SIN CACHORRO… NO HAY NAVIDAD…

Capítulo 66: Chequeo médico rutinario.

 

 

Declaimer: Noticia de último momento… “YU – GI – OH!, No es mío”… Mucho menos sus personajes… Son propiedad de su respectivo autor, pero toda la trama de esta historia si es creada por mí. Amo inventarles historias nuevas a mis queridos personajes, es una manera de expresar lo que siento, y tener la dicha de poderlo compartir con todos ustedes.  ^_^

 

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Dos días después…

 

         ¿Cómo se encuentra doctor?

 

         Al parecer todo marcha bien. – En eso volteó a ver a su paciente. – Lo felicito joven, se ha sabido cuidar muy bien.

 

         Muchas gracias Doctor, pero a quien debe felicitar es a Ryou, él me ha sabido cuidar.

 

         Que cosas dices Joey, no es para tanto.

 

         Joven Ryou, lo felicito por haber seguido mis indicaciones al pie de la letra.

 

         Gracias Doctor.

 

         Disculpe Doctor Mahādo.

 

         Si dígame.

 

         Hay algo que he querido preguntarle, y no lo he hecho por pena.

 

         Tú puedes preguntarme lo que sea.

 

         Lo que pasa es que casi no he sentido los síntomas de mi embarazo, y pues… Pues, me he preguntado si eso es normal.

 

El hombre medio sonrió al escuchar lo que su paciente le decía.

 

         ¿Te has sentido mal Joey?

 

Su amigo lo volteó a ver para ver qué respuesta daba.

 

         No, es sólo que últimamente me he sentido un poco cansado, tengo algo así como indigestión, problemas para dormir, a veces siento como si el aire me faltara, y… – Se quedó callado por lo que iba a decir y sus mejillas se ruborizaron de la pena.

 

         ¿Y? Continúa por favor, qué es lo que me ibas a decir.

 

         Tengo salidas súbitas de leche en mis senos. – Manifestó con la mirada en el suelo.

 

         Joey, es normal que te sientas así, ya estas por entrar al octavo mes, y esos síntomas son comunes que los sientas, no debes de apenarte por eso. – Le levantó la cara para que lo viera a los ojos.

 

         ¿De verdad es normal?

 

         Así es, ahora te daré la fecha de cuando nacerán tus bebés.

 

         ¿Cuándo va ser Doctor? – Preguntaba entusiasmado.

 

         Si todo sale bien y no presentas ninguna complicación, lo más seguro es que tus bebés nacerán el 14 de febrero.

 

         ¿Es en serio? – Comenzaba a llorar de la emoción.

 

         No es una fecha exacta, recuerda que eres primerizo, por eso les voy a pedir a ambos que estén atentos a cualquier cambio anormal que se presente, si llegas a sentir mucho dolor llámame enseguida.

 

         Si Doctor, así lo haré.

 

         Disculpe Doctor, qué quiso decir con eso. – Indagó con curiosidad el albino.

 

         Como acabo de decir, Joey es primerizo y es muy probable de que los bebés nazcan un poquito antes de la fecha.

 

         ¿Qué?

 

         Tranquilo Ryou, todo va salir bien. – Le sonreía con ternura para calmarlo.

 

         Bien, por ahora eso es todo, no olvides guardar mucho reposo, y nada de desarreglos.

 

         No se preocupe Doctor Mahādo, le prometo que lo seguiré cuidando muy bien.

         ¡Ryou! – Exclamó sorprendido.

 

         Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja. – Ambos se reían.

 

         Por ahora eso es todo Joey, te veré la próxima semana.

 

         Está bien Doctor, y muchas gracias por todo.

 

Cuando salieron del consultorio, el médico se quedó muy pensativo.

 

         “Algo me dice que dentro de poco tendré una visita inesperada, los últimos síntomas que vas a sentir no los sentirás tan fuertes Joey, y eso es porque alguien está tomando tu lugar. Y la verdad es que me alegro que sea él quien sufra y no tú”. – Medio sonreía para sí mismo.

 

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En algún lugar de Ciudad Domino…

 

         Hola mi amor, ¿cómo estás?

 

         ¿Qué demonios haces aquí? – Preguntaba molesto.

 

         Pero que recibimiento el tuyo, solamente pasaba a visitarte.

 

         Ya te he dicho que no me visites a mi oficina, y a todo esto, ¿qué fue lo que le dijiste a mi secretaria?

 

         Lo mismo de siempre, que soy un cliente muy importante y que aún teníamos cosas que resolver.

 

         Aun así no debiste de haber venido, no me gusta que te estés dando mucho color.

 

         No le veo nada de malo mi amor.

 

         IMBÉCIL. – Le gritó más que furioso. – OLVIDAS QUE SOY CASADO.

 

El recién llegado se le acercó a él para calmarlo un poco.

 

         Ya sé que eres casado Yami, no tienes que recordármelo a cada rato, y me duele cada vez que me tratas mal.

 

         Pues si no te gusta cómo te trato, ahí está la puerta para que te largues.

 

         Oh vamos, no estarás hablando en serio. – Se había logrado sentar en sus piernas, comenzaba a acariciarlo y a besar su cuello.

 

         ¿Qué crees que haces idiota? – Lo tiró de golpe al suelo.

 

         Dándote un poco de cariño, solamente quiero consentirte.

 

         Bien sabes que puedes hacerlo, pero no aquí idiota, alguien podría entrar.

 

         Tranquilo Yami, me aseguré en que no tuvieras ningún cliente. – Se levantaba del suelo.

 

         Por lo visto no eres tan tonto como pensaba.

 

         Pues ya viste que no lo soy. – Se le volvió a acercar para besarlo. – Bésame Yami, quiero que me hagas tuyo. – Le susurraba en la oreja mientras que una de sus manos la bajaba a su entrepierna para tocarlo.

 

         Aaaaahhhhh, aaaaaahhhh, tu si sabes cómo excitarme Tristán. – Lo besaba apasionadamente.

 

Al poco tiempo, el hombre tiró al suelo todas las cosas que había sobre su escritorio, subió a su amante en él y empezó a desvestirlo rápidamente.

 

         Aaaaahhhhhh, aaaaaaahhhhh, Yami, aaaaahhhhh, hazme tuyo.

 

La otra persona se desabrochaba el pantalón con rapidez y una vez que lo hizo agarró las piernas de su amante para separarlas y penetrarlo sin ninguna preparación…

 

         AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH...

 

         Cállate, no grites, ya deberías de estar acostumbrado. – Lo embestía con fuerza.

 

         Aaaaaahhhh, aaaaaahhhh, aaaahhhh, deberías de ser más gentil conmigo… Aaaaaahhhh, aaaaaahhhh, aaaahhhh…

 

         Aaaaaahhhh, aaaaaahhhh, aaaahhhh, a mí me gusta el sexo salvaje… Aaaaaahhhh, aaaaaahhhh, aaaahhhh… Así que ahora te aguantas… Aaaaaahhhh, aaaaaahhhh, aaaahhhh…

 

Llevaban un buen rato haciéndolo, estaban tan concentrados que no se dieron cuenta cuando entró otra persona a la oficina. Al ver la escena frente a sus ojos se petrificó e inmediatamente sacó su celular para tomar un pequeño video y algunas fotos. Después de eso decidió irse como si nada.

 

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Horas más tarde…

 

         Gracias por invitarnos a comer mi amor.

 

         No tienes nada que agradecer Ryou.

 

         Yo aún sigo pensando que me hubieran ido a dejar al departamento para que ustedes estuvieran solos.

 

         Nada de eso Joey, no me hubiera sentido bien dejándote solo.

 

         Baki tiene razón Joey.

 

         Pero es que… Les hago mal tercio.

 

         Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja. – Ambos comenzaron a reírse.

 

         Hay Joey, nunca cambias. – Le decía el albino mayor. – Tú nunca harás mal tercio.

 

         Muchas gracias Bakura.

 

         Mejor cuéntenme, ¿qué les dijo el Doctor?

 

         Dice que todo va bien y que debo seguir con sus indicaciones.

 

         ¿Y ya te dio alguna fecha de cuando nacerán los bebés?

 

         Si.

 

         Te vas a ir de espaldas cuando lo sepas Baki.

 

         ¿Ah sí?

 

         Si, anda Joey, dile.

 

         Según lo que el Doctor nos dijo es que daré a luz el 14 de febrero.

 

         ¿El 14 de febrero?

 

         Si.

 

         Wow, es una fecha muy bonita.

 

         Lo sé. – Contestaba emocionado.

 

         Me alegra saber de qué estés bien Joey.

 

         Muchas gracias Bakura.

 

         En cuanto terminemos de comer lo primero que haré al llegar a casa es preparar la pañalera para no estar a última hora.

 

         Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja. – Ambos se reían.

 

         ¿No crees que estas exagerando Ryou?

 

         Claro que no, acuérdate lo que nos dijo el Doctor Mahādo, la fecha que nos dio es tentativa.

 

         Explícate por favor Ryou.

 

         Según lo que el médico nos dijo es que Joey por ser primerizo puede dar a luz antes de la fecha.

 

         Oh, en ese caso si tienes que tener lista la pañalera. – Bromeaba con su novio haciendo reír a su amigo.

 

         Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, que malo eres Bakura.

 

         Muy gracioso Baki. – Fingía estar molesto.

 

         Hay amor, no te enojes, era una simple bromita. – Le da un beso en los labios.

 

         Jamás podría enojarme contigo amor.

 

         Que les parece si pedimos postre.

 

         Sí, yo sí quiero. – Expresó el rubio muy contento.

 

         Igual yo.

 

         No se diga más y pediremos postre.

 

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         Buenas tardes.

 

         Buenas tardes, pase por favor.

 

         Te agradezco que me haya recibido a esta hora.

 

         No hay nada que agradecer.

 

         Vine a preguntarte cómo te fue con Seto.

 

Se escuchó un fuerte suspiro…

 

         Digamos que no me fue nada bien.

 

         ¿Qué fue lo que pasó?

 

         Fui a tratar de conversar con él, y a decirle de una vez que su esposo aceptaba algunas condiciones  para poderse divorciar rápidamente.

 

         Y luego…

 

         No aceptó los términos de mi cliente.

 

         ¿Qué? – Preguntó asombrado. – ¿Por qué? ¿No se supone que él desea divorciarse de su pareja?

 

         Eso mismo pensé, aunque déjame decirte que hay algo que no me cuadra en todo esto.

 

         Explícame por favor para poder entender.

 

         Él se niega aceptar los términos de mi cliente, y solamente firmará el divorcio si Joey accede a sus peticiones.

 

         Pero eso es absurdo.

 

         Lo sé.

 

         ¿Qué piensas hacer ahora?

 

         Le dije claramente que si él no aceptaba, llevaríamos este caso ante un juez para que sea el quien determine la sentencia.

 

         No te veo muy convencido ante esa decisión.

 

         Por lo visto no te puedo engañar verdad, Marik.

         No amigo.

 

         Yo creo que el señor Kaiba no quiere divorciarse de su esposo.

 

         ¿Por qué lo dices? ¿Acaso te dijo algo?

 

         No me dijo nada, pero sus acciones lo delatan.

 

         Si eso fuera verdad, ¿entonces por qué le mandó esa notificación a Joey?

 

         No estoy muy seguro, pero una cosa si te digo, lo voy averiguar.

 

         Confío en que harás un excelente trabajo Pegasus.

 

         Te agradezco por la confianza que me tienes Marik.

 

 

Continuará…

 

 

N/A: ¿Quién estará tomando el lugar de nuestro lindo cachorro? ¿Quién habrá entrado a la oficina de Yami? ¿Por qué tomó un vídeo y hasta fotos? ¿Serán correctas las sospechas del señor Pegasus? ¿Querrá el neko divorciarse de su cachorro? Todo esto y más lo iremos descubriendo en los próximos capítulos. Los invito para que no se pierdan la continuación de esta interesante aventura, no olviden dejar sus comentarios que yo con mucho les responderé.

 

Me despido cordialmente de todos y cada uno de ustedes, y recuerden quedarse en sus casas, salgan solamente si es necesario, cuídense y cuiden mucho de sus familias. Mil gracias por tomarse su tiempo en leer esta historia, nos vemos el próximo viernes.

 

Atte.:

 

          KAT.

P.D.: Ayer estuve de manteles largos y quiero aprovechar la ocasión para agradecer a todos mis amis, lectores que me felicitaron y por desearme siempre lo mejor en la vida.

 

Cambiando de tema, ayer les comenté que les traía una sorpresa especialmente a ustedes, y es que como despedida de este año no sólo les subiré cinco nuevos capítulos, sino que les subiré diez. Tal como lo acaban de leer, ¡diez nuevos capítulos de esta interesante historia! Este es mi pequeño regalo de fin de año, espero que sean de su agrado. Una pequeña advertencia, vienen episodios fuertes por lo que no me hago responsable por romperles sus kokoros. Y aquellas personas que son sensibles a la violencia, etc., etc., etc. les pido de favor que no los lean. Por lo demás disfruten de este mini especial dedicado con mucho cariño para todos y cada uno de ustedes.

 

Feliz año nuevo les desea su fiel escritora:

 

                                                                    KATSUYA.