viernes, 18 de diciembre de 2020

SIN CACHORRO… NO HAY NAVIDAD…



Capítulo 60: No marchites el amor que tengo por ti…

 

 


Notas del capítulo: Muchas veces nos preguntamos, ¿por qué hay personas que lastiman, hieren y golpean a su pareja? ¿Qué ganan con hacerles daño? ¿Por qué no simplemente se divorcian y cada quien que siga su camino? ¿Por qué se creen los dueños de él/ella? Más de algún hogar se sufre la violencia intrafamiliar, y lo peor del caso es que las víctimas prefieren callar los abusos que están sufriendo en vez de buscar ayudar, y lo hacen creyendo por distintas razones: Él va a cambiar, el me prometió que no lo volvería hacer, el me ama, no puedo vivir sin él, etc. Son estereotipos que las víctimas se crean para no afrontar su cruel realidad, y lo peor del caso es que el hombre suele tener el control de todo, el hombre con su alto ego de superioridad, y su estúpido orgullo machista creen que con lastimar a su pareja piensan que la retendrán a su lado toda la vida… Sin darse cuenta que todo tiene un límite y un final…

 

 

AVISO IMPORTANTE: Este capítulo tendrá argumentos fuertes, sádicos, dolorosos y hasta perturbadores, así que antes de leerlo… Te sugiero que lo pienses bien antes de continuar… No me hago responsable por traumas psicológicos, depresiones o pesadillas que puedan tener en las noches… Leer bajo su propio riesgo. Soldado avisado, no muere en guerra.

 

 

Declaimer: Noticia de último momento… “YU – GI – OH!, No es mío”… Mucho menos sus personajes… Son propiedad de su respectivo autor, pero toda la trama de esta historia si es creada por mí. Amo inventarles historias nuevas a mis queridos personajes, es una manera de expresar lo que siento, y tener la dicha de poderlo compartir con todos ustedes.  ^_^

 

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Horas más tarde…

 

         ¿Qué sucedió después Joey? – Le preguntaba su hermana.

 

         En ese tiempo Mokuba buscó los planos y una vez que lo encontró nos pusimos a revisarlo para ver si podíamos arreglar la máquina que había construido el padre de Seto.

 

         Pasamos casi seis meses limpiando esa habitación y arreglando la maquinaria que se encontraba toda deteriorada debido al tiempo que pasó sin usarse. – Intervino en la conversación otra persona.

 

         Si no fuera por la ayuda de Mokuba quizás nunca la hubiéramos hecho funcionar.


         No digas eso Joey, tú eres muy bueno reparando cosas electrónicas.

 

         Eso no es cierto. – Se sonrojaba ante el comentario de su cuñado.

 

         Yo quiero saber de qué máquina están hablando. – Comentó el peliverde.

 

         Igual yo quiero saber. – Secundó el albino mayor.

 

         ¿Se lo decimos Joey?

 

         Hey, no sean así.

 

         Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, está bien amor, solamente bromeaba. – Le da un beso en los labios.

 

         La máquina de la que hablamos se trata del dragón blanco de ojos azules.

 

         ¿Queeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeé? – Cuestionaron algunos de los presentes.

 

         Verán, mi padre se lo construyó a mi madre, como Joey les acaba de contar a ella le gustaba mucho la época navideña, así que a mi padre se le ocurrió fabricar un enorme dragón subterráneo, cada vez que se acercaba el mes de diciembre mi madre lo activaba y el dragón se levantaba por los cielos e iluminaba todo el lugar con una hermosa luz de color azul.

 

         Yo quedé maravillado cuando lo vi funcionar, realmente parecía una gran estrella.

 

         Como me hubiera gustado poder verlo.

 

         Algún día lo podrás ver mi amor.

 

         Me pregunto si Seto habrá decorado la mansión con adornos navideños, luces, y un árbol de navidad.

 

         Yo creo que si Joey, desde que reactivaste de nuevo ese dragón, mi hermano prometió que nunca se volvería apagar de nuevo.

 

         Supongo que tienes razón. – Medio sonrió. – “Esta será mi primera navidad sin ti mi amor”. – Esto último lo pensó para sí mismo.

 

         Basta de cosas triste y sigamos con esta pequeña celebración.

 

         Así se habla Shizuka. – Apoyó el albino mayor.

 

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Ciudad de Tokio…

 

Unos hombres estaban llegando a un hotel, en lo que entraban trataban de no discutir en el camino y se dirigían rápidamente a su habitación. Una vez dentro…

 

         ¿Todavía sigues molesto?

 

         Tú que crees.

 

         NO ME HABLES EN ESE TONO DE VOZ. – Advirtió molesto.

 

         ¿Y CÓMO QUIERES QUE TE HABLE?

 

         YA BASTA TRISTÁN, TE ESTAS COMPORTANDO MUY INFANTIL.

 

         AHORA RESULTA QUE SOY INFANTIL.

 

         MI PACIENCIA SE ESTÁ AGOTANDO, TE HE COMPLACIDO EN TODOS TUS CAPRICHOS.

 

         NO EN TODOS, NO QUISISTE COMPRARME ESA HERMOSA CADENA DE ORO JUNTO CON LA ESCLAVA[1].

 

         ¿PARA QUÉ QUIERES ALGO ASÍ? SI NI SIQUIERA PODRÍAS USARLA, ¿O ACASO QUIERES PRESUMIRLA CON ESOS AMIGOTES TUYOS?

 

         NO TRATES DE CAMBIARME EL TEMA.

 

         CONTÉSTAME TRISTÁN. – Gritó furioso.

 

         NO IBA A PRESUMÍRSELA A NADIE, SOLAMENTE ME GUSTÓ Y PENSÉ QUE ME LO COMPRARÍAS.

 

         ¿POR QUÉ PENSASTE ESO?

 

         NUNCA ME HAS COMPRADO JOYERÍA.

 

         SÍ QUE ERES ESTÚPIDO, JAMÁS TE COMPRARÉ JOYERÍA.

 

         ¿POR QUÉ?

 

         PORQUE LA JOYERÍA SOLAMENTE LA USAN LA GENTE ESTÚPIDA.

 

         ESO NO ES CIERTO.

 

         CONFÓRMATE CON LO QUE TE HE COMPRADO.

 

         PERO…

 

         SÍ QUE ERES OBSTINADO, DEBERÍAS DE APRENDER A YŪGI.

 

         ¿QUÉ TENGO QUE APRENDER DE ÉL?

 

         PARA EMPEZAR, EL SÍ SABE OBEDECERME EN TODO.

 

         ¿EN SERIO?

 

         SI.

 

         Y SEGÚN TÚ EN QUE TE HACE CASO.

 

         ANTES DE VENIRNOS HACIA ACÁ LE DIJE CLARAMENTE QUE NO FUERA A ESA ESTÚPIDA CENA NAVIDEÑA QUE USTEDES IBAN A CELEBRAR EN EL DEPARTAMENTO DE ESE TAL RYOU.

 

         PUES SABES QUÉ MI AMOR, AQUÍ EL ESTÚPIDO ERES TÚ.

 

         ¿QUÉ FUE LO QUE DIJISTE? – Estaba por darle un puñetazo en la cara, pero se detuvo al ver la imagen que le mostraba su amante por medio de su celular.

 

         SÍ QUE TE HACE CASO EN TODO. – Manifestó sarcásticamente.

 

         AHORA MISMO NOS REGRESAMOS A CIUDAD DOMINO.

 

         ¿QUEEEEEEÉ? ¿POR QUÉ?

 

         ESO A TI QUE TE IMPORTA, NOS VAMOS Y PUNTO.

 

         YO NO ME QUIERO IR, PROMETISTE QUE ESTARÍAMOS AQUÍ HASTA EL DOMINGO.

 

         ALLÁ TÚ SI TE QUIERES QUEDAR, YO ME VOY.

 

         ESTÁ BIEN, ME IRÉ CONTIGO.

 

******************************

 

         Hoy tuvimos una noche inolvidable.

 

         Ya lo creo que si Tea.

 

         Todos la pasamos genial.

 

         Es verdad Malik.

 

         Yo les agradezco que hayan venido amigos.

 

         No tienes nada que agradecer Joey.

 

         Concuerdo con lo que dice Yūgi.

 

         ¡Qué barbaridad!

 

         ¿Qué sucede Shizuka?

 

         No me había dado cuenta lo tarde que es ya.

 

         ¿Qué horas son?

 

         Ya van hacer las 11:30 de la noche.

 

         Tienes razón, ya es muy tarde.

 

         Es hora de irnos.

 

         Está bien, no olviden avisarme en cuanto lleguen a sus casas.

 

         De acuerdo Joey, adiós Ryou.

 

         Adiós Yūgi.

 

         Yo también me voy hermano.

 

         Gracias por venir hermana.

 

         De nada. – Le da un beso en la mejilla. – Cuídate mucho.


         Tú también.

 

Cada uno se despedía para irse a sus casas…

 

         Nosotros también nos vamos.

 

         Se van con cuidado Mokuba.

 

         Claro que si Joey. Ryou, muchas gracias por todo.

 

         No hay nada que agradecer.

 

         Disculpen, Malik y yo también nos vamos.

 

         Se van con mucho cuidado.

 

         Por supuesto que si Joey.

 

         Adiós a todos.

 

         Adiós amor. – Le da un beso en los labios.

 

         Gracias por venir Baki.

 

         No tienes nada que agradecerme pequeño.

 

         ¿Vendrás mañana? – Se sonrojó un poco.

 

         Claro que si amor, vendré a verte mañana. – Volteó a ver a su amigo. – Adiós Joey, cualquier cosa me llaman.

 

         Muchas gracias Bakura.

 

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Horas más tarde…

 

Un joven llegaba a su mansión, se le hizo extraño ver algunas luces prendidas, estaba entrando a la sala cuando un hombre salió a su encuentro…

 

         ¿De dónde vienes Yūgi?

 

         ¡Yami! ¿Qué haces aquí? – Se puso nervioso al encontrar a su esposo.


La otra persona se le acercó al recién llegado para darle un golpe certero en la cara.

 

         Aquí quién hace las preguntas soy yo, así que contéstame inútil.

 

         Yo… – Hacia lo posible por no llorar. – Fui a reunirme con Tea.

 

         Por lo visto tú no aprendes verdad Yūgi. – Lo agarró fuertemente del pelo para zarandearlo. – Voy a preguntártelo una vez más, ¿de dónde vienes?

 

         Aaaaaaahhhhhh, Yami por favor, suéltame, por favor, me… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif, duele… Aaaaaaaaaaaaaaaayyyyyyyyyyyy… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

         Bien sabes que odio las mentiras, así que habla de una vez. – Lo seguía agarrando del pelo con fuerza haciéndole la cabeza hacia atrás.

 

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Fui… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Fui con Tea a la cena navideña… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

         No te dije claramente que no fueras a esa estúpida celebración. – Lo aventó al suelo con fuerza como si se tratara de un objeto inservible.

 

         Aaaaaaahhhhhh… – Gritó al caer.

 

         Voy a darte un escarmiento que no olvidarás.

 

         No Yami… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Por favor no lo hagas… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

         Lo hago por tu bien Yūgi para que no vuelvas a mentirme y no vuelvas a desobedecerme. – Le daba fuertes patadas en todo su cuerpo, sin importarle los gritos de su esposo.

 

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Aaaaaaaaaaahhhhhhhhhhhh… Yami, déjame por favor, me duele… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Ya no me golpees por favor… Aaaaaaaaaaahhhhhhhhhhhh…

 

         ¡¡¡Ya Cállate!!! Te dije claramente que no fueras a esa estúpida cena navideña, me desobedeciste cuando te dije que no fueras al estúpido Baby Shower, y ahora me vuelves a desobedecer. – Dejó de patearlo para agarrarlo fuertemente del pelo y levantarlo del suelo, posteriormente le da una patada en la boca del estómago, viendo como su esposo escupía sangre por la boca.

 

         Aaaaaaaaaaahhhhhhhhhhhh… – Cayó al suelo casi inconsciente.

 

         Ah no, eso sí que no Yūgi, no te desmayes porque todavía no acabo contigo.

 

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Ya no por favor… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Perdóname Yami… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Perdóname por desobedecerte… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

El hombre lo volvió agarrar del pelo y lo arrastró hasta el cuarto, una vez que llegó lo arrojó con violencia a la cama.

 

         ¿Quieres que te perdone? Contéstame inútil, ¿qué estás dispuesto hacer para que te perdone?

 

La otra persona medio se levantó de la cama, miraba con horror al ser que una vez amó.

 

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Yami, por favor, no me hagas daño… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Perdóname por favor… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… No volveré a desobedecerte… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

         Eso no fue lo que te pregunté estúpido. – Comenzó a golpearle la cara una y otra vez hasta hacer sangrar su nariz y labios.

 

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaahhhhhhhhhhhhh… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Basta, ya no, ya no por favor... Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Haré lo que tú quieras, pero por favor… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Ya no me hagas daño… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Ya no me golpees por favor…

 

         Así está mucho mejor, desde ahora las cosas van a cambiar, haremos el amor tal y como a mí me gusta. – Sonrió al ver la mirada de terror que tenía su esposo. – Así es pequeño. – Le acaricia el rostro suavemente. – Vas a empezar por complacerme en la cama, y lo haremos a mi manera. – Se relamió los labios con lujuria.

 

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Nooooooooooooooooooooooooooo… Por favor… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

El hombre al ver que su víctima intentaba escapársele, se apresuró a agarrar la lámpara de noche para luego arrancarle el cabe y con el amarrarle las manos al respaldo de la cama.

 

         Te dije que esta vez lo íbamos hacer a mi manera. – En lo que hablaba le estaba desabrochando su pantalón, al ver que se movía mucho le dio un puñetazo en la boca del estómago y otro en la cara. – QUÉDATE QUIETO MALDITA SEA. – Le gritó furioso.

 

El hombre sacó su billetera de la bolsa de atrás de su pantalón una vez que se lo había quitado, tiró al suelo su prenda y abrió su billetera, en ella sacaba un condón, abrió el sobrecito y se lo puso en su pene. Se relamió los labios al ver a su esposo sometido en la cama completamente desnudo.

 

         No sabes como he soñado con este momento Yūgi, te vez hermoso ofreciéndote ante mí.

 

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Yami, por… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Por favor no lo hagas… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Aún te amo Yami… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… No marchites el amor que tengo por ti…

 

         Shhhhh, yo también te amo pequeño, y no te preocupes por nada que lo que va pasar esta noche verás como se fortalece nuestro amor. – Se subía a la cama, y agarrándole con fuerza ambas piernas para abrírselas, y sin preparación alguna lo penetró de un sólo golpe sacándole un grito ensordecedor a su víctima.

 

         AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHH… Dueleeeeeeeeeee… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Duele, duele mucho, sácalo Yami, por favor… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Por favor, sácalo… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Aaaaaaaaahhhhhhhhhhh… Me estas lastimando… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… – El joven sentía que su esposo lo estaba partiendo por la mitad, ese enorme pene desgarraba sin piedad su delicado y pequeño trasero, cada embestida que le daba su pareja, sentía que lo estaba matando por dentro, gruesas e infinitas lágrimas corrían por sus ojitos lavanda, y por el inmenso dolor que sentía no era capaz de poderlos abrir. Debido a las salvajes embestidas que estaba recibiendo, su ano comenzaba a sangrar y ese líquido carmesí recorría las piernas del muchacho y la misma sangre humedecía el pene de su agresor…

 

         Aaaaaahhhh, aaaaaahhhh, aaaahhhh, puedo sentir lo mojado que estas, aaaaahhhh, aaaaahhhh, aaaaahhhh, sabía que te iba a gustar Yūgi, aaaahhhh, aaaaahhhh, apenas estamos comenzando y tú ya te estas corriendo como la puta que eres, aaaaahhhh, aaaaahhhh, aaaaahhhh, es increíble que sigas estrecho mi amor, aaaaahhhh, aaaaahhhh, aaaaahhhh, siento como me lo estas apretando muy rico, aaaaahhhh, aaaaahhhh, aaaaahhhh… – Las sanguinarias y salvajes embestidas seguían, el hombre le sujetaba con firmeza sus caderas y lo movía desenfrenadamente lastimándolo cada vez más. Salía y entraba con más fuerza, importándole un cuerno los gritos del otro. Dejó de embestirlo por un momento, llevó su mano al pene de su esposo y empezó a masturbarlo sin ningún pudor, una vez que dio inicio, apoyó la otra mano en la cadera del joven para seguirlo arremetiendo salvajemente, de vez en cuando pellizcaba fuertemente la punta de su pene que también sangraba debido a que le enterraba la uña de su dedo pulgar.

 

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… ¡PARAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA! Por... Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Por favor... Me... Snif, snif, snif, snif… Me duele mucho Yami… Me... Duele Mucho… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Por... Favor… Ya… No… Basta por favor… No sigas…  AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHH... Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Así no por favor, no me la metas tan duro Yami por favor, no seas tan brusco conmigo… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… AAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHH... – Cada grito que el joven daba, excitaba aún más a su dizque esposo, y éste aumentó la fuerza de sus embestidas solamente para escucharlo gritar más fuerte.

 

         Aaaahhhh, aaaahhhh, aaaahhhh, Te la voy a meter como se me dé la gana, y seré tan brusco como quiera, así que gime para mí querida putita, quiero oírte gritar más fuerte, aaaahhhh, aaaahhhh, aaaahhhh, oh si, por qué no te traté así antes, aaaahhhh, aaaahhhh, aaaahhhh, no tienes idea de lo bien que me lo estoy pasando contigo Yūgi, aaaahhhh, aaaahhhh, aaaahhhh, anda, quiero oírte gritar con más fuerza, di que serás mi puta en la cama, aaaahhhh, aaaahhhh, aaaahhhh, DILO... – Sacaba su pene para arremeterlo con más fuerza, lo hacia una y otra vez en forma de tortura para obligarlo a decir lo que él quería escuchar.

 

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Noooooooooooooo… – Sus manos estaban muy lastimadas debido a la presión que ejercía por liberarse, nunca se imaginó que su amado Yami lo violaría de esa manera tan cruel

 

         Que no escuchaste lo que te acabo de decir inútil. – Sacó su pene por completo, llevó ambas piernas hacia arriba de su cabeza poniéndolo en una posición bastante incómoda posteriormente lo arremetió con todas sus fuerzas.

 

         AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHH... Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Por favor Yami, ya no sigas… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Detente por favor… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Te lo suplico…

 

         Di lo que quiero escuchar, aaaahhhh, aaaahhhh, aaaahhhh… Dime como tienes tu culo de caliente y de cómo te está gustando... Aaaahhhh, aaaahhhh, aaaahhhh… DIMELO.

 

La otra persona dejó de resistirse y finalmente dijo lo que su esposo quería escuchar.

 

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Seré tu puta en la cama…

 

         Grita más fuerte hasta que te lo creas… Aaaahhhh, aaaahhhh, aaaahhhh…

 

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… SERÉ TU PUTA EN LA CAMA… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… SERÉ TU PUTA EN LA CAMA… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… SERÉ TU PUTA EN LA CAMA… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… SERÉ TU PUTA EN LA CAMA… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Por favor detente, ya no más, detente Yami, te lo suplico, ya no más por favor… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Me duele mucho… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

Después de un buen rato, el hombre estaba por terminar al igual que la persona que se encontraba debajo de su cuerpo…

 

         Oh si, anda ramera, quiero que acabes conmigo, aaaahhhh, aaaahhhh, aaaahhhh…


AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHH   AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHH

 

Ambos derramaron su semilla, el hombre lo hizo dentro del trasero de su pareja, y éste se derramaba sobre su pecho. Yūgi estaba a punto de perder el conocimiento, se sentía muy cansado, sus piernas temblaban, además de que le dolía todo su cuerpo, podía sentir como su sangre bajaba por sus piernas, Yami salía lentamente de él, se quitó el condón y se lo tiró en la cara diciéndole:

 

         Agradece que usé protección esta vez. – Después de terminarlo de humillar decide soltarlo finalmente, y lo deja tirado en la cama, dejando a un muchacho con la mirada perdida viendo hacia la nada…

 

 

Continuará…

 

 

N/A: ¿Qué final desean para Yami? ¿Quieren que esta pareja terminen juntas? ¿Qué hará Yūgi ahora? ¿Creen ustedes que el amante tenga que ver en todo esto? ¿Habrá cumplido con la promesa el gato pulgoso? ¿Cómo será la navidad para ellos ahora que están separados? Todo esto y más lo iremos descubriendo en los siguientes capítulos, quini mil gracias por seguirme desde el inicio de esta historia, y por todo su apoyo que ustedes me brindan, no olviden dejar sus comentarios que yo con mucho gusto les responderé.

 

Me despido muy cariñosamente de todos y cada uno de ustedes, cuídense mucho y no salgan de casa al menos que sea estrictamente necesario.

 

Atte.:

 

            KAT.




P.D.: A petición de unos de mis lectores, el día 24 de diciembre subiré cinco nuevos capítulos, los invito para que no se pierdan la continuación de esta gran aventura. Les deseo a todos ustedes que pasen una muy feliz navidad y próspero año nuevo. Que estas fechas la puedan pasar con sus familiares, amigos, y seres queridos.



 



[1] Esclava: Es un accesorio que usan los hombres en la muñeca, algo así como una pulsera (joyería).


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