viernes, 5 de febrero de 2021

SIN CACHORRO… NO HAY NAVIDAD…



Capítulo 80: Noche de tragedia… V parte.

 

 

AVISO IMPORTANTE: Este capítulo tendrá argumentos fuertes, sádicos, dolorosos y hasta perturbadores, así que antes de leerlo… Te sugiero que lo pienses bien antes de continuar… No me hago responsable por traumas psicológicos, depresiones o pesadillas que puedan tener en las noches… Leer bajo su propio riesgo. Soldado avisado, no muere en guerra.

 

 

Declaimer: Noticia de último momento… “YU – GI – OH!, No es mío”… Mucho menos sus personajes… Son propiedad de su respectivo autor, pero toda la trama de esta historia si es creada por mí. Amo inventarles historias nuevas a mis queridos personajes, es una manera de expresar lo que siento, y tener la dicha de poderlo compartir con todos ustedes.  ^_^

 

******************************

 

Una hora más tarde…

 

Un hombre empezaba a abrir sus ojos, sentía un terrible dolor de cabeza y que todo le daba vueltas, trató de moverse pero no pudo. Fue ahí que se dio cuenta que estaba amarrado a una silla, levantó un poco su cabeza al escuchar unos sollozos...

 

         AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHH... Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… POR FAVOR KEITH YA NO SIGAS… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… DETENTE POR FAVOR… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… TE LO SUPLICO…

 

         Aaaaaahhhh, aaaaaahhhh, aaaahhhh, oh sí, no tienes idea cuanto he soñado con este momento, aaaaahhhh, aaaaahhhh, aaaaahhhh, sigues siendo la misma puta de antes, aaaahhhh, aaaaahhhh, sólo mírate nomás como te estas corriendo como la puta que eres, aaaaahhhh, aaaaahhhh, aaaaahhhh, me doy cuenta que no lo has hecho con ese imbécil, aaaaahhhh, aaaaahhhh, aaaaahhhh, me gusta sentir lo estrecho que estas mi amor, aaaaahhhh, aaaaahhhh, mmm, aaaaahhhh, siento como me lo estas apretando muy rico, aaaaahhhh, aaaaahhhh, mmm… – Las sanguinarias y salvajes embestidas seguían, el hombre le sujetaba con firmeza sus caderas y lo movía desenfrenadamente lastimándolo cada vez más. Salía y entraba con más fuerza importándole un cuerno los gritos del otro. Dejó de embestirlo por un momento al darse cuenta que el otro hombre había despertado. – Baia, baia, baia, finalmente despiertas maldito infeliz.

 

         MALDITO COBARDE, ¿CÓMO FUISTE CAPAZ DE HACERLE SEMEJANTE TRANSGRESIÓN? – No podía creer lo que estaba mirando.

 

         Ya cállate estúpido, no vez como lo está disfrutando. – Sonrió con maldad.

 

         Maldito, ¿por qué no me desatas de una vez y arreglamos esto como hombres?

 

         Tus estúpidas palabras no me afectan en lo más mínimo. – Sonreía perversamente.

 

         Deja en paz a Ryou.

 

         ¿Dejarlo en paz? No seas imbécil, jamás me separaré de él, no vez lo bien que nos la estamos pasando. – Siguió embistiéndolo con fuerza.

 

         AAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHH... Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Noooooooooooooo… Ya no por favor… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Detente Keith, por favor detente... Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Me duele mucho… – Sus manos estaban muy lastimadas debido a la presión que ejercía por liberarse, nunca se imaginó que su novio lo viera de esa manera tan vergonzosa, fue ahí que se sintió un ser despreciable e indigno para él.

 

         ¡RYOU! – Exclamó sorprendido al verlo completamente desnudo en la cama amarrado de pies y manos. – ¡SUÉLTALO MALDITO DESGRACIADO! – Exigió furioso.

 

         ¿Y qué si no lo hago?

 

         Te juro que te mataré con mis propias manos.

 

         Tus estúpidas amenazas no me asustan.

 

         Eres un maldito desgraciado.

 

         No sabes cómo me divertiré con él esta noche.

 

         NO LO TOQUES MALDITO INFELIZ.

 

El hombre lo ignoró por completo para seguir violando a su víctima…

 

         Oh si, anda ramera, quiero que acabes conmigo, aaaahhhh, aaaahhhh, aaaahhhh…

 

AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHH   AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHH

 

Ambos derramaron su semilla, el hombre lo hizo dentro del trasero de su víctima, y éste se derramaba sobre su pecho. El joven se sentía a morir, lloraba desconsoladamente, le dolía todo su cuerpo, pero lo que más le dolía era su corazón, se odiaba así mismo por permitir que Bakura lo viera de esa manera tan denigrante, se repudió así mismo por no poder detener a su agresor, sentía que sus piernas temblaban, podía sentir como su sangre bajaba por sus piernas, mientras que el hombre salía bruscamente dentro de él.

 

         Je, je, je, je, je, je, je, esto es sólo el principio mi querida puta. – Intentó besarlo pero fue rechazado. – Veo que aun te quedan fuerzas, no te preocupes dentro de poco volveré a estar contigo. – Manifestaba con sarcasmo mientras se bajaba de la cama.

 

         Maldito miserable, eres un hijo de puta, te juro que esto no te lo perdonaré.

 

         No te tengo miedo maldito imbécil, y estando en esas condiciones dudo mucho que puedas hacer algo. – Sonrió maliciosamente.

 

         Eres un…

 

         Cállate. – Lo golpeó con fuerza. – Cuando estabas inconsciente no sabes de lo que te has perdido, pero ahora que has cobrado el conocimiento te permitiré que lo veas de nuevo. Te enseñaré lo puta que es en la cama. – El hombre fue al baño por un momento.

 

         Ryou, Ryou, Ryou. – Lo llamaba el albino mayor.

 

El aludido movió un poco su cabeza para verlo.

 

         Perdóname... Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Por favor… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… – La mirada del joven ya no era la misma, su hermoso brillo había sido cubierto por la oscuridad de la tristeza, dolor y sufrimiento era lo único que se reflejaban en esos bellos ojos.

 

         Shhhh, no tengo nada que perdonarte mi amor, te prometo que te sacaré de aquí.

 

         Él nos va matar… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Estoy seguro… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

         Por favor no llores. – Trataba inútilmente de soltarse.

 

         Por mi culpa estas metido en este problema… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

         No digas eso por favor, nada de esto es tu culpa mi amor.

 

         Pero… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

         Que escena más conmovedora. – Se escuchó una voz detrás de ellos. – Los dejo solos unos segundos y ustedes ya están con sus cursilerías, me dan náuseas de sólo oírlos.

 

         MALDITO DESGRACIADO.


         El espectáculo va a comenzar de nuevo. – Sonrió con maldad. – Escúchame bien lo que te voy a decir. – Se le acercó al albino mayor para agarrarle la cara con fuerza. – Ni se te ocurra cerrar los ojos porque si lo haces le corto la garganta como a una maldita gallina.

 

         ¿Qué piensas hacer maldito? – Lo miraba intimidante y con odio al mismo tiempo.

 

         Acaso no es obvio. – Se relamió los labios con lujuria. – Te voy a enseñar lo puta que es tu noviecito en la cama, vas a vernos lo bien que nos la vamos a pasar juntos.

 

         NI SE TE OCURRA TOCARLO MALDITO DESGRACIADO. – Se movía bruscamente en la silla.

 

         Estando atado a esa silla no podrás hacer nada, así que agradece que estarás en primera fila viendo la función. Y si te portas bien tal vez me anime a compartirlo contigo, eso sí queda algo de él.

 

         TE JURO QUE TE VOY A MATAR MALDITO DESGRACIADO, Y SI LOGRAS HUIR TE PERSEGUIRÉ POR CIELO, TIERRA Y MAR HASTA ENCONTRARTE MALDITO BASTARDO. – Su mirada era la de un asesino profesional.

 

         Je, je, je, je, je, je, je, je, je, je, sí que eres estúpido, aquí nadie saldrá con vida.

 

         ¿Qué quieres decir? – No obtuvo respuesta. – TE ESTOY HABLANDO INFELIZ. – Le gritaba al ver como el hombre se dirigía a la cama, estaba por decir algo hasta que se percató de algo. – ¿Humo? – Susurró para sí mismo. – Dime qué has hecho semejante estúpido.

 

         Que acaso no lo sabes. – Lo miró burlonamente. – No le dijiste nada sobre nosotros. – Le tocó el rostro al albino menor con lujuria.

 

         NO LO TOQUES MALDITO IMBÉCIL.

 

         Contéstame pedazo de animal. – Le golpeó la cara al joven que seguía amarrado en la cama.

 

         Aaaaaaaaaaayyyyyyyyyy… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… No sé de qué estás hablando.

 

         ¿No lo sabes? – Volvió a golpearlo con fuerza.

 

         Aaaaaaaaaaaahhhhhhhhhhh… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Ya no me golpees por favor Keith... Snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

         Por lo visto has olvidado la promesa que te hice.

 

         HABLA YA SIN RODEOS ESTÚPIDO. – Demandó el albino mayor.

 

         Este hijo de puta me traicionó aun sabiendo lo que le pasaría si lo hacía.

 

         Por favor Keith, déjalo ir… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Él no tiene nada que ver en esto… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

         Si no lo hubieras metido en tu vida, entonces el no estaría aquí en estos momentos.

 

         Por favor… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

         Todo lo que le pase a él será por tu culpa, vivirás en carne propia como este maldito desgraciado muere ante tus ojos y tú no podrás hacer nada para evitarlo.

 

         Noooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Por favor… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Déjalo ir… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

         No llores Ryou, nada de lo que me haga este malnacido es culpa tuya.

 

         No dirás lo mismo una vez que el fuego llegue a tu cuerpo.

 

         ¿Qué fue lo que dijiste? – Abrió los ojos a más no poder.

 

         Mi promesa que le hice a este hijo de perra fue que si me llegaba a traicionar iba a sentir en carne propia las llamas del infierno.

 

         Eso quiere decir…

 

         El humo que está entrando a la habitación significa que dentro de poco el fuego llegará hacia nosotros y las llamas consumirán todo el departamento.

 

         ¿QUEEEEEEEEEEEEEEÉ? IMBÉCIL, TÚ TAMBIÉN MORIRÁS.

 

         Moriremos todos, pienso llevármelos al mismo infierno. – Se reía perversamente a carcajadas. – Ahora que comience la función. – El hombre se subió a la cama, comenzó a tocar de manera vulgar y lujuriosa el cuerpo del joven.

 

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Ya no por favor… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Estoy muy cansado… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Y me duele mucho… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Por favor no lo hagas… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Ya no quiero… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Ya no más por favor…

 

         Tú harás lo que yo te diga. – Le dio otro golpe en la cara. – Y si estás cansado aquí tengo el remedio para ese problema. – Expresó con sarcasmo y a la vez le enseñaba una inyección.

 

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Noooooooooooooooooooooo… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Todo menos eso… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Por favor no lo hagas… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Noooooooooooooooooo… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Ya no más por favor… – Se movía inútilmente sobre la cama, el hombre logró inyectarlo en el cuello. – Aaaaaaaaaaaaaaaaahhhhhhhhhhhhhhhhh… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

         ¿QUÉ LE INYECTASTE MALDITO DESGRACIADO? CONTÉSTAME HIJO DE PERRA, ¿QUÉ LE HAS INYECTADO A RYOU?

 

         Una droga que le permitirá gemir como lo puta que es, verás que dentro de poco hace efecto. Deberías de agradecerme porque lo oirás gritar a todo pulmón.

 

         MALDITO. – Lloraba de la impotencia que sentía por no poder ayudar al amor de su vida. – Resiste por favor Ryou.

 

         Que estúpido eres, el ya no te escucha, en estos momentos tiene una lucha constante entre su cuerpo y la droga. – Al terminar de hablar acercó su rostro al de él para besarlo y al ver que era rechazado lo volvió a amenazar. – Si no cooperas haré que tu noviecito tome tu lugar.

 

El joven lloraba desconsoladamente, volteó a ver por un segundo a su pareja y con la mirada le dio a entender que lo perdonara. Posteriormente se atrevió a besar a su captor.

 

         MALDITO HIJO DE PERRA, NO LO TOQUES, DÉJALO TRANQUILO MALDITO BASTARDO. – Comenzaba a llorar al ver la escena frente a sus ojos. A simple vista parecía como si el albino menor lo estuviera disfrutando.

 

Después de besarlo el agresor volteó a ver a la otra persona y con una sonrisa triunfal le dijo:

 

         Te das cuenta que él todavía me ama.

 

         ESO NO ES CIERTO, NO ES VERDAD. – Gritaba furioso.

 

         ¿Celoso? No me digas que estas celoso, apuesto a que él nunca se entregó a ti como lo hizo conmigo.

 

         Eres un…

 

         Oh ya veo, así que nunca lo hicieron entre ustedes. Dime, ¿te gustaría probar esta preciosura? Si me suplicas es muy probable que acceda a compartírtelo.

 

         No caeré en tu juego maldito desgraciado. – Lo miraba con odio y con ganas de matarlo.

 

         Por favor Keith… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Déjame estar con él… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Déjame besarlo por última vez… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… – Hacia lo posible por tranquilizar su cuerpo para no sentir los efectos de la droga.

 

         Baia, baia, te das cuenta que no me equivoqué en decirte lo puta que es.

 

         Ryou... – Abrió los ojos como platos.

 

         Para que veas que no soy tan malo dejaré que se despida de ti. – Sonrió con maldad. – Si intentas algo estúpido te mataré. – Le advirtió al albino menor.

 

         Ya no tengo fuerzas para hacer algo estúpido… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

El hombre se dispuso a desatarle primero los pies, luego las manos y al terminar de hacerlo rápidamente lo puso boca abajo para volverle amarrar sus manos atrás de su espalda.

 

         Ahora levántate. – Lo agarró con fuerza del brazo para sacarlo de la cama, una vez que lo sacó lo tiró con violencia a los pies del otro hombre. – Haremos esto más divertido. – Volvió a sonreír cuando una idea perversa llegó a su cabeza. – Quiero que le hagas el sexo oral, demuéstrale a este malnacido todo lo que te he enseñado.

 

         No lo hagas Ryou, por favor no lo hagas. – Lo miraba con infinita tristeza a los ojos.

 

         ¿Me tienes asco? – La mirada del joven estaba como perdida, sus pupilas estaban dilatadas y el brillo que solía tener ya no quedaba nada. – ¿No deseas hacerlo conmigo? – Su voz sonaba lujuriosa y excitada.

 

         Tú bien sabes que te deseo, y que muero por hacerte el amor, pero no aquí, no de esta manera, no bajo esta circunstancia, y no quiero que lo hagas en presencia de este malnacido hijo de perra.

 

         De todas maneras vamos a morir Bakura… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

El albino mayor se sorprendió al ver que la mirada de su novio había perdido su hermoso brillo y que ahora solamente se podía ver en ellos tristeza y mucho dolor. Pudo notar también que la droga comenzaba a surtir efecto, la respiración del joven era cada vez más agitada, sin mencionar lo mucho que sudaba.

 

         Vez como esta puta comprende mejor la situación que tú.

 

         ERES UN MALDITO.


         Agradéceme por ser generoso contigo.

 

         Por favor Keith, desátame las manos… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

         Bien, pero ya lo sabes. – Caminó hacia la mesa de noche y ahí agarró un arma. – Si intentas algo estúpido le meteré un tiro en la cabeza al imbécil de tu novio.

 

         No puede ser, esa arma…

 

         Así es maldito, esta es tu arma. Creíste que no te iba a registrar estando inconsciente.

 

         MALDITO HIJO DE PUTA.

 

         Cállate que ya me tienes arto. – Le da un golpe en la cara.

 

         Espera a que te ponga las manos encima maldito desgraciado. – Escupió sangre al hablar.

 

         No lo lastimes Keith por favor… Snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

         Bien, pero espero que puedas darme un buen espectáculo. – Se acercó al joven para soltarle las manos y por unos segundos cayó acostado de medio lado en el suelo, a duras penas se podía levantar, todo su cuerpo estaba magullado, tenía toda clase de heridas, moretones, chupetones por todas partes, mordidas, y aun tenia rastro de semen y sangre entre sus piernas. – Levántate ya inútil. – Lo agarró con fuerza del pelo.

 

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaahhhhhhhhhhhhh… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Déjame por favor... Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Me duele mucho... – Llevó sus manos arriba de su cabeza para minimizar el dolor.

 

         Apúrate inútil, quiero que le hagas el sexo oral.

 

La víctima se apoyó en las piernas de su novio, y con sus manos temblorosas empezó a bajar el zíper del pantalón.

 

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… No lo hagas Ryou… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Detente por favor…

 

El hombre veía complacido la escena frente a sus ojos, estaba satisfecho ver como dos almas inocentes eran destruidas en cuestiones de segundos. Antes de sacarle el pene logró subir un poco más apoyándose en las piernas del albino mayor y le dio un beso en los labios, el beso no tardó en convertirse en uno apasionado, las caricias y los gemidos no tardaron en salir, el joven bajó un poco más a su cuello para besarlo, posteriormente le dio un fuerte abrazo poniendo sus manos alrededor de toda la silla y a la vez hundía su rostro en la entrepierna del sometido.


Aaaaaaaaaaaaaahhhhhhhhhhhh, Ryou... – Trató de mover su espalda hacia atrás pero le fue imposible.

 

La otra persona se enfureció al ver la escena, lo que él quería era humillarlos, hacerlos sufrir, quería que se sintieran miserables pero estaba ocurriendo todo lo contrario.

 

         Estúpido. – Le dio una fuerte patada al albino menor.

 

         AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH. – Gritó de dolor cayendo al suelo a los pies del otro.

 

         Te dije que le hicieras sexo oral, no que le hicieras el amor. – Volvió a golpearlo con fuerza.

 

         Aaaaaaaaaaaahhhhhhhhhhh… Snif, snif, snif, snif, snif, snif… Ya no me golpees por favor Keith... Snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

Iba a golpearlo de nuevo pero se dio cuenta que el fuego estaba llegando a la habitación y el humo era cada vez más intenso.

 

         Ven acá maldita puta, volveré hacerte mío antes que el fuego nos alcance.

 

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Noooooooooooooooooooooo… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Por favor no lo hagas… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Noooooooooooooooooo… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Ya no más por favor… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

         DÉJALO MALDITO, DÉJALO EN PAZ. – Se movía bruscamente sobre la silla, aplicaba todas sus fuerzas para poderse liberar y aunque sus intentos eran en vano seguía luchando sin cesar.

 

El hombre lo arrojó con violencia a la cama y sin preparación alguna lo penetró de un sólo golpe…

 

         AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHH… Dueleeeeeeeeeee… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Duele mucho, sácalo por favor… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Por favor, sácalo… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Aaaaaaaaahhhhhhhhhhh… Me estas lastimando KeithSnif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… – El joven sentía que lo estaban partiendo por la mitad, ese enorme pene desgarraba sin piedad su delicado y pequeño trasero, cada embestida que recibía sentía que lo estaban matando por dentro, gruesas e infinitas lágrimas corrían por sus ojitos, y por el inmenso dolor que sentía no era capaz de poderlos abrir. Debido a las salvajes embestidas que estaba recibiendo su ano comenzaba a sangrar de nueva cuenta y ese líquido carmesí recorría las piernas del muchacho y la misma sangre humedecía el pene de su agresor…

 

         Aaaaaahhhh, aaaaaahhhh, aaaahhhh, si, así puta, muévete más rápido, aaaaahhhh, aaaaahhhh, mmm, ¿te gusta no es así? Puedo sentir que te estas poniendo muy mojado, aaaaahhhh, aaaaahhhh, aaaaahhhh, sabía que te iba a gustar mi querida putita, aaaahhhh, aaaaahhhh, tal parece que la droga está haciendo efecto en ti, aaaaahhhh, aaaaahhhh, aaaaahhhh, siento como tu esfínter se contrae apretándomela muy rico, aaaaahhhh, aaaaahhhh, aaaaahhhh… – Las sanguinarias y salvajes embestidas seguían, el hombre le sujetaba con firmeza sus caderas y lo movía desenfrenadamente lastimándolo cada vez más. Salía y entraba con más fuerza importándole un cuerno los gritos del otro. Dejó de embestirlo por un momento, llevó su mano al pene de su víctima y empezó a masturbarlo sin ningún pudor, una vez que dio inicio apoyó la otra mano en la cadera del joven para seguirlo arremetiendo salvajemente, de vez en cuando pellizcaba fuertemente la punta de su pene que también sangraba debido a que le enterraba la uña de su dedo pulgar.

 

         Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… PARAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA… Por... Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Por favor... Me... Snif, snif, snif, snif… Me duele mucho… Me... Duele Mucho… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Por... Favor… Ya… No… Basta por favor… No sigas…  AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHH... Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… Así no por favor, no me la metas tan duro por favor, me estas lastimando… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHHH... – Cada grito que el joven daba, excitaba aún más a su violador, y éste aumentó la fuerza de sus embestidas solamente para escucharlo gritar más fuerte.

 

El fuego llegó a la habitación, el humo ya era insoportable y el techo comenzaba a caer, el albino mayor lloraba desconsoladamente, se sentía frustrado al ver la escena frente a sus ojos, escuchar esos terribles gritos para él era una agonía interminable, su amado Ryou estaba siendo violado ante sus propios ojos, se maldijo así mismo por no cumplirle la promesa que le hizo de cuando le dijo que él lo iba a proteger, lo iba a cuidar y que no dejaría que nadie le hiciera daño.

 

         Perdóname Ryou… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… – Comenzaba a toser debido al humo que sentía. – Maldición, ¿por qué no puedo proteger a la persona que amo?... Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… YA DÉJALO MALDITO IMBÉCIL, POR QUÉ NO TE METES CON ALGUIEN DE TU TAMAÑO… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… RYYYYYYYYYYYYOOOOOOOOOOOOOOOOOOUUUUUUUU. – Gritó a todo pulmón, en eso se escuchó un ruido muy fuerte, el hombre se dislocó la muñeca de la mano para poderse liberar, aprovechó el momento para desatarse los pies y levantándose rápidamente de la silla agarró al hombre por atrás para tirarlo al suelo.

 

         ¿QUÉ TE PASA MALDITO DESGRACIADO? – Gritó furioso el secuestrador.

 

         Te dije que me las ibas a pagar. – Le dio un puñetazo en la cara.

 

         Hijo de puta, ¿cómo lograste liberarte? – Se levantaba del suelo.

 

         Maldito cretino, te prometí que te mataría con mis propias manos. – Le da otro golpe en la cara.

 

         Aaaaaaaaaaaahhhhh, no dejaré que arruines mi diversión maldito bastardo.

 

Ambos hombres se agredían a golpes, el humo era cada vez más intenso y las llamas del fuego provocaban que los escombros del techo cayeran simultáneamente al suelo.

 

         SUÉLTAME HIJO DE PUTA.

 

         Nunca te perdonaré todo el daño que le has hecho a Ryou.

 

         Imbécil. – Le dio una fuerte patada en su costado.

 

         Aaaaaaaaaaaaahhhhhhhh. – Cayó de rodillas al suelo.

 

         Ahora verás maldito estúpido, te enseñaré que nadie se mete conmigo. – Aprovechó la ocasión que estaba tirado en el suelo y ahí comenzó a patearlo y a golpearlo brutalmente. – ¿Qué se siente ahora estando en el suelo semejante cerote? – Le da una patada en la cara.

 

         Maldito. – Escupió sangre al hablar.

 

         Más te vale que te quedes en el suelo pedazo de animal en lo que yo seguiré disfrutando de mi presa. – Le dio unas cuantas patadas más y luego caminó en dirección hacia la cama.

 

         NO TE ATREVAS A TOCARLO. – Se levantó como pudo y corrió para tirársele encima, ambos forcejeaban y se agredían a golpes hasta que después de un rato se escuchó un sonido de cuando un hueso se quiebra. Uno de los hombres cayó inmediatamente al suelo, mientras que el otro veía caer con satisfacción a la otra persona. – Te lo tenías bien merecido maldito imbécil. – La mirada que poseía en ese momento daba miedo, cualquiera que lo viera se quedaría helado con esa expresión en el rostro que reflejaba la de un asesino en serie. El ruido del techo cayéndose lo hizo reaccionar. – Ryou. – Se acercó rápidamente a la cama. – Ryou. – Le tocó suavemente la cara y a la vez se aseguraba de que estuviera con vida. – Ryou, despierta por favor.

 

         Ba… Kura… – Habló débilmente.

 

         Resiste por favor, te sacaré de aquí. – Miraba a su alrededor y parecía que todo estaba perdido, caminó en dirección hacia la puerta de la habitación y al abrirla de una patada salió una gran llamarada de fuego. – Maldición… Cof, cof, cof. – Tose un poco debido a la gran cantidad de humo que había en todo el lugar. – Debo sacarlo de aquí cuanto antes. – Se le volvió a acercar al joven. – Ryou, necesito sacarte de aquí. – Intentó tocarlo pero se sorprendió al ver que era rechazado.

 

         No me toques por favor… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

         Ryou, soy yo, soy Bakura. – Se preocupó al ver como su cuerpo temblaba, el joven estaba en muy malas condiciones. – ¿Qué voy hacer? – Comenzaba a toser cada vez más fuerte.

 

******************************

 

Afuera del edificio había un gran alboroto, todas las personas se encontraban en la calle al ver el incendio, los bomberos ya se hallaban en el lugar tratando de controlar el fuego, los policías acordonaban todo el lugar para que la gente no se acercara mucho, sin mencionar que habían ambulancias para auxiliar a las personas que salían del edificio o que los bomberos sacaban para ser atendidos por los paramédicos. Y entre la multitud también habían llegado una pareja.

 

         Ryou no ha salido, ni tampoco Joey.  

 

         Espérame aquí mi amor, veré si puedo averiguar algo de lo que está pasando.

 

         Déjame ir contigo por favor Marik.

 

         Está bien, vamos.

 

Caminaban entre tanta gente hasta llegar al jefe de los bomberos.

 

         Disculpe.

 

         No deberían de estar aquí.

 

         Díganos por favor si han logrado sacar a un joven embarazado y a otro joven de cabello albino.

 

         ¿Cómo ha dicho? ¿Hay un hombre embarazado?

 

         Si, ellos vivían en el tercer piso.

 

         Según el reporte que tengo hasta el momento no tengo a ningún hombre embarazado.

 

         No puede ser, eso quiere decir que siguen adentro.

 

         Cálmate por favor Malik.

 

         Debemos ir a buscarlo.

 

         Tranquilízate por favor, estoy seguro que los bomberos hacen lo que pueden.


         Pero… – Sus ojos comenzaban a humedecerse. – Hay que avisarle a Mokuba inmediatamente.

 

         Si tienes razón. – Sacó su celular para poder hacer la llamada, después de varios intentos fallidos se dirigió a su esposo. – No contesta amor.

 

         ¿Qué? ¿Estás seguro?

 

         Si.

 

         Déjame intentar a mí.

 

         De acuerdo.

 

         Qué raro, me tira a buzón de voz, lo mismo me pasa con el de Noah.

 

         Ante esta situación lo mejor será llamarle a Seto.

 

         Hazlo.

 

Volvía a marcar una y otra vez y sin ningún resultado.

 

         Aquí está pasando algo muy extraño.

 

         ¿Por qué lo dices amor?

 

         Seto no me contesta.

 

         No puede ser, ¿les habrá pasado algo?

 

         No te angusties amor, acuérdate que a estas alturas Seto ya debería de estar abordando el avión.

 

         Es verdad, se me había olvidado, aun así tenemos que buscar la manera de podernos comunicar con él.

 

En lo que conversaban se armó un gran alboroto, las personas corrían de un lado a otro mientras que gritaban.

 

         ¡ALGUIEN ESTÁ SALIENDO ENTRE LAS LLAMAS!

 

         ¡Marik, mira!

 

         ¡Pero si es Bakura!

 

Los dos hombres corrieron hacia donde se encontraba el albino mayor, pero al llegar a la zona acordonada no los dejaban pasar.

 

         Por favor señor oficial déjenos pasar.

 

         Si señor oficial, es una de las personas que andábamos buscando.

 

         ¿Ustedes son familiares?

 

         Si. – Contestaron al unísono.

 

         Está bien, pueden pasar.

 

         Ven amor.

 

         Si.

 

Corrieron rápidamente hacia el lugar, y al llegar se quedaron boquiabiertos al mirarlo todo golpeado y mal herido, pero lo que más les impactó fue ver que traía a alguien en sus brazos envuelto en una sábana.

 

         Bakura. – Estaba por acercársele, sin embargo fue detenido por su esposo. – ¿Por qué me detienes Marik?

 

         Creo que no es el momento de preguntar. – La otra persona volvió a ver hacia donde estaba el albino mayor para ver lo que sucedía.

 

Los paramédicos estaban atendiendo al joven, y a la vez se escuchaban comentarios desgarradores sobre la condición en la que se encontraba.

 

         Pobre muchacho.

 

         Su condición es muy delicada.

 

         Tal parece que no sobrevivirá.

 

         Hay que estabilizarlo pronto.

 

         Díganme si él está bien, por favor que alguien me diga si Ryou esta con vida. – Preguntaba el albino mayor, en eso otro paramédico se le acercó para decirle:

 

         Señor, usted también debería ser atendido por un paramédico.

 

         NO ME TOQUE, SOLAMENTE QUIERO SABER SI ÉL ESTÁ CON VIDA. – Expresó molesto.

 

         Bakura. – Lo llamó otra persona.

 

         Marik. – En cuanto lo vio se puso a llorar.

 

         ¿Bakura, qué ocurrió? – Se atrevió a preguntar uno de los presentes.

 

         Ese maldito… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

         Bakura, ¿dónde está Joey?

 

         No lo sé… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif…

 

Estaban a punto de decir algo hasta que oyeron una terrible noticia.

 

         NO ESTÁ RESPIRANDO, ESTE JOVEN NO RESPIRA. – Gritaba uno de los paramédicos que lo atendía.

 

         NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO, RYYYYYYYYYYYYYYYYYYYYYYOOOOOOOOOOOUUUUUUUUUUUUUUU… Snif, snif, snif, snif, snif, snif, snif… – No pudo más y cayó de rodillas al suelo.

 

 

Continuará…




N/A: ¿Ryou se morirá? ¿Los señores Ishtar descubrirán la verdad de lo que pasó? ¿Correrá con la misma suerte el cachorro? ¿Podrá su neko llegar a tiempo para rescatarlo? ¿Quieren que los bebés se salven? Ups, olviden esa última pregunta, todo esto y más lo iremos descubriendo en los últimos capítulos, no deben perderse la continuación de esta interesante historia. Muchas gracias por leer, pos sus sugerencias, y todo el apoyo que me brindan. Déjenme sus comentarios que yo con mucho gusto les responderé.

 

Me despido cariñosamente de todos y cada uno de ustedes, les pido de favor que no salgan de casas al menos que sea estrictamente necesario, si salen usen siempre la mascarilla, lleven consigo su botecito de alcohol gel y saniticesen antes de entrar a sus hogares. Ahora sí, me voy no sin antes mandarles muchos besos virtuales y un fuerte abrazo desde la distancia.

 

Atte.:

 

             KAT.

 

 


P.D.: Jenifer CarriGalin, tal parece que esta vez sí acertaste con la muerte de Keith, a ver si vuelves a acertar en el siguiente capítulo… XD


No hay comentarios:

Publicar un comentario