SIN CACHORRO… NO HAY NAVIDAD…

Capítulo 102: No pienso dejarte solo mi amor…

 

 

Notas del capítulo: ¿Alguna vez alguien necesitó el apoyo de algún familiar, amigo, novio o novia? Todos más de alguna vez hemos necesitado o sentido la necesidad de tener a alguien a nuestro lado al menos para que nos haga compañía, en ocasiones ocurre cuando nos sentimos solos o que ya no podemos más y sentimos que nuestra fuerza nos está abandonando. Es bonito pensar que vamos a tener el apoyo de alguien, pero… ¿Qué pasa en los momentos de tragedia? ¿Tendremos realmente a alguien que nos ayude a salir adelante? ¿Contaremos con un buen amigo, familiar, o noviazgo que nos aliente a no darnos por vencido? Sé que esto solamente ocurre en las películas sobre que el amor lo puede todo y que una de las parejas no piensa dejar solo al amor de su vida. Sin embargo, si este suceso lo trasladamos a la vida real… ¿Qué opinan ustedes? ¿Existe o no existe esa persona que nos ama sinceramente?

 

 

Declaimer: Noticia de último momento… “YU – GI – OH!, No es mío”… Mucho menos sus personajes… Son propiedad de su respectivo autor, pero toda la trama de esta historia si es creada por mí. Amo inventarles historias nuevas a mis queridos personajes, es una manera de expresar lo que siento, y tener la dicha de poderlo compartir con todos ustedes.  ^_^

 

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Dos semanas después…

 

         ¿Cómo se encuentra Doctor?

 

         Bien, muy bien.

 

         ¿De verdad todo marcha bien?

 

         Así es señor Orellana, no hay de qué preocuparse.

 

         Cálmate mi amor, no vez que me pones nervioso.

 

         Perdóname mi vida. – Le da un beso en los labios.

 

         Señor Kaiba, su embarazo va muy bien hasta ahora, le recomiendo que no haga desarreglos y debe cuidarse mucho. No olvide que en el primer trimestre hay riesgos durante la gestación.

 

         Lo entiendo perfectamente Doctor Mahādo.

         No se preocupe Doctor, me encargaré de cuidarlo.

 

         En ese caso no me queda otra más que de felicitarlos, he notado que usted será un excelente esposo y padre.

 

         Muchas gracias Doctor. – Se sonrojó ante el comentario.

 

El pelinegro se quedó pensativo al escuchar las palabras del médico.

 

         “¿Esposo? Noah ni siquiera me ha pedido que me case con él”. – Esto último lo pensó con suma tristeza. Una voz lo sacaba de sus pensamientos.

 

         Amor, ¿estás bien?

 

         Eh… Ah sí, estoy bien Noah. – Medio le sonrió.

 

         De pronto te pusiste pálido.

 

         No es nada, en serio estoy bien.

 

         ¿Está seguro señor Kaiba?

 

         Si Doctor.

 

         No olviden que lo estaré chequeando una vez por semana.

 

         Muchas gracias.

 

         Cualquier anomalía que se presente debe llamarme inmediatamente.

 

         No se preocupe Doctor, le prometo que seguiremos sus instrucciones al pie de la letra.

 

         Eso es todo por ahora.

 

         Muchas gracias de nuevo Doctor. Ven amor, vámonos. – Lo ayudaba a ponerse de pie.

 

         Gracias por ayudarme.

 

         Debemos de ir alcanzar a tu hermano para ver como salieron sus hijos.

 

         Tienes razón.

 

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En algún lugar de Ciudad Domino…

 

         Bienvenido a mi departamento Ryou.

 

         Gracias. – Contestó con la mirada en el suelo.

 

         ¿Qué pasa amor? ¿Acaso no quieres vivir conmigo?

 

         No es eso… Es sólo que…

 

         Dímelo por favor, no te quedes callado.

 

         Me siento muy apenado contigo.

 

         ¿Por qué? No lo entiendo.

 

         La verdad es que… – Sin poderlo evitar sus ojos comenzaron a humedecerse y su cuerpo temblaba levemente.

 

         Ryou… – Lo miraba muy preocupado. – Mírame por favor. – El aludido empezaba a levantar la mirada lentamente. – No debes tener miedo amor, aquí tendrás tu propio cuarto, si te fijas bien es un departamento bastante amplio con más de tres dormitorios, yo te arreglé la habitación principal y yo me iré a dormir a uno de los cuartos que están al fondo.

 

         Pero… No se me hace justo hacerte esto… Yo…

 

         Hey, tú no me estás haciendo nada, además es mi deseo hacerlo para que te sientas cómodo y a gusto viviendo aquí.

 

         Gracias Bakura. – Se limpiaba sus lágrimas con una mano. – Perdóname por desconfiar de ti.

 

         No tengo nada que perdonarte mi amor. – Intentó darle un beso pero se quedó estupefacto al verse rechazado. – Creo que te llevaré a tu habitación para que puedas descansar. – Trató la manera para que su voz no se le quebrara.

 

         Está bien.

 

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         Hola hermano.

 

         Hola, ¿cómo saliste con tu chequeo médico?

         Todo va de maravilla, y mis sobrinos cómo salieron.

 

         Bien, el Doctor dice que están creciendo sanos, hasta ya les programó su cita para las vacunas.

 

         Estoy contento de que ellos estén bien.

 

         Yo también.

 

         ¿Pasarás viendo a Joey?

 

         Si.

 

         En ese caso voy a aprovechar para ver a Ryou.

 

         A Ryou ya le dieron el alta.

 

         ¿Queeeeeeeeeeeeeé? ¿Cómo lo sabes?

 

         Bakura me llamó esta mañana muy temprano.

 

         Ya veo, y yo que quería pasar a verlo.

 

         Si tú quieres lo podemos ir a visitar al departamento de Bakura.

 

         No me digas que Bakura ya le dijo la verdad.

 

         Tuvo que hacerlo para que aceptara irse a vivir con él.

 

         Entiendo.

 

         Váyanse ustedes, yo me quedaré un rato más en el hospital, le pediré a Roland que se lleve a mis hijos.

 

         En ese caso déjame ver a Joey a mi primero.

 

         Disculpen.

 

         ¿Qué pasa amor?

 

         Me gustaría poder ver a Joey, ¿creen que se pueda?

 

         Es verdad, tú no lo has visitado.

         Le preguntaré al Doctor a ver si te deja verlo.

 

         Muchas gracias Seto.

 

         Vamos a su consultorio.

 

         Sí, vamos. – Respondieron al unísono.

 

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Un hombre se encontraba en su habitación, pensaba en el comportamiento de su novio, y eso le preocupaba en cierta manera.

 

         Se me hizo raro el comportamiento de Ryou, nunca antes lo había visto actuar de esa manera, me dolió su rechazo, pero lo que más me dolió fue ver su mirada era como si de verdad me tuviera miedo. – Sacó una pequeña tarjeta de presentación que el médico le dio antes de irse del hospital y con eso en la mano recordaba todas las indicaciones que le dieron.

 

FLASH BACK

 

         Doctor, ¿en serio ya me lo puedo llevar?

 

         Así es señor Bakura, pero primero tiene que saber algunas cosas.

 

         ¿Cómo cuáles?

 

         Escúcheme lo que le voy a decir, físicamente su novio se ha logrado recuperar, pero…

 

         ¿Pero? Por favor Doctor no se quede callado.

 

         Lo que voy a decirle es algo complicado, su novio va a necesitar de mucha ayuda tanto de la suya como la de un psicólogo.

 

         Explíquese por favor.

 

         Señor Bakura, en vista de todo lo que pasó puedo asegurarle que él no volverá hacer el de antes, habrá momentos en que lo rechace o no quiera estar cerca de usted. En otras palabras no lo obligue hacer algo que él no quiera, si ve que lo rechaza lo que tiene que hacer es darle su espacio, no lo presione haciéndole tantas preguntas, está por demás decirle que el sufrió un trauma bastante severo, ser violado ante su presencia es algo…

 

         Ya no me diga nada, lo sé perfectamente. – Apretaba sus manos con fuerza haciéndolas puño.

         Lo voy a recomendar con un colega y amigo mío, él es uno de los mejores psicólogos del país, y a la vez le recomiendo que deben de ir a las terapias juntos estoy seguro que esta persona los podrá ayudar en su relación. Otra cosa, lo más seguro es que caiga en una depresión, y que poco a poco vaya dejando de comer, y que por las noches él tenga pesadillas, le sugiero que no lo deje solo bajo ninguna circunstancia y haga lo posible por animarlo, no deje que se desmorone porque será muy difícil sacarlo de ahí. ¿Entiende lo que le estoy diciendo?

 

         Sí, ¿pero qué pasaría si Ryou no quiere ver a ningún psicólogo?

 

         Busque la manera de convencerlo y no deje pasar mucho tiempo, creo que todavía está a tiempo para sacarlo adelante.

 

         Está bien Doctor, haré todo lo que me ha dicho.

 

FIN DEL FLASHBACK

 

         Ryou. – Musitó para sí mismo. – Maldito idiota, ¿cómo fue capaz de hacerte tanto daño? ¿Por qué no pude protegerte de ese maldito desgraciado? ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué? – Comenzaba a llorar del coraje que sentía en esos momentos. – No sé cómo, pero haré todo lo que esté en mis manos para ayudarte mi amor, ya verás que juntos saldremos adelante, no permitiré que ese asqueroso viejo se salga con la suya de empañar nuestra relación. Le voy a demostrar que mi amor por ti es más fuerte que todo el daño que te ha ocasionado. Ojalá y se esté revolcando en las llamas del infierno. – Su mirada era tétrica e intimidante. En eso el sonido de su celular lo sacó de sus pensamientos. – Si diga, habla Bakura.

 

         Hola Bakura, habla Tea.

 

         Hola Tea.

 

         Hola, ¿ya salió Ryou del hospital?

 

         Sí, no hace mucho lo traje a mi departamento.

 

         ¿Y cómo está?

 

         Bien, algo cansado.

 

         Me lo imagino. – Hubo un pequeño silencio. – Bakura, te llamaba para decirte si nos podríamos ver mañana.

 

         Lo siento mucho Tea pero no creo que vaya a poder.

 

         Y puedo saber por qué.

         Ryou me necesita en estos momentos y no me gustaría dejarlo solo.

 

         No lo dejarás solo por mucho tiempo, dile que necesitas salir a comprar algunas cosas, estoy segura que él lo entenderá.

 

         Discúlpame pero en verdad no puedo.

 

         ¿Y si voy a tu departamento? Así de paso lo veo.

 

Se escuchó un gran suspiro del otro lado del teléfono.

 

         De acuerdo como quieras.

 

         Dame la dirección para anotarla. Aja, si, si, entiendo, si no te preocupes, se dónde es, en ese caso llego mañana por la tarde.

 

         Está bien, le diré a Ryou que vendrás a verlo.

 

         Bien, en eso quedamos.

 

         Perfecto, nos vemos mañana.

 

         Hasta mañana Bakura y gracias.

 

         De nada, adiós. – En cuanto cortó la llamada se decía así mismo. – Baia, en estos momentos no tengo cabeza para nada, siento que es un mal momento para que Tea quiera hablar conmigo, y ni siquiera sé si sea correcto decirle la verdad sobre su amigo. Yo creo que por el momento no le diré nada, Ryou se encuentra bastante inestable y no me gustaría alterarlo, prefiero que este calmado y tranquilo. No te preocupes mi amor, yo seré la persona que te haga sonreír de nuevo, lo hice una vez y no desistiré hasta hacerlo de nuevo, aunque todavía me sigo preguntando, ¿si alguna vez seremos felices tú y yo? Solamente espero que aceptes mi ayuda y que logres confiar en mí. Te amo tanto mi niño albino que por ti haría lo que fuera.

 

Se levantó de la cama para irse a la cocina y poderle preparar algo de comer a su novio.

 

 

Continuará…

 

 

N/A: Pobre Ryou, tal parece que la vida se está empeñando para que no pueda ser feliz. ¿Podrá Bakura sacarlo adelante? ¿Por qué Noah no le ha propuesto matrimonio a su novio? ¿Creen que Tea sea inoportuna al llegar inesperadamente? ¿Qué pasará con Yūgi? ¿Alguien ha visto al idiota de Yami? Todo esto y más lo descubriremos en los siguientes capítulos. Los invito para que no se pierdan la continuación de esta interesante historia, muchas gracias por acompañarme en este mini especial dedicado especialmente a todos ustedes. No olviden dejar sus comentarios que yo con mucho gusto les responderé.

 

Me despido cordialmente de todos y cada uno de ustedes, cuídense mucho y no bajen la guardia, sigan las instrucciones de las medidas de seguridad, y no salgan de casa al menos que sea estrictamente necesario. Les mando muchos besos virtuales y un fuerte abrazo de oso desde la distancia. Nos leeremos mañana.

 

Atte.:

 

            KAT.