que ya no es necesario.

         ¿Por qué?

         Ya descubrí quien es la mujer con la que supuestamente Joey engaña a su esposo.

         ¿De verdad? ¿Quién es ella amor?

         Te irás de espalda en cuanto te lo diga.

         Dímelo de una vez, ya me dejaste intrigado.

         Se trata de la hermana de Joey.

         ¿Queeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeé? ¿Su hermana?

         Así es mi amor.

         ¿Y cómo es que Seto no lo sabía?

         Esa parte aun no la tengo muy clara, pero si quieres podrías preguntarle a Mokuba.

         ¿Ya lo sabe Mokuba?

         Anoche estuvo aquí junto con su novio Noah.

         Baia, se le ha de haber armado un gran lío a Joey.

         Ni te imaginas, afortunadamente las cosas se pudieron aclarar a tiempo.

         En ese caso le llamaré a Mokuba más tarde para ver que puedo averiguar.

         De acuerdo mi amor, cuando sepas algo avísame por favor.

         Claro que sí mi amor.

******************************

Mansión de la familia Kaiba…

Un joven estaba hablando por teléfono, aun se encontraba en la mesa del comedor.

         No amor, no salió como yo esperaba. – Su voz sonaba triste.

         No te desanimes Mokuba, tú sigue intentando para acercarte nuevamente a tu hermano.

         Te lo agradezco Noah, pero tal parece que él no quiere poner de su parte.

         Te puedo hacer una pregunta.

         Claro que si amor.

         ¿Crees que tu hermano siga amando a Joey?

         No lo creo, estoy seguro que lo sigue amando.

         ¿Cómo puedes asegurarlo?

         Esta mañana estuvo a punto de compararme con él, pero se abstuvo de no hacerlo.

         Oye, cambiando de tema.

         Si dime.

         Ya le depositaste el dinero a la tarjeta de crédito.

         Todavía no, pero lo haré esta semana que viene.

         Esperemos que no se vaya a dar cuenta.

         Descuida, ya verás que no se dará cuenta.

         ¿Cuándo le llevarán la cama cuna a Joey?

         Según lo que nos dijo ese viejo, la van a entregar hasta el próximo viernes.

         ¿Por qué se van a demorar tanto?

         Joey le mandó hacer un toque especial a la cama cuna, pero aquí entre nos, ese viejo es un usurero, cobró más dinero por ese pequeño detalle.

         No me lo vayas a tomar a mal esto que voy a decirte pero…

         Amor, no te quedes callado, dime lo que ibas a decirme.

         De acuerdo, pero no te vayas a enojar.

         Contigo nunca.

         Lo que iba a decirte es que ese viejo se aprovechó de ti.

         Eso mismo pensé, al ver mi apellido y saber quién era mi hermano, se aprovechó de la situación.

         Yo que tú lo hubiera mandado a…

         Tranquilo amor, no es necesario que te enojes, y menos con alguien que no vale la pena.

         Tienes razón amor.

         Oye.

         Si dime.

         ¿Saldrás temprano de la universidad?

         Sí, recuerda que los sábados salgo al mediodía.

         Es verdad, en ese caso me gustaría invitarte a almorzar, luego podemos ir a visitar a Joey.

         Qué te parece si mejor pasas por mí a la universidad, vamos a mi departamento, ahí te preparo un delicioso almuerzo, posteriormente vamos al departamento de Ryou.

         Mmm… ¿Y si lo dejamos para después?

         ¿Ya no irás a ver a Joey?

         Claro que sí, me refería a lo de ir a tu departamento.

         Ah, entiendo… – Su voz sonó entrecortada.

         ¿Amor, sigues ahí?

         Si, solamente pensaba el por qué no quieres venir a mi departamento.

         Quiero que vengas a mi mansión. – Manifestó sin pelos en la lengua.
         ¿QUEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEÉ? – Se escuchó un gran grito del otro lado del teléfono. – ¿Estás bromeando cierto?

         Porque bromearía con algo así.

         Nunca he ido a tu mansión.

         Por lo mismo tanto quiero que vengas a conocer el lugar donde vivo.

         Pero… ¿Qué va decir tu hermano cuando me vea ahí? Lo más probable es que me eche en cuanto me vea. – Hacia lo posible para que su voz no sonara tan triste.

         Él no tiene por qué echarte, en todo caso también es mi mansión y puedo traer a quien yo quiera.

         No lo sé.

         Amor, no estés triste.

         La verdad me gustaría que nos viniéramos en mi departamento.

         De ninguna manera, ya es tiempo que vayas conociendo mi mundo, así como yo estoy conociendo el tuyo.

         Pero…

         No te preocupes, todo saldrá bien.

         Quien me preocupa es tu hermano, y no me gustaría ocasionarte problemas.

         De ninguna manera amor, soy yo quien te estoy invitando. Dime que aceptas por favor.

         Yo…

         Por favor Noah, di que sí…


Continuará…





N/A: ¿Bakura será un hombre peligroso? ¿Logrará Mokuba poder hacer las paces con su hermano? ¿Será correcto que Marik desconfíe de Bakura? ¿Aceptará Noah ir a la mansión de los Kaiba? ¿Será bien recibido en ese lugar? Todo esto y más lo iremos descubriendo en los siguientes capítulos, no se pierdan la continuación de esta interesante historia. Muchas gracias a todos por tomarse su tiempo en leer, no olviden dejar sus comentarios que yo con mucho les responderé.

Me voy despidiendo de todos y cada uno de ustedes muy cariñosamente, les mando muchos besos y un fuerte abrazo virtual.

Atte.:

           KAT.



P.D.: Quiero dedicarle este capítulo a uno de mis lectores, fue la persona que adivinó quien podría ser la misteriosa mujer con la que se veía nuestro cachorro. Paris, este episodio va dedicado para ti con todo cariño, muchas gracias por sus comentarios y sugerencias, espero que sea de su agrado. ^_^

viernes, 22 de mayo de 2020

SIN CACHORRO… NO HAY NAVIDAD…




Capítulo 27: ¿Tú eres esa mujer?... III parte.


Declaimer: Noticia de último momento… “YU – GI – OH!, No es mío”… Mucho menos sus personajes… Son propiedad de su respectivo autor, pero toda la trama de esta historia si es creada por mí. Amo inventarles historias nuevas a mis queridos personajes, es una manera de expresar lo que siento, y tener la dicha de poderlo compartir con todos ustedes.  ^_^

******************************

Dos horas más tarde…

En el lugar, el ambiente se sentía muy pesado, todo el mundo estaba callado, nadie se atrevía a decir ni una sola palabra, algunos se miraban unos a otros, y solamente una persona no se atrevía a levantar la mirada de lo avergonzado que se sentía, era como si estuvieran en un velorio, hasta que uno de los presentes rompió con aquel maldito mutismo.

            Ten Joey, este té te ayudará a calmarte un poco.

            Muchas gracias Ryou.

            Cof, cof, cof… – Se escuchó un carraspeo de garganta. – Yo… Yo… – No encontraba palabras para poder arreglar todo el mal entendido. – Perdóname Joey, me he portado como un verdadero idiota.

            Más bien como un verdadero cretino. – Intervino la mujer.

            ¡Shizuka! – Exclamó el rubio, y a la vez la miraba como regañándola.

            Está bien Joey, ella tiene razón al decir que me he portado como un verdadero cretino. Y la verdad es que no tengo palabras para pedirte perdón. – Sentía que no tenía el valor de mirarlo a los ojos.

            No te preocupes Mokuba, te perdono, y discúlpame por haberte golpeado.

            No es necesario que te disculpes Joey, creo que me lo tenía bien merecido. – Se llevó su mano a su mejilla, todavía le dolía el golpe, su amigo sí que sabía golpear.

            ¿Por qué nunca se lo dijiste a mi hermano?

            Perdón que los interrumpa, pero… ¿Quién es ella? – Preguntó el peliverde quien seguía sin entender nada.

            Ya que todos están aquí, les quiero presentar a mi hermana. – Manifestó el rubio.

            Hola, qué tal, encantada de conocerlos. – Sonrió con amabilidad.

            ¿Su hermana?

            Así es Noah, Shizuka es hermana de Joey. – Le respondió el pelinegro.

            No puedo creerlo.

            Pues créelo Noah, porque es cierto. – Después de hablar, volteó a ver a su amigo. – Contesta mi pregunta por favor Joey.

            Les contaré un poco de cómo sucedieron las cosas.

            Eso sería genial, porque me gustaría saberlo todo. – Otra persona que hasta el momento se encontraba al margen del asunto, decidió intervenir.

            ¡Bakura! – Lo reprendía el albino menor.

            No lo regañes Ryou, al igual que él, todos quieren saber la historia. – Expresaba el rubio con cariño.

            En ese caso cuéntanos Joey.

            De acuerdo, todo empezó con aquel incidente que sucedió antes de cumplir mi tercer aniversario de bodas con Seto, ¿te acuerdas Mokuba?

            Como olvidarlo, fue algo terrible. – Bajó un poco la mirada.

            ¿Qué fue lo que sucedió ese día? – Indagó el peliverde.

            Luego te cuento amor.

            Está bien.

            Como les iba diciendo, todo sucedió después de ese incidente, Seto se sentía tan mal que no hallaba la manera de emendar su error, fue ahí que me dijo que estaba dispuesto hacer cualquier cosa con tal de que lo perdonara, y se me ocurrió decirle mi secreto. – Todos prestaban atención al relato del rubio.

            ¿Por qué lo mantenías en secreto? – Se atrevió a preguntar el peliverde.

            Antes de morir mi madre, me confesó que tenía una hija, me pidió perdón por habérmelo ocultado mucho tiempo, me hizo prometerle que la buscaría, que hablara con mi hermana y le contara toda la verdad del por qué no se crio con ella. También me dijo que Valon lo sabía todo y estaba dispuesto a ayudarme a encontrarla. Pero al morir mi madre… – Su voz comenzaba a quebrársele, y unas finas lágrimas amenazaban con salir.

            Tienes que tranquilizarte hermano. – Le sobaba la espalda suavemente para calmarlo un poco.

            Joey. – Musitó el pelinegro.

            Estoy bien. – Se limpiaba sus lágrimas.

            Joey, es mejor dejarlo hasta aquí, no puedes…

            Gracias por preocuparte Ryou, pero creo que necesito desahogarme de alguna manera.

            ¿Estás seguro?

            Si Mokuba, gracias.

            Continúa por favor.

            Valon nunca me ayudó a buscar a mi hermana, le mintió a mi madre haciéndole creer que me iba a ayudar, y en vez de eso, sufrí toda clase de maltratos, abusos, golpes, me explotaba de todas las maneras posibles. Y al sentirme engañado, decidí guardar la confesión de mi madre como un secreto.

            Ahora lo entiendo, por esa razón es que nunca se lo dijiste a nadie, ni siquiera a mi hermano.

            Así es Mokuba, como comprenderás, debido a todo lo que sufrí y por todo lo que pasé, fue que dejé de confiar en las personas, creí que nadie me ayudaría a cumplir la última voluntad de mi madre.

            Entonces, cuando mi hermano te dijo que estaba dispuesto a hacer lo que sea, fue en ese momento que tú…

            Me atreví a contarle toda la verdad a Seto.

Todos estaban boquiabiertos al escuchar el relato del rubio, y algunos de los presentes sentían un gran nudo en sus gargantas.

            Cuando cumplimos nuestro tercer aniversario de bodas, ese día el me presentó con un hombre, al principio no entendía nada, Seto no paraba de decirme que era su regalo de bodas, y cuando le pregunté quién era ese sujeto, con una sonrisa me respondió que era el detective que se encargaría de buscar a mi hermana. Yo todavía no lo podía creer, no daba crédito a lo que mis oídos escuchaban, en ese momento me pareció un sueño del cual no quería despertar, por primera vez en la vida sentía una inmensa alegría en mi corazón al saber que por fin iba a cumplir el último deseo de mi madre. Ese día lloré de la emoción, no paré de darle las gracias a Seto, y lo que más me impresionó de él fue cuando me dijo que ya había hablado con ese hombre de que no escatimara en gastos, y que lo único que faltaba era que yo hablara con él para ultimar detalles.

Todos estaban conmovidos por la historia que contaba su amigo, las pocas personas que conocían al señor Kaiba, estaban sorprendidos de que alguien tan frío como él, pudiera tener algo de bondad en su corazón.

            Que tierna historia Joey, como me gustaría tener un novio así. – Comentó sin pensarlo el albino menor.

            Si pero, hay una parte que no me queda claro, dices que tu esposo te ayudó a buscar a tu hermana. – El ojimiel asintió con la cabeza. – Entonces el debió de haber estado al tanto de cómo iba progresando el trabajo del detective.

            En eso tiene razón señor Bakura, como es que… – Secundó el peliverde.

            Si me permites Joey, yo responderé esa parte.

            De acuerdo Mokuba.

            Es verdad que mi hermano estaba al tanto de lo que hacía el detective, pero por haberse metido más en su trabajo, decidió dejarlo todo en las manos de Joey, y el únicamente se dedicaba a darle un cheque a su esposo para que le pudiera pagar al detective cada mes.

            Pues hizo mal en hacer eso, si no se hubiera descuidado tanto, Joey no estaría metido en este problema.

            Bakura, cálmate por favor. – Suplicaba el dueño del departamento.

            No te preocupes Ryou, le doy toda la razón al señor Bakura, y me disculpo por tener un hermano tan cabeza dura. – Medio sonrió para tranquilizar el ambiente, haciendo que los demás se rieran un poco. – ¿Joey, me puedes contestar la pregunta que te hice al principio?

            Claro que si Mokuba, el día que Seto me encontró abrazando a una mujer en su mansión, ese mismo día le iba a dar la sorpresa, iba a decirle que gracias a él pude encontrar a mi hermana, pero jamás me imaginé que se iba a poner muy celoso, y no me dio tiempo de explicarle nada.

            En nombre de mi hermano te pido perdón Joey, no me equivoco al decir que Seto es un cabeza dura, ahora entiendo por qué Shizuka me dijo que no cometiera el mismo error que mi hermano, y casi estaba a punto de cometerlo.

            Pero no lo hiciste. – Manifestó el rubio con cariño.

            Claro que lo hice, me comporté como un verdadero patán contigo. – Bajó un poco la mirada.

            Lo importante es que te quedaste para saber la verdad.

            Sí, pero eso fue porque pronunciaste el nombre de tu hermana.

            Ya no te atormentes con eso, me alegra que todo esto se haya aclarado.

            A mí también. – Lo abrazó cariñosamente. – Ahora que ya se la verdad, le contaré todo a Seto para que te venga a pedir perdón y se puedan reconciliar.

            No Mokuba, por favor no le digas nada.

            ¿Por qué?

            Si él va a venir a pedirme perdón solamente porque sabe que esta mujer es mi hermana, prefiero que no venga.

            ¿Por qué? – Volvió a cuestionarlo.

            Porque me gustaría que su arrepentimiento sea sincero, quiero saber cuánta falta le hago, y desearía que me demostrara si todavía me ama.

            Está bien Joey, respetaré tu decisión.

            Por cierto, hay algo que no me queda claro todavía.

            ¿Qué cosa?

            ¿Por qué no querías que entrara a tu departamento Ryou, cuando me viste llegar? – Lo volteó a ver.

            Yo no quería que entraras, solamente pretendía decirte con quien estaba Joey, pero nunca me escuchaste y entraste muy rápido.

            Lo siento mucho, a los dos les pido perdón.

            Tranquilo Mokuba, si Joey te perdona, yo también lo haré. – Lo miró sin resentimiento.

            Muchas gracias, en especial a ti Ryou por cuidar mucho de Joey y de mi sobrino.

            No hay nada que agradecer.

            Pero miren la hora qué es. – Interrumpió de golpe el peliverde.

            Tienes razón Noah, ya es un poco tarde, creo que es hora que nos vayamos.

            Está bien, los acompaño a la puerta.

            Igual yo.

            No Ryou, quédate aquí, necesitas hablar con… – Volteó a ver a la otra persona.

            Tienes razón.

En cuanto se fueron del lugar, el dueño del lugar finalmente se quedó solo.

            Perdóname por arruinar nuestra cita. – Manifestaba muy apenado.

            Oh pequeño, tú no has arruinado nada, soy yo quien tiene que pedir perdón.

            ¿Por qué?

            Por haber llegado tarde.

            No digas eso Bakura, si no fuera por tu retraso las cosas se le hubieran complicado a Joey.

            No lo había visto de esa manera, supongo que tienes razón.

            Claro que la tengo, no quiero ni imaginarme si Joey se hubiera quedado solo con un Mokuba enfadado, y eso que no viste todo lo que sucedió antes de que tú llegaras.

            Creo que esa parte ya me la contarás otro día. – Lo miraba con cariño, haciendo sonrojar al joven.

            Ssi…

            Te vez tan lindo cuando te sonrojas.

            Baku… – No terminó de hablar ya que fue interrumpido por un demandante beso, que fue correspondido de inmediato, una vez que se separaron, el hombre habló.

            Te prometo que te compensaré por haber arruinado esta noche.

            Pero, tú no has arruinado nada.

            Shhhhhhh… No digas nada y déjate consentir.

            De acuerdo. – Aun tenía sus mejillas bien coloradas al rojo vivo.

            También debo irme, dile a Joey que vendré mañana a verlos.

            No te preocupes, yo le doy tu mensaje.

            Hasta mañana mi amor.

La otra persona se quedó embelesado al escuchar cómo le había dicho su novio, se sentía en el paraíso al oír esa voz tan varonil y sensual. Cuando salió de su nube, se encontró con su amigo quien lo miraba de manera burlona.

            ¿Hace cuánto estas ahí?

            Lo suficiente para ver la cara de idiota que pones cada vez que miras a Bakura. – Se abstenía las ganas de reírse.

            JOEY. – Fingió estar molesto.

            Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja… Es una broma, no te enojes.

            Lo sé, a propósito, ¿ya se fueron todos?

            Si.

            Quieres que te prepare algo de comer.

            No te molestes Ryou, la verdad es que ha sido una noche muy larga y me gustaría ir a descansar.

            ¿Estás seguro?

            Si.

            Está bien, ve a dormir.

            Buenas noches mami. – Manifestó burlonamente.

            Buenas noches hijo. – Le siguió la broma.



Continuará…



N/A: Finalmente se ha descubierto la supuesta amante de nuestro cachorro, ¿Seto, podrá enterarse de la verdad? ¿Qué cara va a poner el neko cuando se dé cuenta del error que ha cometido al juzgar injustamente a su cachorro? ¿Qué habrá pasado con aquellas personas extrañas? ¿Les gustaría saber cómo fue la separación de Shizuka con su madre? Todo esto y más lo iremos averiguando en los siguientes capítulos, muchas gracias por leerme, no olviden dejar sus comentarios que yo con mucho gusto les responderé.

Me despido de ustedes con mucho cariño, nos leeremos en el próximo capítulo, les mando muchos besos y un fuerte abrazo virtual.

Atte.:

          KAT.