Capítulo 67: Una triste noticia.
Notas del capítulo: Por lo general a todos nos gusta
recibir buenas noticias, y cuando las recibimos nos ponemos muy contentos.
¿Pero qué pasa al recibir una mala noticia o una triste? Cualquiera de las dos
que recibamos nos pone afligido, solemos preocuparnos más de la cuenta y en
ocasiones no sabemos qué hacer o cómo reaccionar ante esta situación. Lo mejor
que hay que hacer es tratar de conservar la calma y pensar con claridad.
Declaimer:
Noticia de último momento… “YU – GI – OH!, No es mío”… Mucho menos sus
personajes… Son propiedad de su respectivo autor, pero toda la trama de esta
historia si es creada por mí. Amo inventarles historias nuevas a mis queridos
personajes, es una manera de expresar lo que siento, y tener la dicha de
poderlo compartir con todos ustedes. ^_^
******************************
Horas más tarde…
Un joven estaba llegando al departamento de su novio, se sentía
cansado de tanto trabajar, en cuanto entró al lugar comenzó a buscar a su
pareja.
Hola amor, ya vine.
Mokuba, no te oí
llegar, ¿cómo te fue?
Ni te imaginas, hoy
fue un día de locos.
Ven, siéntate en el
sillón en lo que te sirvo un vaso con agua.
Muchas gracias amor.
Después del pequeño descanso decidieron iniciar con la
conversación…
Cuéntame cómo está
eso de que tuviste un día de locos.
Estuve revisando
algunos documentos de contabilidad y resulta que los libros no cuadraban.
¿Qué, insinúas que
le están robando a Bakura?
No lo sé amor.
¿Esos libros
pertenecían a la tienda donde trabaja Ryou?
¿Qué tratas de
decirme, no pensarás que Ryou le está robando a su propio novio?
Perdóname, creo que
fue una pregunta tonta la que te hice.
Nada de eso amor, y
déjame decirte que esos libros los recibí de la otra tienda.
¿Estás seguro?
Completamente. ¿Por
qué?
¿No se suponía que
tú llevabas solamente los libros de contabilidad de la tienda donde Ryou
trabaja?
Es verdad. – Se
quedó pensando por un momento. – Aguarda un segundo, creo entender tu punto, de
seguro Bakura ya lo sabe y me los mandó a mí para ver si sus sospechas son
ciertas.
¿Qué piensas hacer?
Los tendré que
revisar mañana con más calma para ver si no estoy equivocado.
Pero mañana es
sábado amor.
Ni modo, tendré que
trabajar el fin de semana.
Olvidas que íbamos a
visitar a Joey.
Demonios, lo olvidé
por completo, le llamaré mañana para disculparme con él.
¿Vas a querer que te
ayude en algo?
No amor, gracias.
******************************
Hoy pasamos un día increíble.
Es verdad Ryou.
Muchas gracias por
acompañarnos Baki. – Se le quedó viendo algo preocupado. – ¿Baki, qué tienes
amor?
Eh, perdón Ryou,
¿qué me decías?
¿Sucede algo malo?
No Ryou.
Es que de pronto te
quedaste muy pensativo y serio a la vez.
Discúlpame por
favor, mejor dime qué me estabas diciendo.
Te daba las gracias
por acompañarnos este día a ir con el médico.
No tienes nada que
agradecer amor.
Hubo un profundo silencio…
Yo me iré a
descansar a mi habitación para que ustedes se queden solos. – Rompió con aquel
incómodo mutismo.
Está bien Joey,
descansa.
Adiós amigo.
Hasta luego chicos.
Una vez que se quedaron solos…
¿Me dirás lo que te
sucede?
No me pasa nada.
Por lo visto no me
tienes confianza al contarme tus cosas. – Manifestó con tristeza.
No amor, no es eso,
es sólo que…
Bakura, si no
quieres decírmelo está bien, no hay problema. – Lo interrumpió de golpe.
No es eso Ryou.
Baki, no quiero que
te sientas presionado en contarme.
Escúchame por favor.
De acuerdo.
Tengo un pequeño
problema.
¿Por esa razón es
que has estado muy callado y serio todo el día?
Si.
¿Hay algo en lo que
yo te pueda ayudar?
Lo siento mucho
amor, por el momento no hay nada que puedas hacer.
Entiendo. – Bajó un
poco la cabeza.
Ryou, te agradezco
mucho que quieras ayudarme…
Y como no voy a
querer si tú siempre has estado conmigo en las buenas y en las malas, y creí
que esta vez te iba a poder ayudar en algo. – Lo volvió a interrumpir de golpe.
Ryou, escúchame,
déjame resolver este problema a mi manera, y si llego a necesitar un consejo te
prometo que acudiré a ti.
¿Lo prometes?
Claro que si mi
amor. – Se le acercó para darle un beso en los labios. – Sabes una cosa.
¿Qué?
Siento raro que
alguien se preocupe por mí. – Le sonrió con ternura.
No deberías de
sentirte raro, recuerda que ya tienes a alguien que se preocupe por ti, y eso
incluye también a Joey.
Es verdad, me siento
afortunado por tenerlo a él como amigo y a ti como mi novio. – El menor se ruborizó
al escuchar las palabras de su novio. – Te amo mucho Ryou.
Y yo a ti Baki.
Estaban a punto de besarse de nuevo, pero el sonido del timbre de
la puerta los interrumpió…
******************************
En algún lugar de Ciudad
Domino…
Una joven estaba llegando a su casa algo preocupada, lo que había
visto la dejó helada y no sabía que decisión tomar. Su cabeza era un mar de
confusiones, por un lado su corazón le decía que debía de hablar, pero por el
otro lado su mente le decía que tenía que callar.
“No sé qué hacer,
nunca me imaginé que Yami le estuviera siendo infiel a Yūgi, y lo peor que con
nuestro amigo. Hay no, pobre Yūgi, que decepción más grande la que se va llevar
si le cuento lo que vi, quizás lo más seguro es que no me va creer y me dirá
que todo lo estoy inventando. Por esa razón es que decidí tomar algunas fotos. Rayos,
sigo pensando que fue mala idea en ir a buscar a Yami para poder hablar con él,
con eso de que había visto a Yūgi tan deprimido”… – Se sentó en la orilla de su
cama mientras que seguía mirando el video en su celular. – “Estúpido Yami, ¿cómo
puede hacerle eso a Yūgi? Aun sabiendo que él es el amor de su vida, será una
noticia bastante devastadora para Yūgi. Ese Tristán, ¿cómo se le ocurre meterse
con el esposo de su amigo? ¿En qué cabeza le cabe ser el amante de un hombre
casado? Habiendo tantos hombres en el mundo no se pudo fijar en cualquier otro.
Pero no culpo del todo a Tristán, vamos también a Yami que se atrevió a engañar
a Yūgi, es que de verdad siento que ninguno de los dos merecen ser perdonados.
Que rabia la que tengo, ambos están jugando con los sentimientos de Yūgi, creo
que ahora comienzo a entender muchas cosas, sobre todo el comportamiento de
Tristán hacia Yūgi y Joey, la pregunta es… ¿Por qué? Algo me decía que Tristán
estaba tramando algo, ahora entiendo el por qué empezaba a vestirse con ropas
de marcas, usar zapatos de marcas, y eso es porque el estúpido de Yami lo
mantiene. Grrr… Definitivamente tengo que hacer algo, la verdad es que no sé
qué hacer”. – Se quedó pensando por un buen rato. – Y si le pido un consejo a…
¡Eso es! Tal vez él me pueda ayudar a tomar una buena decisión.
******************************
Hola Joey, ¿puedo
pasar?
Adelante Ryou, pasa.
Discúlpame por venir
a molestarte.
Descuida, no te
preocupes.
Vine avisarte que
acaba de llegar tu hermana.
Hazla pasar por
favor.
De acuerdo.
Al poco tiempo entraba una mujer a la habitación.
Hola hermano, ¿cómo
estás?
Estoy bien Shizuka,
y tú qué me cuentas.
Hubo un breve silencio que incomodaba al rubio…
Joey, he venido para
hablar contigo.
Dime de qué se
trata.
Me siento muy
apenada por lo que voy a decirte, pero…
Shizuka, no te
quedes callada por favor.
Lo que pasa es que
no quiero angustiarte, y no quiero que te vayas a sentir mal.
Pues si no me dices
nada me voy a preocupar.
De acuerdo. –
Suspiró profundamente para continuar con la conversación. – Joey, a mi pareja
se le presentó un problema y me pidió que viajara a donde se encuentra para que
pueda ayudarla.
¿Qué? ¿Piensas irte
ahora?
Lo siento mucho
hermano.
¿Cuándo piensas
irte?
El próximo fin de
semana.
¿Tan pronto?
Si. – El rubio bajó
la cabeza, sin embargo su hermana se la levantó para que lo viera a los ojos. –
No estés triste, te prometo estar aquí antes de que nazcan mis sobrinos.
Está bien hermana. –
Intentó sonreírle un poco.
Discúlpame por
dejarte solo en un momento como este.
No es necesario que
te disculpes, entiendo que tienes que ir a ayudar a tu pareja.
Muchas gracias por
entenderlo Joey. Por cierto, cuando regrese de mi viaje te la voy a presentar.
¿Y tú crees que le
simpatice?
Claro que sí, eres
un amor de hermano.
¿Y tu pareja es
hombre o es mujer?
Es una mujer Joey.
¿En serio?
Sí, es en serio, y
déjame decirte que le he hablado mucho de ti.
Baia, no puedo creer
lo que me estás diciendo.
Pues créelo porque
es la verdad.
En ese caso dile que
yo también ansío conocerla.
Algo me dice que
ustedes se van a llevar muy bien.
Yo espero y tengas
razón hermana.
Bueno ya, cambiando
de tema, cuéntame cómo te fue con el Doctor.
Me fue muy bien.
¿Y ya te dio fecha
de cuándo nacerán mis sobrinos?
Si.
Bueno, no te quedes
callado y dime cuándo nacerán.
El 14 de febrero.
¿QUEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEÉ?
– Gritó de la emoción.
¿Por qué te
sorprendes?
Esa es la fecha en
que mi pareja se me declaró, ay hermano es una bonita fecha. – Sonreía de lo
feliz que se sentía.
Lo sé, yo tampoco
puedo creer que mis hijos nazcan en esa fecha. Aunque…
¿Qué ibas a decir?
El Doctor Mahādo me
dijo que era una fecha tentativa, que por ser primerizo lo más seguro es que
mis hijos nazcan antes de tiempo.
Te agradezco que me
hayas dado esa información, así aprovecharé para terminar todos los pendientes
que tengo y venirme lo antes posible para acá para poder estar contigo.
Muchas gracias
Shizuka.
Tú no te preocupes
por nada, yo te estaré llamando todos los días para ver cómo estás.
No creo que sea para
tanto.
Nada de eso, quiero
saber hasta el más mínimo detalle, no deseo perderme de nada.
Está bien, se hará
como tú digas.
Muchas gracias Joey.
– Le da un fuerte abrazo.
Continuará…
N/A: ¿Le estarán robando a Bakura? ¿Cómo solucionará este problema el
albino mayor? ¿Quién habrá descubierto el secreto de Yami y de Tristán? ¿Se
atreverá a decirle toda la verdad a Yūgi? ¿Cuál sería la reacción de Yūgi si se
enterara de esta terrible verdad? ¿Volverá Shizuka a tiempo para el nacimiento
de sus sobrinos? Todo esto y más lo iremos descubriendo en los siguientes
capítulos, muchas gracias por haberme seguido desde el inicio de esta historia,
no olviden dejar sus comentarios que yo con mucho les responderé. Cuídense
mucho, pórtense bien y no salgan de casa al menos que sea estrictamente
necesario. Protéjanse y cuiden muy bien de sus familias, nos vemos el próximo
viernes.
Me despido cariñosamente de todos ustedes no sin antes dejarles
muchos besos virtuales y un fuerte abrazo virtual. Katsuya aquí, Katsuya allá,
una Katsuya los saludará… XD
Atte.:
KAT.
Es la Perranzu la que tomo más fotos te apuesto
ResponderEliminar¿Tú crees que fue ella?
Eliminar