¿FUMAS? Escrita por PAN 4 EVER

 

 

¿Fumas?

 

Era la hora del almuerzo en la preparatoria de Ciudad Domino y cierto rubio se encontraba en la azotea de dicho edificio, solo él. Su “pandilla” no estaba con el este día, sabían bien que a veces a Joey le gustaba estar solo. No hacía nada más que estar recostado en la reja y observar pasar las nubes blancas, meditando acerca de su futuro, la vida con su padre y otro sin fin de cosas que acongojaban su mente. Tal era su concentración en sus pensamientos que apenas y sintió la quemadura en la piel de la ceniza del cigarrillo que tenía.

 

         -Maldición-farfullo y término tirando y pisando el tabaco que tenía- Maldita sea, lo que me faltaba-se dirigía a la    puerta para poder regresar con sus amigos, pero jamás pensó que cierto castaño estaría ahí.

 

         -¿Fumando a escondidas, Perro?- La sonrisa sarcástica de CEO se había hecho presente, esto era lo último que         necesitaba Joey, encontrarse con el culpable de que la sangre le hirviera- ¿No sabes que eso está prohibido aquí?

         -Atragántate con una lija, Ricachón-paso al lado de él y solo le alzo el dedo medio para terminar de insultarlo -       ¿Cómo sabias que estaba fumando? ¿Acaso me estabas espiando? ¿No te basta con molestarme a diario, maldito          niño malcriado, rico y mimado?  -Sea cual sea el problema de Joey, estaba listo para descargarlo con Kaiba de ser        necesario.

 

         -Vaya, vaya, vaya. Parece que el perro aun no come-dijo en respuesta para seguir caminando hacia la reja- Y        respondiendo a tus absurdas preguntas, hueles demasiado a nicotina-le dijo y después observo el medio cigarrillo que          Joey había pisado momentos atrás- ¿Y encima de eso, fumas una marca tan barata, Wheeler?

 

¿Por qué de la nada estaba teniendo una conversación casi pacifica, con el chico que lo fastidiaba todos los días? Sin duda esa era la pregunta del millón. Joey observaba a Kaiba de pies a cabeza, pareciera que hoy no quería buscar pelea como era su costumbre, así que simplemente se dejó llevar por el momento de paz y respondió su pregunta.

 

         -¿Acaso sabes de cigarrillos, Kaiba?- fue una buena jugada responder la pregunta del castaño con otra.

 

         -Se lo suficiente como para darte uno de los míos-Joey abrió sus ojos,  ¿Kaiba fumaba? Le parecía extraño    considerando la condición física que aparentaba-¿Qué dices, Wheeler? Estos son mucho más finos que ese rollo de          tabaco barato que sueles fumar, además aunque te dijera la marca, no los encuentras en Japón.

 

Joey estaba seguro de que había gato encerrado, nunca había visto a su némesis tan contento con él.

 

         -¿Cuál es el truco, Kaiba?-No se dejaría engañar fácilmente, por eso pregunto, sin duda había algo detrás de ese         gesto.

 

         -Llámalo mi buena acción del día, solo te lo estoy ofreciendo. Aún nos quedan 30 min antes de la próxima clase, si lo          quieres, solo ven y tómalo. También estaba pensando en fumarme uno-Tras ese gesto había más, había un deseo, más específicamente, el deseo de poder convivir a solas con Joey por lo menos unos minutos.

No era muy bueno para expresar sus emociones, de hecho, durante mucho tiempo las considero enemigas, un sinfín de cosas inútiles que solo le provocaban errores en su trabajo y consumían tiempo de su ya bastante ocupada vida. Tras uno que otro intento fallido con las chicas, decidió dejar de lado el amor, o al menos eso pensó. El día que conoció al rubio sintió algo dentro de él ¿Un calor interior? No sabía que era, jamás había experimentado algo así; tal fue la curiosidad que se fue a hacer chequeos médicos para saber que le ocurría, pero al parecer, solo estaba experimentando  el enamoramiento. Aun no sabía con exactitud qué es lo que le había atraído del rubio, en parte veía una parte de el en Joey, era muy testarudo, pero también se preocupaba por los demás, sabía que tenía problemas con sus padres y que protegía a su hermana a toda costa, como él con su hermanito cuando Gozaburo Kaiba los  adopto, tal vez era por eso, solo sabía que sentía algo por el rubio y era todo lo que necesitaba saber.

 

Seto ya sabía que Joey solía subir a la azotea, ya sea a comer con sus amigos, o estar un rato a solas para meditar y fumar, y había notado que la segunda era la que usualmente hacía. Ese día busco los cigarrillos alemanes que jamás había usado, se los iba a dar a Joey, tal vez podía ganarlo poco a poco.

 

Joey aun algo dudoso acepto de buena gana el cigarrillo, Kaiba ya había sacado otro, saco de su gakuran  un fino encendedor electrónico, le ofreció fuego a Joey, pero este lo rechazo sacando su propio encendedor de metal (Bastante varonil a los ojos de Joey), el cual tenía el diseño de un dragón negro de ojos rojos, al aspirar pudo sentir la diferencia, era obvio que estos no eran de las máquinas expendedoras de donde suele sacarlos. Podía notar la diferencia, la textura, el olor incluso la nicotina se sentía diferente. No sabía si debía seguir en silencio o si debía buscar tema de conversación, platicar con Kaiba se veía poco factible, pero ya que la escena estaba para eso, decidió hablar además… ¿Quién demonios se pone al lado de alguien por al menos 25 min sin tratar de entablar una conversación?

 

         -Odio admitir que tenías razón, Ricachón. Estos sí que son más finos-soltó una gran bocanada de humo blanco-¿De    dónde son? ¿América?-no pudo encontrar otro tema de conversación así que decidió preguntar por el cigarrillo.

 

         -Alemania-dijo imitando la acción de Joey-Un socio me los obsequio y yo los acepte por cortesía. No me gusta fumar, de          hecho lo encuentro algo extraño, pero por otra parte, es en cierto modo placentero-Joey jamás se imaginó al castaño          decir eso ¿Acaso estaba en la dimensión desconocida?

 

         -En parte comparto tu pensar. ¿Cuántos te has fumado hasta el momento? Vi que tu cajetilla sigue bastante llena-         siguió conversando.

 

         -Este es el segundo-casi suelta una carcajada al ver la cara de Joey-El primero fue con mi socio cuando me los dio, y      es segundo, pues tú ya sabes la historia. Me han durado a los menos 5 meses-noto que Joey se había quedado          anonadado ante su comentario.

 

         -Por Ra, eso es mucho tiempo, yo me fumo 1 cajetilla al mes-contesto con toda la tranquilidad del mundo esperando el         comentario sarcástico del ojiazul.

 

         -Carajo Wheeler, si sigues así, tus pulmones terminaran trabajando con carbón o tu acabaras con un hoyo en tu       garganta-soltó una risilla y Joey lo acompaño, había sido divertido ese comentario.

 

Siguieron hablando así hasta que sus cigarrillos se terminaron, lo cual fue una coincidencia con el toque de campana. El primero en irse fue Joey, piso la colilla, se puso un caramelo en la boca y comenzó a dirigirse a su salón, no sin antes ver  Kaiba y darle las gracias.

 

         -Sabes, Kaiba-volteo a verlo-fue divertido hablar contigo sin pelear, hay que repetirlo otro día.

 

Ya se iba hasta que el castaño lo detuvo.

 

         -Oye, perro-había arruinado el momento completamente con ese comentario -toma, yo no los quiero-le dijo  lanzándole    la cajetilla completa-solo cuídalos y guárdame uno antes de que se te acaben.

 

Joey atrapo dicho paquete y lo observo, ¿Qué demonios pasaba hoy con Kaiba? Definitivamente no era el mismo Seto Kaiba con el que suele pelearse a diario.

 

         -¿A qué juegas, Seto Kaiba?-se acercó a él y el joven CEO sentía latir con rapidez su corazón, pero se mantuvo estoico        ante la situación.

         -Le estas dando demasiadas vueltas al asunto, Joey-mierda, nunca lo había llamado por su nombre ¿Lo tomara muy      raro el rubio?

 

         -Suficiente-tiro la cajetilla y se acercó al rostro de Seto lo más que pudo-Tu nunca eres amable conmigo, pero hoy         pareciera que eres un ángel. Me invitas a un fino cigarrillo, charlas conmigo y no me insulta y ahora, ¿Me llamas por          mi nombre? En vez de decirme “Wheeler” o “Perro”-noto un ligero rubor en las mejillas del castaño- ¿Qué demonios estas planeando, Seto Kaiba?

 

Era demasiado para Kaiba, tenía al chico que le quitaba el aliento frente a él, a escasos centímetros de poder besar sus labios ¿Era correcto lo que iba a hacer? ¿Acaso los dioses egipcios lo perdonarían por lo que iba a provocar? ¡LO ESTABA PENSANDO DEMASIADO! ¡MALDITA SEA, SETO KAIBA! ¡HAZLO Y YA! Esa fue la batalla mental que libró en sus adentros, para solo después plantarle un beso al rubio.

 

¿¡QUE DEMONIOS PASO AQUÍ!? Joey aun no salía del shock inicial, estaba siendo besado por Seto Kaiba, su némesis del día a dia, aquel que no paraba de molestarlo ¿Kaiba estaba enamorado de él? ¿Acaso Kaiba era Gay y había estado esperando la oportunidad de declarársele? No sabía que pensar, pero  la verdadera pregunta aquí era ¿Por qué no estaba intentando zafarse del beso? El extraño sabor de la nicotina en la boca de ambos y el caramelo mentolado que Joey había puesto en su boca momentos atrás se estaban fusionando en un extraño beso, uno que nunca pensó que pasaría.

 

Kaiba intensifico el beso introduciendo su lengua en la de Joey, el sabor de menta y nicotina que tenía ahí le resultaba agradable y placentero, tenía ganas de alargar más el beso, pero la falta de oxígeno lo obligo a separarse del Rubio. Al separar sus bocas observo a Joey; tenía la respiración agitada, y antes de que pudiera decir algo, salió corriendo del lugar, dejando solo al castaño, solo y con un buen recuerdo en su mente.

 

Sabía que con dificultad lograría repetir eso, probablemente Joey ahora lo odiaría más que nunca. No le importaba si la gente se enteraba que era homosexual, ¡Por obelisco, Ra y Sliffer! ¡Era el siglo XXI! A nadie le importaría su orientación sexual, pero a Seto  le importaba el hecho de que Joey ya no le fuera a dirigir la palabra ni para pelear.

 

Decidió no volver al salón, así que tomo su teléfono y llamo a Roland para que lo recogiera. Antes de regresar por donde había llegado, tomo la cajetilla que Joey había arrojado momentos atrás y la guardo. Estuvo tentado en volver al salón, pero recordó la expresión de Joey así que solo salió de la escuela.

 

Joey aún seguía procesando lo que acababa de pasar, si Kaiba era su némesis ¿Por qué dejo que lo besara? Y peor ¿Por qué lo había disfrutado? Se puso algo triste al ver que no regreso a clases, pero esto no se quedaría así.

 

Al terminar las clases tomo un taxi y fue directo a la mansión del chico. Le permitieron rápido la entrada pues dijo que tenía un asunto importante con el castaño y solo tuvo que esperar a que Kaiba lo atendiera.

 

         -¿Joey?-dijo Kaiba en su asombro al verlo en su casa.

 

         -Hola Ricachón-se burló un poco de el-Tu casa es  más grande de lo que pensé.

 

         -¿Por qué viniste?-fue directo al grano.

 

         -¿Podemos hablar en privado? No lo sé, tal vez en alguna oficina que tengas o un cuarto-dijo tratando de quedar a solas con el chico

 

         -Sígueme

 

Joey lo siguió hasta la que parecía su habitación, había una cama bastante grande como para una sola persona, en el suelo había una alfombra algo antigua y una ventana grande que daba a la piscina de la casa, también noto un sofá y un escritorio de trabajo. Cuando vio que Kaiba había cerrado la puerta, sabía que era el momento.

 

         -¿Qué paso, Wheeler?-fue lo único que dijo cuando sintió que el rubio lo estaba abrazando y plantándole un beso aún       más necesitado que el que se habían dado con anterioridad.

 

Joey solo sintió la necesidad de hacer eso, y cuando menos lo espero, sintió a Kaiba corresponder dicho gesto. Seto coloco sus manos alrededor de la cintura de Joey, mientras que el rubio jugaba con los cabellos que tapaban la nuca del ojiazul.

 

Estuvieron así por un par de minutos, hasta que Kaiba volvió a intensificar el beso, pero esta vez comenzó a besar el blanco cuello de Joey, dando pequeños mordiscos para darle diferentes sensaciones al rubio.

 

Joey (Quien por las películas por** qué solía ver) sabía que era lo que se avecinaba, solo se dejó llevar por el calor del momento, y no le importo nada.

 

Kaiba seguía transmitiéndole esas sensaciones y cuando menos lo espero ya ambos de encontraban tumbados en la cama. Tenía al chico de sus sueños justo debajo de él. Aunque Kaiba no sabía que estaba haciendo, solo se dejó llevar por los instintos varoniles dentro de él.

 

Joey se limitaba a sentir las sensaciones que Kaiba le seguía transmitiendo, podía sentir esas manos enormes recorrer con lentitud todas y cada una de las partes de su cuerpo, incluso se estremeció un poco cuando comenzó a estimular su entre pierna, pensó en alegar, pero lo único que logro salir de su boca fue un pequeño gemido de placer. Solo siguió sintiendo aquello que Kaiba le transmitía. El calor iba  subiendo y sus prendas desapareciendo, Kaiba seguía con su trabajo, mientras que Joey se aferraba a su espalda y dejaba pequeños arañazos en ella.

 

Ya ambos se encontraban ambos ya desnudos en la habitación, Seto por un momento se sintió impotente ante la figura del rubio, que contrario a lo que esperaba, apenas estaba marcada, era esbelto con unos simples rasgos musculosos. Joey no sabía en qué momento habían terminado desnudos, ya sabía que era lo que iba a pasar, así que solo se acercó a la oreja de Seto y le susurro una sola palabra: “Adelante” Kaiba lo tomo como permiso y entro en él. Joey arqueo la espalda y se aferró mucho más al castaño.

 

Seto se acercó más a Joey, y le dijo que se relajara, le transmitió algunas palabras y le acaricio la espalda y el cabello, espero a que Joey se relajara para poder empezar a moverse y cuando vio que se había acostumbrado comenzó el vaivén de caderas.

 

         -Sabes… muchas veces… soñé con esto Joey-le dijo Kaiba que tenía un ritmo algo rápido.

 

         -Apuesto… a que si, Ri…-no pudo terminar de decir su insulto, porque Seto lo interrumpió.

 

         -Es Seto-le dijo para después versarlo-llámame… Seto-lo vio directo a esos hermosos ojos miel que tanto lo habían        estado volviendo loco.

 

         -Seto… Seto-gemía el nombre de su ahora amado- aah… aah…- No sabía, ni esperaba y mucho menos soñaba con     algún día estar en esa posición con el CEO, pero ya eso le daba igual, podía sentir  a Kaiba dentro de él, tenía ese          hermoso par de ojos azules como zafiros encima de él y sentía como es que Seto aumentaba su ritmo para así llegar a   su clímax.

 

         -Joey… te… a…mo-fue lo que dijo para al fin llegar a su orgasmo.

 

Ambos se habían corrido al mismo tiempo, se recostaron en la cama por un momento, sus cuerpos seguían calientes y sus respiraciones se estaban normalizando, Kaiba acerco a Joey hacia su pecho y acaricio su cabello por un par de minutos hasta que el rubio cayó víctima del sueño y el cansancio, Seto lo acompaño por unos minutos y luego se fue a dar una ducha para que terminara de calmarse. Cuando salió del baño, ya se estaba vistiendo, y algo capto su atención.

 

         -Entonces… ¿Qué pasara ahora?- la voz de Joey se había hecho presente- ¿Qué somos?-dijo mientras veía a Kaiba     terminando de ponerse una camisa.

 

         -Somos lo que tú quieras creer, Cachorro-dijo mientras se acercaba a él.

 

         -¿Ya no soy “Perro”?-le dijo algo divertido.

 

         -Ya no-se acercó a su mesa de noche y saco la cajetilla  que le había regalado a Joey unas horas antes- ¿Fumas?-le dijo con una sonrisa y  Joey  acepto el rollito de tabaco que le había ofrecido su ahora novio, Seto lo encendió y ambos       disfrutaron del mismo cigarrillo.

 

         -Novios entonces.

 

         -Sabes, según la psicología, fumar después de tener sexo, hace que quieras más-le dijo mientras le quitaba el tabaco de          la boca a Joey para poder él aspirar un poco, luego de sacar la fumarola, se acercó al rubio y lo beso.

 

         -¿Qué? ¿Quieres más? –le dijo divertido, aun estando desnudo y solo tapándose con las sabanas. Sintió como sentó    junto a él y paso  pasó su mano por su cabeza, así que el tomo-es curioso, tu mano esta fría, pero sintió un extraño          calor cuando la toco.

 

         -Te amo Joey…

 

Y diciendo esto lo volvió a besar…

 

 

P.D.: Les quiero compartir uno de los fics que Pan 4 ever ha escrito y a la vez les dejo el link para que puedan visitar su plataforma de Wattpad y se deleiten leyendo de sus historias.

 

A la vez adjunto una imagen que le sirvió a ella como inspiración para escribir esta bella historia.

 

https://www.wattpad.com/1049444703-%C2%BFfumas-parte-1-sin-t%C3%ADtulo?fbclid=IwAR07nQX6w5JCJwzj7g_Al0fjciN86IC-RpBmF_0D1R9uctfhNnSSx3q10_Y