Capítulo 23: Decisiones… Una visita
inesperada…
Notas
del capítulo: Para las personas que han leído esta historia,
sabrán que este capítulo fue el último
que subí a la página de AY. Y finalmente pude llegar hasta aquí en mi blog
gracias a ustedes…
Quiero agradecer a todos mis lectores y lectoras que
me han seguido desde mis inicios… Gracias por todos sus reviews que me
dejaron en la página AY, espero poder seguir recibiendo más de sus comentarios
aquí en mi blog. También les comenté que cada vez que vaya actualizando un fic,
al final de cada capítulo, pondré el nombre de todas las personas que me hayan
dejado sus reviews en la página AY… Incluyendo los nombres del fic que por
accidente se repitió. Haré lo mismo con aquellas personas que dejen sus
comentarios en mi blog, recuerden que ustedes mandan y yo estoy para
obedecerlos.
Bueno, ya no los aburro más, así que a continuar con
esta historia… De antemano les agradezco mucho por su paciencia…
Notas del fanfic: Hay veces en la vida que debemos tomar decisiones,
y cuando se llega ese momento, nos damos cuenta que no es tan fácil hacerlo,
pensamos muy bien las cosas antes de llevar a cabo nuestro plan… Pero ese no es
el único obstáculo, porque cuando nos decidimos a actuar, creemos que tal vez
podría ser demasiado tarde, o que simplemente no tendría caso encontrar una
solución… ¿Qué decisión se puede tomar para recuperar a una persona que tanto
hemos lastimado? ¿Cómo podríamos hacer para hallar el valor necesario al
sentirnos rechazados? ¿Qué otras alternativas podemos tener para no darnos por
vencidos?... Son muchos los factores que nos impiden en seguir avanzando y ser
firmes en las decisiones que tomamos…
Declaimer:
YU – GI – OH!, “No es mío”… Mucho menos sus
personajes… Son propiedad de su respectivo autor, solamente hago este fic,
porque me encanta escribir, y que ustedes se diviertan de mis locuras… Es mi
manera de expresar lo que siento, y tener la dicha de poderlo compartir con
todos mis lectores…
******************************
A la mañana siguiente…
Hola,
buenos días hijo… ¿Sucede algo? Dime ¿Qué buscas? – Preguntó la persona que
acababa de llegar, se veía algo preocupado.
Nada,
lo olvidé. – Respondió con tristeza.
Ven,
será mejor que te acuestes en la cama. – Lo ayudaba a ponerse de pie ya que el
joven se encontraba agachado en el suelo mirando debajo de la mesita de noche
como si realmente buscara algo.
Una
vez que lo acostó, el joven se atrevió a decir:
Padre…
– Fue casi un susurro, pero el aludido logró escuchar.
Si,
dime ¿Qué sucede? – Manifestó cariñosamente.
Padre,
yo… No quiero ir a la escuela, por favor no me obligues a ir. – Unas finas
lágrimas salían de sus ojitos, y su voz daba a demostrar que estaba muy nervioso.
Ssssshhhhhhh…
Tranquilo mi pequeño, hoy tampoco irás a la escuela, porque no mejor tratas de
descansar y yo te iré a preparar el desayuno. ¿De acuerdo?
El
hombre trató de acercársele a su hijo, pero éste lo rechazó y simplemente
contestó con un asentimiento de cabeza… Al salir la otra persona de la
habitación, no pudo contener por más tiempo sus lágrimas, ver de esa manera a
su hijo tan devastado, desdichado, tan miserable, tan ajeno a la realidad en
verdad que todo eso le partía el corazón…
******************************
Hasta
que finalmente decidiste aparecer en la Universidad. – Expresaba irónicamente.
Lamento
mucho no haber podido asistir ayer, la verdad es que tuve mucho trabajo.
Bueno,
lo importante es que ya estás aquí, y como me debes una… – Medio sonrió. – Me
tendrás que ayudar con todos los preparativos que hay que hacer para la feria
de ciencias que habrá aquí.
Por
ti mi amigo Bakura, haré todo lo que tú quieras. – Bromeaba con su amigo.
Por
lo visto, ya has vuelto a hacer el mismo idiota de antes. – Hablaba algo
molesto.
Y
todo gracias a ti… Gracias a ti soy feliz de nuevo. – Hacía un esfuerzo por no
enojarse.
Recuerda
que más adelante me tendrás que contar ¿cómo te fue?
Después
del primer bloque de clases, te contaré todo. – Sonreía de oreja a oreja,
mientras que su amigo lo miraba de forma muy extraña.
******************************
En algún lugar de Ciudad Domino…
Mi
hermano me ha tenido muy preocupado estos últimos días.
¿Y
eso? ¿Cómo, por qué?
Se
lo pasó encerrado todo el fin de semana, por más que le rogué para que me
abriera la puerta de su cuarto, él nunca la abrió.
Mmmm…
¿Crees que esté enfermo?
No
lo sé Noah, y ya no sé qué más puedo hacer por mi hermano.
Moki,
tranquilízate, juntos pensaremos en algo para ayudar a tu hermano.
Muchas
gracias Noah, gracias por estar conmigo cuando más te necesito.
Y
como no voy a estarlo, si soy tu amigo. – Le da una suave palmada en su hombro.
******************************
Estoy
muy contenta porque finalmente las clases van a finalizar…
Es
una lástima que Joey no se podrá graduar este año con nosotros.
¡Ja!
Creo que esta vez ni Yami lo podrá ayudar para que apruebe el año.
No
deberías de hablar así de él, Tea.
Por
lo visto, insistes en defenderlo Ryou.
Pues
claro, él no me ha hecho nada y creo que tampoco a ustedes.
Chicos,
no vayan a empezar a discutir ¿de acuerdo? – Decía algo fastidiado.
Por
supuesto que no Tristán, no discutiré por algo tan insignificante como eso. –
Expresaba la oji azul de forma presumida.
El
joven albino simplemente se limitaba en quedarse callado, trataba de
comprenderla del porque se expresaba así de su amigo.
Cambiando
de tema chicos… Ya pensaron ¿Qué harán en estas vacaciones?
En
eso el timbre de la escuela sonó, anunciando que las clases iban a comenzar.
¡Rayos!
– Expresó un joven de ojos marrones.
Ni
modo, hablaremos después en el primer recreo.
Claro
Yūgi. – Manifestaron todos al unísono.
******************************
Bufete del Licenciado Ishtar…
Cierto
hombre, piel oscura, cabello color arena y ojos color violeta algo oscuro, se
encontraba dando vueltas en el mismo lugar en su oficina… Pensaba una y otra
vez en la llamada que tuvo el fin de semana…
FLASH BACK
¡Moshi,
moshi!
¡Hola,
Marik! ¿Cómo estás?
¿Aime?
¿Aime Navarrete?
Por
supuesto que soy yo.
¡Qué
sorpresa! ¿A qué Santo le debo este milagro? – Preguntó sarcásticamente.
Ja,
ja, ja… No te digo nada, solamente porque quiero pedirte un favor.
¿Un
favor?
Si.
A
ver dime, ¿de qué se trata?
Verás,
tengo un amigo que necesita trabajar, y la verdad es que le urge hacerlo.
Mmmm…
Y puedo preguntar ¿Quién es esa persona?
Se
escuchó un fuerte suspiro del otro lado del teléfono, después del silencio la
mujer respondió:
No
te voy a mentir, se trata del Señor Wheeler…
Aime,
no me lo tomes a mal pero… Ese hombre me cae gordo.
MARIK
ISHTAR, ¿CÓMO PUEDES HABLAR DE ESA MANERA? ESE HOMBRE NECESITA SACAR ADELANTE A
SU HIJO, NO TIENES IDEA LO MUCHO QUE SE ESFUERZA DÍA A DÍA POR CAMBIAR SU VIDA,
POR LLEVARSE BIEN Y ESTAR TODO EL DÍA AL LADO DE SU PRIMOGÉNITO… YO MISMA HE
VISTO COMO ESE HOMBRE HACE HASTA LO IMPOSIBLE POR NO DEJAR SOLO A SU PEQUEÑO,
POR ESA RAZÓN SE LE HA HECHO BIEN DIFÍCIL ENCONTRAR UN TRABAJO AUNQUE SEA DE
MEDIO TIEMPO… ¿Y TÚ? QUE TIENES LA POSIBILIDAD DE AYUDARLO, ¿ME ESTÁS DICIENDO
QUE NO LO HARÁS PORQUE SIMPLE Y SENCILLAMENTE TE CAE MAL? – Todo se lo había
dicho a gritos.
¡Cálmate!
¿Quieres?... Es verdad que me cae mal, pero en ningún momento he dicho que no
lo ayudaré. – Medio sonrió.
Eso
quiere decir…
Voy
a confiar en todo lo que me has dicho… Veré que puedo hacer, pero no te prometo
nada.
Marik,
muchas gracias, te aseguro que no te arrepentirás.
FIN DEL FLASHBACK
Sólo
espero y tengas razón Aime. – Susurró para sí mismo.
******************************
Casa
de la Familia Wheeler…
Hola,
buenos días.
Buenos
días señorita Aime, pase por favor.
Gracias…
¿Le sucede algo? Lo noto un poco angustiado.
Se
acuerda sobre lo que le conté, que mi hijo se despierta y empieza a buscar algo
entre sus cosas.
Sí,
si lo recuerdo… ¿Por qué?
No
hace mucho subí a su habitación y lo volví a encontrar haciendo lo mismo, pero
cada vez que le pregunto, el me da la misma respuesta.
¿Y
usted piensa que podría estar buscando su diario?
Pues…
¿Qué otra cosa buscaría?
Mmmm…
Puedo hacerle una pregunta.
Claro.
¿Está
seguro que no ha tocado nada más de su cuarto?
Estoy
completamente seguro.
De
acuerdo, le creo… Déjeme ver que puedo averiguar, si logro saber algo se lo
diré inmediatamente.
Por
favor, hágalo.
Está
bien… Ahora si no le importa, subiré a su habitación.
Yo
mientras tanto, terminaré de preparar el desayuno… ¿Desea usted algo?
Una
taza de café si no le molesta. – Medio le sonrió con sinceridad.
******************************
Escuela Pública de Ciudad Domino…
Que
clases más aburridas, ya estaba desesperado para que tocaran el timbre y salir
a recreo.
Ja,
ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja… Hay Tristán, tú nunca cambiarás. –
Bromeaba el albino.
Oye
Tea, ¿Por qué de pronto te has quedado callada? – Preguntaba un tanto
preocupado el tricolor.
No
me hagas caso Yūgi, solamente pensaba en algo que se me vino a la cabeza.
¿Y
ahora? ¿En qué locuras estás pensado Tea?
No
es ninguna locura Tristán… Es que recordé algo y pues… No hallaba la manera de
preguntárselos.
¿Preguntar
qué? – Indagó con curiosidad el albino.
Ryou,
¿te acuerdas cuando Joey estaba en el hospital y que todos habíamos decidido ir
a verlo para ver cómo seguía?
¿Aja?
¿Qué con eso?
No
recuerdas lo que nos dijiste… Ese día, tu novio llegó a traerte a la escuela y
él te dijo que aún no le permitían las visitas y que únicamente dos o tres
personas podían verlo.
Vamos
Tea, eso pasó hace meses, ¿Qué ganas con recordarlo ahora?
Cállate
Tristán… Solamente me preguntaba… ¿Quién era la tercera persona? Sé que una de
ellas era su padre y la otra… – Se quedó callada por un segundo, mientras
volteaba a ver a su amigo.
Está
bien Tea, dilo sin problemas, sé que la otra persona era Yami.
Lo
siento Yūgi. – Respondió cabizbajo. – El caso es que no se les hace raro ¿Quién
pudo haber sido la otra persona? Digo, ¿Por qué tanto misterio?
En
lo personal, a mí no me interesa quienes podían visitarlo y quiénes no.
Hay
Tristán, eres un caso perdido. – Expresó la castaña algo molesta. – Tu qué
opinas Yūgi.
No
lo sé.
¡Oh
vamos, chicos! ¿Acaso no tienen curiosidad por descubrir este misterio?
Todos
se quedaron callados por un momento, pensando en todo lo que su amiga había
dicho.
Si
tanta es tu curiosidad por saberlo, le puedo preguntar a Yami, a lo mejor él
sepa algo.
¿De
verdad Yūgi? – Sus ojitos se pusieron vidriosos de la emoción. – ¿Harías eso
por mí?
Claro
que si Tea.
Hay
Yūgi, gracias.
*****************************
Universidad
de Ciudad Domino…
¡¡¡ESTÁS
LOCO!!! TE DIJE CLARAMENTE QUE HABLARAS CON ÉL… EN NINGÚN MOMENTO TE DIJE QUE
TE FUERAS A REVOLCAR CON EL ENANO ESE.
Si
quieres te doy un micrófono, para que toda la universidad se entere… No me
imaginé que tuvieras un vocabulario de lo más vulgar. – Decía muy enojado.
La
otra persona dio un fuerte suspiro, para luego expresar:
Discúlpame,
Atemu. – Hablaba sarcásticamente. – Te dije claramente que hablaras con él… En
ningún momento te dije que fueras a tener relaciones sexuales con ese enano.
Ahora
era el faraón quien estaba molesto con su amigo…
Mejor
no te hubiera dicho nada.
De
acuerdo, de acuerdo, vamos a calmarnos un poco… De todas maneras lo hecho,
hecho está… ¿Y ahora? ¿Qué harás?
¿A
qué te refieres?
Tú
sabes muy bien a que me refiero.
Si
crees que me arrepiento de lo sucedido, de una vez te digo que no me arrepiento
de nada… Amo a Yūgi, y con lo qué pasó entre nosotros, no me queda ninguna duda
de que él también me ama.
Yami,
espero y sepas lo que estás haciendo. Tú, mejor que nadie sabe, que cuando una
pareja lo hacen por primera vez, es algo que nunca se olvida, es un recuerdo que
siempre lo llevarás en tu vida, y no solamente eso, sino que además ese momento
tan especial queda grabado en tu corazón.
Eso
lo sé muy bien amigo Bakura, agradezco mucho tus consejos.
Idiota,
y como no te voy a aconsejar si tu pierdes la cabeza cada vez que estas con ese
enano.
Él
no es ningún enano. – Fingió estar disgustado.
A
todo esto… ¿Has podido hablar con el Mr. Ice?
Ja,
ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja… Es gracioso el apodo que le pusiste, pero,
no sé nada de él, ayer que me presente en la empresa me dijeron que él no había
llegado en todo el fin de semana.
¿Le
habrá pasado algo?
Espero
que no, porque ni su celular contesta.
Bueno,
ya no te preocupes, tarde o temprano tendrá que aparecer.
Si,
tienes razón.
******************************
Hola,
buenos días.
-------------- --------------- ----------------
¿Puedo
pasar?
-------------- --------------- ----------------
La
mujer al ver que no obtuvo respuesta, decidió entrar a la habitación.
¿Me
recuerdas?
-------------- --------------- ----------------
¿No
te gustaría salir a tomar un poco de aire fresco?
-------------- --------------- ----------------
Anda,
ven conmigo, hace un bonito día allá afuera. – Conversaba una mujer, tratando
de encontrar la manera de dialogar con el joven que tenía enfrente. – Todavía
sigues molesto, ¿por lo que ocurrió la semana pasada?
El
joven medio movió su cabeza en forma de un sí.
De
acuerdo. – Se dijo a sí misma. – Te prometo que ya no te haré más preguntas por
el momento… ¿Mejor dime sobre qué te gustaría hablar?
¿Don…
Dond… Dónde está mi padre? – Su voz daba a conocer que estaba algo nervioso.
Él
se encuentra abajo, te está preparando un rico desayuno. ¿Comerás, cierto?
La
otra persona se quedó callada.
Joey,
debes comer algo, no puedes seguir así… ¿No me digas que quieres regresar al
hospital?
En
cuanto terminó de hablar la mujer, el joven comenzaba a temblar, su cuerpo
sudaba, sus pupilas se dilataban, cada vez se le hacía más difícil el poder
respirar, y sin poder evitarlo, gruesas lágrimas salían de esos ojos mieles que
no reflejaban vida alguna.
No…
Por… Por favor, no quiero volver ahí, no quiero, no quiero. – Se abrazaba
fuertemente así mismo, haciéndose bolita, mientras que lloraba desconsoladamente.
No
fue hasta entonces que la otra persona se percató del gran error que había
cometido al hablarle de esa manera.
No
llores Joey, perdóname por favor… “Fui una tonta al decirte eso”. – Esto último
lo pensó para sí misma.
No…
Por… Por favor, no quiero volver ahí, no quiero, no quiero. – Repetía una y
otra vez, mientras se mecía el solo abrazándose a sí mismo.
Joey,
escúchame por favor… Tranquilízate, nadie te llevará a ese lugar, te lo
prometo.
Trataba
de calmarlo para poder empezar la sesión con él.
******************************
Estaban
conversando muy amenamente, todavía tenían algo de tiempo para terminar de
desayunar y ponerse de acuerdo para llevar a cabo los preparativos de la feria
de Ciencias, en ese momento se les une otra persona.
¡Cielos!
Sí que eres difícil de localizar, he recorrido toda la universidad de arriba
abajo.
Esto
era justo lo que me faltaba, que vinieras tú, a amargarme el desayuno.
¡Oh
vamos! No te enfades, no tiene nada de malo que quiera estar contigo.
Y
yo te he dicho hasta el cansancio que no te me acerques, así que lárgate…
Aunque pensándolo bien… El que se va soy yo. – En cuanto terminó de hablar, se
levantó de la banca donde se encontraba sentado, volteó a ver a su amigo para
decirle… – Nos vemos más tarde Yami.
Ambos
jóvenes miraban como se iba el albino, uno quedó triste y el otro enojado.
Alister,
¿verdad?
¡Eh!
Porque
no mejor te sientas un ratito para que podamos platicar.
Lo
siento, pero debo ir a buscarlo.
Insisto,
en que te sientes. – Su voz se escuchó muy seria e intimidante al mismo tiempo.
El
otro joven no tuvo más opción que sentarse, ya que en cuanto lo miró a los ojos
sintió un fuerte escalofrío recorrerle por todo su cuerpo.
******************************
Escuela Pública de Ciudad Domino…
Un
hombre de estatura alta, pelo castaño, ojos azules, caminaba con pasos firmes
por unos de los pasillos de la escuela… Al lugar donde se dirigía, se tenía que
sacar una cita con anticipación para que esa persona pudiera recibirlo… Pero él
no era cualquier persona, él era un hombre sumamente importante, un hombre que
no necesitaba anunciarse para que lo recibieran, él simplemente podía entrar en
cualquier lugar y a cualquier hora y todos lo recibían sin ningún problema. Y
con eso en mente, finalmente pudo llegar a su destino.
Oiga
señor, usted no puede entrar de esa manera, necesita sacar una cita antes de… –
La mujer no terminó de hablar ya que vio como el hombre la fulminó con la
mirada. Y sin decir ni una sola palabra, entró a dicha oficina.
Tal
parece que usted no conoce de protocolos ¿verdad? – Habló con ironía.
¡Ja!
Usted sabe que esas cosas no van conmigo.
Y
supongo que ha venido para decirme algo importante, sino, no se hubiera tomado
la molestia de venir hacia acá sin avisar.
Es
usted muy inteligente Señor Pegasus.
Ambos
hombres se miraban de manera intimidante.
Por
favor siéntese, póngase cómodo… ¿Desea beber un poco de vino?
No
gracias.
De
acuerdo, entonces dígame… ¿A qué debo el honor de su visita, Kaiba?
He
venido para preguntarle cómo van las investigaciones del caso.
Mmmm…
Me sorprende que usted quiera saberlo.
Tengo
mis razones.
Mi
querido Kaiba, las autoridades hacen lo que pueden, y por lo visto les tomará
tiempo en encontrar el culpable.
No
me venga con esas tonterías Pegasus, sé muy bien que tú no te quedarías de
brazos cruzados.
Y…
¿Cómo puedes estar tan seguro?
Porque
tu fundaste esta escuela Pegasus, y conociéndote muy bien, tú eres capaz de
defender lo que tú mismo creaste y de destruir a cualquiera que se atreva a
arruinar todo lo que has logrado… En cierta manera tú y yo nos parecemos.
Pueda
que tengas razón, pero eso es algo que solamente a mí me concierne.
******************************
Francamente
no entiendo porque insistes tanto en querer andar con él.
¿Disculpa?
No
te hagas el inocente conmigo, Bakura me ha contado todo.
¡Ja!
Pues yo no tengo que darle explicaciones a alguien como usted… Porque no mejor
se mete en sus asuntos y deja en paz los míos.
Escucha
Alister, esto que te voy a decir espero y un día me lo agradezcas.
No
necesito de tus estúpidos consejos.
Eres
un idiota, ¿lo sabías?
¿Qué?
¿Cómo me dijiste?
El
faraón suspiró profundamente para calmarse, ya que se había percatado de que
hablar con ese joven era un verdadero dolor de cabeza.
Alister,
tu no conoces a Bakura, créeme lo que te digo… Yo que tú lo dejara en paz…
Hasta el momento Bakura te ha sabido soportar, gracias al cariño de su novio.
¿Por
qué todo el mundo está en mi contra?… ¿Es que acaso mis sentimientos no
cuentan?
Yo
no quise decir eso… Escúchame por favor… Bakura es una persona déspota, cruel,
malvado, aún no has conocido su verdadero lado oscuro. Si tú lo llegaras a
sacar de sus casillas, él no te va tener piedad para acabar contigo.
Pues
no le tengo miedo… Y le voy a demostrar a su noviecito que yo soy mucho mejor
que él.
El
joven al decir eso último salió corriendo del lugar…
ALISTER,
ESPERA. – Gritó el faraón en vano.
******************************
La
jornada de la mañana había pasado muy rápido, todos los alumnos salían para sus
respectivas casas, uno de ellos mientras se dirigía a su hogar le dijo a su
hermano:
¿Me
puedes prestar tu celular Marik, por favor?
¿Por
qué estás tan impaciente? ¿No puedes esperar a que lleguemos a la mansión?
No…
Anda, préstamelo por fa. – Trataba de convencerlo con la mirada.
De
acuerdo, de acuerdo, tú ganas… Ten, aquí tienes.
Gracias
hermano.
Tu
siempre te sales con la tuya Ryou, bien sabes que detesto cuando me pones esa
cara. – Fingía estar molesto.
Mientras
que la otra persona reía al ver la cara de su hermano y al mismo tiempo marcaba
un número.
Hola
amor, soy yo, Ryou.
Hola
mi vida, ¿Por qué me llamas de este número?
Olvidé
mi celular en casa, y le dije a mi hermano que me prestara el de él.
¡Oh!
Entiendo… Y dime para que soy bueno mi niño.
Pues…
Yo… Este… – Siempre que hablaba con su novio, se ponía algo nervioso. – Quiero
preguntarte si hoy vendrás a visitarme, es que como ayer no te vi…
Discúlpame
amor, creo que hoy tampoco te podré visitar.
Cuando
el albino menor escuchó esas palabras, instantáneamente su carita cambió a una
de tristeza.
Ryou,
Ryou, ¿Sigues ahí?
El
niño salió de sus pensamientos, para luego contestar:
Si
amor… Bueno, supongo que tienes mucho trabajo en la universidad. – Trataba de
que su voz se le escuchara normal.
Así
es amor, tengo que quedarme a trabajar y no sé a qué horas terminaremos.
No
te preocupes Baki, entiendo muy bien que tienes mucho trabajo.
Gracias
por entenderlo amor… Bueno, ya debo de colgar mi niño.
Si,
está bien.
Te
amo Ryou.
Yo
también te amo. – Respondió con nostalgia para luego colgar.
El
hombre que iba conduciendo, había escuchado parte de la conversación y no le
agradó en absoluto que su hermanito se pusiera triste, así que para animarlo le
dijo:
Conozco
un buen lugar, en donde lo podemos pasar muy bien tú y yo juntos… ¿Qué me dices
Ryou? ¿Te gustaría ir?
Her…
Hermano. – Su voz se escuchó entre cortada.
Ánimo
Ryou, estoy seguro que el joven Pegasus no le gustaría verte triste. – Le
sonreía para alegrarlo un poco.
Sí,
creo que tienes razón hermano. – Medio sonrió. – Gracias Marik, gracias por
animarme.
Por
ti mi niño, haría lo que fuera.
Eso
ya lo sé.
Bueno,
pues entonces vayamos a almorzar a ese lugar del que te hablo.
Siiiiiiiiiiii,
vamos.
Pero
antes, le avisaré a Ishizu que llegaremos tarde para que no se preocupe.
Tienes
razón hermano, es mejor avisarle.
******************************
Casa
de la Familia Mutō…
Hola abuelito, ya llegué.
Hola Yūgi, ven, estoy en la cocina.
Abuelito, espero que no te importe…
Invité a unos amigos a almorzar.
Tranquilo mi pequeño, bien sabes que
tus amigos son bien recibidos en esta casa.
Muchas gracias abuelito. ¿Quieres
que te ayude en la cocina?
No gracias, mejor ve con tus amigos,
yo les avisaré cuando esté el almuerzo.
Muchas gracias, abuelito.
El joven se retiró, para ir a la
sala en donde sus amigos lo estaban esperando.
¿Qué te dijo tu abuelo?
Dijo que él nos va avisar cuando la
comida esté lista.
Eso es genial, entonces vamos a tu
cuarto Yūgi.
Si, vamos.
Una vez en la habitación…
He estado pensando, que tal vez
deberíamos de ir a visitar a Joey a su casa.
No me lo tomes a mal Tris, pero no
le veo el caso que lo vayamos a ver.
¿Por qué lo dices Tea?
Porque no creo que su padre nos permita
verlo. Además, ese hombre es muy enojado.
¿Y si le decimos que somos amigos de
su hijo? Nada perdemos con intentarlo.
Yo creo que Tristán tiene razón Tea…
Lo que Ryou nos dijo me dejó mucho en que pensar.
Pues a mi parecer, no le veo el caso
que vayamos a visitarlo. Pero si ustedes insisten…
Sería genial que fuéramos todos
nosotros.
Bueno ya, está bien iremos todos…
Ahora, cambiando de tema… Yūgi,
¿Por qué no le hablas a Yami? Pregúntale sobre quiénes visitaban a Joey en el
hospital.
A mí, hasta ya se me había olvidado.
– Medio sonrió el castaño.
Hay Tristán, a veces pienso que
tienes mente de pollo.
El joven de ojos marrones miraba muy
molesto a su amiga.
Basta chicos, no vayan a pelear,
llevemos la fiesta en paz. – Trataba de calmar las cosas.
Sí, creo que tienes razón… Entones…
¿Le llamarás?
De acuerdo Tea, le llamaré.
Gracias. – Decía muy contenta.
******************************
Le agradezco mucho, que se haya
quedado con él, toda la mañana.
No se preocupe, para mí fue todo un
placer.
Hay algo que he querido preguntarle.
¿A ver de qué se trata?
¿Ha notado algún cambio en mi hijo?…
¿Ha habido alguna mejoría?
Señor Wheeler, estas cosas llevan
tiempo, es muy pronto para decirle si él va mejorando o no.
Pero es que… Odio verlo así, odio
que él me rechace, odio que él no quiera hablarme, odio toda esta situación… Sé
que no es su culpa, también sé que yo mismo tengo la culpa por no prestarle la
atención que se merecía… Si tan sólo yo hubiera tenido más comunicación con él,
quizás nada de esto sucedería… No soy más que un maldito miserable… A veces
pienso que esto es un castigo que la vida me está dando por haber sido un
monstruo con mi propio hijo. – El hombre se sentó en una silla, se llevó sus
manos a su rostro y se inclinó hacia adelante apoyando sus brazos en ambas
piernas.
Señor Wheeler, le ruego que no
piense de esa manera… Hasta ahora, lo está haciendo muy bien, créame lo que le
estoy diciendo por favor, hoy más que nunca, usted no debe de darse por
vencido, su hijo lo necesita y si usted lo abandona en estos momentos, no
quiero ni pensar lo que ese joven haría.
Señorita Aime, usted no entiende…
Para mí no ha sido nada fácil enfrentar esta situación, a veces me dan ganas de
salir corriendo por toda la ciudad hasta encontrar al maldito que le hizo eso a
mi hijo… Si tan sólo lo tuviera enfrente de mí, yo… Yo… Soy capaz de matarlo
con mis propias manos. – Apretaba fuertemente sus manos haciéndolas puños,
claramente reflejaba la ira que sentía al hablar.
Señor Wheeler, cálmese por favor,
usted no debe pensar en otra cosa más que únicamente en su hijo, lo que usted
está haciendo por él, créame ya es bastante, le aconsejo que siga así, no deje
de apoyarlo y sobre todo, no deje de ayudarlo… Nunca se canse de decirle lo
mucho que lo quiere… Recuerde que todavía no hemos llegado a la etapa crítica.
¿Etapa crítica? ¿A qué se refiere?
La mujer se quedó callada por un
momento, se maldijo a si misma por haber mencionado esa parte.
Señorita Aime, dígame por favor ¿a
qué se refiere? – Volvió a insistir el hombre.
La etapa crítica es, cuando él
recuerde todo lo que le sucedió…
No… No puede ser… – El hombre se
dejó caer en la silla, se sentía devastado y sin salida.
Discúlpeme por favor, por esa razón
no quería decírselo, para no preocuparlo.
Está bien, lo entiendo. – Respondió,
mientras se limpiaba con una mano algunas lágrimas que salían de sus ojos.
Ya debo irme, haré todo lo posible
por venir mañana. Y cualquier cosa, llámeme, no importa a la hora que sea.
Se lo agradezco mucho.
******************************
¿Y
bien Yūgi? ¿Qué fue lo que te dijo? ¿Pudiste averiguar algo?
Pues…
Este… ¿Cómo decírtelo?
Anda
Yūgi, por favor dímelo ya.
Con
tanta emoción, hasta yo quiero saber.
¿Vez?
Hasta Tristán quiere saber ese misterio.
Bueno,
está bien, al principio no quería decirme nada, se le hizo raro que le
preguntara después de tanto tiempo.
¿Y
luego?
Pues…
Le dije que tú querías saber, y que no estarías a gusto hasta descubrir el
¡Gran Misterio! – Fingió una voz macabra…
Yūgi,
no bromees, y dime ya.
Será
mejor que nos lo digas Yūgi.
Pues…
En efecto, su padre y él lo visitaban… Y la otra persona que también tenía
permiso para hacerlo era…
¿Quién
era?
Dinos
ya muchacho, no nos dejes picados.
Sí,
no nos dejes con la emoción.
Pues
no me lo van a creer… La tercera persona era… Seto Kaiba.
Todos
se quedaron boqui abiertos en cuanto escucharon el nombre. Ninguno podía creer
lo que acababan de escuchar… Hasta que uno de ellos logró salir del asombro
dando un gran grito al cielo.
¿QUEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEÉ?
Tea,
¿Por qué gritas así? – Reclamó el castaño.
Lo
siento, me dejé llevar por el momento. – Fingió una sonrisa. – ¿Estás seguro de
eso?
Eso
fue lo que me comentó Yami.
Para
que él lo haya dicho, es porque ha de ser verdad.
Si,
supongo que sí. – Trataba de calmarse un poco.
Bueno,
creo que el gran misterio ya quedó resuelto. – Bromeaba el castaño. – Por
cierto Tea, ¿Por qué tanta curiosidad por saberlo?
Pues
tú mismo lo acabas de decir Tristán, por simple curiosidad eso es todo.
Antes
de que el castaño dijera algo, alguien estaba entrando a la habitación…
Escuché
un fuerte grito allá abajo… ¿Todo está bien?
Si
abuelito, no es nada.
Bien,
en ese caso, pueden bajar a comer.
Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii.
– Respondieron todos al mismo tiempo.
******************************
Buenas
tardes. – Saludó la persona que acababa de llegar.
Ya
pensaba a creer que usted no vendría.
Pues
le sugiero que no piense y ni crea en cosas que no son. – Expresó de forma muy
altanera.
Si
no fuera porque yo lo llamé, en estos momentos le hubiera pedido que se
largara.
¡Ja!
Como si eso fuera posible.
Por
lo visto, usted y yo estamos destinados a no llevarnos bien. – El hombre
trataba de controlar su enojo.
No
creo en el destino. – Respondió seriamente.
Qué
más da… Antes de dejarlo pasar, quiero que sepa una cosa.
¿Qué?
Él
ya no es el mismo que era antes, le advierto que lo que encontrará allá arriba,
va ser a un muchacho totalmente diferente… No descubrirá más que…
Con
todo respeto, pero... Eso es algo que solamente yo decidiré.
En
ese caso, puede subir, su cuarto es la segunda puerta a la derecha.
El
hombre caminó muy erguido hacia unas escaleras, al terminarlas de subir, se
dirigió a una puerta y lentamente comenzó a abrirla, una vez que la abrió,
decidió entrar a la habitación, dio unos cuantos pasos y luego dijo:
Hola,
cachorro.
Continuará…
N/A: ¡Taran! ¿Qué
les pareció? ¿Les gustó? Espero que sí, me costó mucho trabajo crear este
capítulo, pero finalmente pude hacerlo… Jejejejeejejejejeejejeje… No me odien
por haberlos dejado en la mejor parte… Hasta yo misma estoy emocionada de cómo
va a reaccionar mi cachorro ante esa visita inesperada…
¡¡¡¡¡AAAAAAAAAAAAAAAAAWWWWWWWWWWWW!!!! ¡QUÉ EMOCIÓN! Hasta el título que le
puse pegó muy bien ¿no lo creen?...
Me
pregunto… ¿Qué es lo que buscará tanto mi cachorro? ¿Estará tramando algo la
castaña? ¿Quieren que Joey muera?... Ups… Olviden la última pregunta, es sólo
que en uno de los reviews que recibí, alguien me sugirió que muriera mi
cachorro, quizás sea lo mejor para él, y así no tendría que recordar cosas
dolorosas de su vida… Pero eso no está en mis manos, si no que ustedes
decidirán lo mejor para él, acepto cualquier sugerencias que ustedes me digan…
Quiero
recordarles que con este fic comencé a escribir, y gracias a este fic es que he
conocido a muchísimas personas, y les agradezco a tod@s mis lectores/as por
haberse tomado su tiempo en leer mi historia… Para aquellos lestores/as que me
conocen, ya sabrán que yo suelo pedirles ayuda, y gracias a sus reviews, fue
así como empezaba a desarrollar la trama
de esta historia.
Por
ende, les vuelvo a pedir su ayuda, quiero que ustedes decidan qué clase de
castigo se merece Darks, por medio de sus reviews ustedes decidirán el final
del villano… La persona que logre tener una buena idea, será mencionada y
elogiada en este fic… Y a los nuevos lectores/as les doy la BIENVENIDA y de
ante mano les agradezco mucho por leerme… Hice este capítulo algo largo, para
apaciguar la marea y que se deleiten leyéndolo un buen rato…
Pero
antes se me olvidaba una pequeña cosa… En cada capítulo que vaya actualizando
en cualquiera de mis fics, al final iré mencionando los nombres de las personas
que me vayan dejando sus reviews, así que quiero agradecerles especialmente a:
Yesica (Anonimo), Carol (Anónimo), Saokira (Anónimo), Roxana Flores (Anónimo), Yami Shaka, nidia
(Anónimo), wiccangel,
Turkiita - Neko \m/ (Anónimo), Pequeña Lin (Anónimo), AMATERATSU,
Diana/darkness (Anónimo), krani (Anónimo), lobo512, Mitzumy
(Anónimo), I_beloved,
knaxzerim, yaoista10, mj18 (Anónimo),
Melo-chan, maria
(Anónimo), Hexyl,
sexyshina, Locappya, Layla, nearchan, Jwwriz
(Anónimo), VIVE TU YAOI (Anónimo), Angelus (Anónimo), sherry (Anónimo), LuSt
(Anónimo), maoru
midori, alexpotterweb,
Uchiha no anime,
Aby (Anónimo), aime (Anónimo), ale_vainilla, SHERRY
(Anónimo), evangeline (Anónimo), emOfoxX, Abross Temmes, ana
(Anónimo) y Desire Nemesis.
Aquí
irán incluidos los otros nombres del mismo fic pero que por error se subió dos
veces y de igual manera también han dejado sus comentarios, agradezco especialmente
a: Anónimo (Anónimo), vive-tu-yaoi,
annie (Anónimo), saory (Anónimo), darkness la reyna
siniestra, yare kaiba truesdale wheeler (Anónimo), diana/venezuelayaoista
(Anónimo), Yaoi
Princess Nya, MALUCIA (Anónimo), mussfrozen (Anónimo), wiccangel, Emy
(Anónimo), Yumi_Kitsune (Anónimo), Paty (Anónimo), Sayuki139, Pequeña
Lin (Anónimo), knaxzerim,
nekomata_666, nearchan, Locappya, sherry
(Anónimo), daikikurodo (Anónimo), Minamino (Anónimo), Layla, angelus_2305
(Anónimo), ana (Anónimo), emOfoxX y La_Oscura_Reina_Angel…
Gracias
a todos y cada uno de ustedes por sus reviews, realmente son ustedes los que se
merecen todos los créditos, porque con su ayuda y sus consejos se me hizo
posible crear esta historia… Les agradezco por la enorme paciencia que me han
tenido, y a los nuevos lectores y lectoras les doy la “Bienvenida”, muchas
gracias por tomarse su tiempo en leer esta historia…
Bueno
mis queridos lectores y amigos me despido de ustedes muy cariñosamente…
Atte.:
KAT.
Jo mata a Tea Katsu por a que es un arrastrada y está envidiosa y creo que lo que le paso a Katsu(perdón Katsu II) es cosa de ella
ResponderEliminarHola Shinigami!
EliminarMe alegra saber de ti, he estado pensando que castigo debe tener esa arpía, hasta el momento no se me ocurre nada... Je je, je je... Pero si tienes una mejor idea, me gustaría saberla... Gracias por tu comentario.