Capítulo 119: Propuesta de matrimonio… III parte.
Declaimer:
Noticia de último momento… “YU – GI – OH!, No es mío”… Mucho menos sus
personajes… Son propiedad de su respectivo autor, pero toda la trama de esta
historia si es creada por mí. Amo inventarles historias nuevas a mis queridos
personajes, es una manera de expresar lo que siento, y tener la dicha de
poderlo compartir con todos ustedes. ^_^
******************************
Horas más tarde…
La noche finalmente había llegado cubriendo toda la ciudad con su
manto negro lleno de estrellas, en una mansión se encontraban varias personas
conversando hasta que llegó el silencio a incomodarlos.
Joey, puedes venir
por un momento por favor.
Voy enseguida Seto.
– Le respondió algo preocupado. – Ya regreso.
Está bien Joey. –
Contestó uno de los presentes.
En otra habitación…
¿Qué sucede Seto?
¿Me podrías decir
que está pasando?
No pasa nada, ¿por
qué?
No es por nada pero
ya se está haciendo un poco tarde, y te iba a sugerir que podemos llevar a Ryou
a su departamento.
Sé que es algo tarde
amor pero te pido que me des un poco más de tiempo por favor.
¿Cuánto tiempo más
quieres esperar?
Te parece bien media
hora más, podemos esperarnos hasta las 11:00 p.m.
La otra persona dio un fuerte suspiro para luego decir:
¿Estás seguro que
Bakura te dijo que iba a venir?
Claro que si amor,
claramente me comentó que estaría aquí a las 9:00 p.m. pero de seguro tuvo
algún retraso.
¿No te dijo alguna
otra cosa? ¿Cómo que iba a pasar por otro lugar?
Bueno… Verás…
Antes de responderle llegó otra persona a interrumpirlos.
Disculpen…
¿Qué ocurre Mokuba?
Ryou ya se quiere
ir, dice que ya se está haciendo noche y para no molestarlos prefiere irse en
un taxi.
Será mejor que vaya
a detenerlo. – Manifestó el rubio saliendo de la habitación.
Iré contigo.
Gracias Seto.
Una vez que llegaron a la sala…
Joey, no me gustaría
causarles molestias pero creo que mejor me voy por mi cuenta.
De ninguna manera
Ryou, tienes que quedarte a esperar a Bakura.
Pero…
Si tu novio dijo que
iba a venir por ti lo mejor será que lo esperes.
Lo sé, pero ya se
retrasó y ya no quiero ocasionarles más problemas, Seto.
Hey, tu no nos estas
ocasionando ningún problema, ¿verdad Seto? – Lo volteó a ver.
Así es cachorro,
usted no se preocupe por nada Ryou.
Muchas gracias. –
Medio sonrió. – “¿En dónde estarás Baki? ¿Por qué no me contestas mis
llamadas?” – Se cuestionaba mentalmente.
Mokuba, porque no te
vas a descansar, acuérdate que Noah tiene que madrugar mañana.
Tienes razón
hermano, pero preferiría quedarme a hacerles compañía. Claro si tú estás de
acuerdo mi amor.
Por mí no se
preocupen, si no les molesta también me quedaré con ustedes.
Muchas gracias
amigos. – Expresó melancólico el albino.
Al cabo de 15 minutos el timbre de la puerta principal comenzó a
sonar.
De seguro es Bakura.
Yo iré a ver quién
es.
Gracias Seto.
Al poco tiempo entraban dos hombres a la sala.
Buenas noches. –
Saludó el recién llegado.
Baki, viniste por
mí. – Salió rápidamente a su encuentro.
Así es mi amor.
Lamento mucho la tardanza.
No te preocupes
Bakura. – Contestaba el rubio.
Gracias Joey.
Vámonos Ryou.
Si, adiós amigos y
gracias por todo.
No tienes nada que
agradecer Ryou.
Se van con cuidado.
Claro que si Mokuba,
adiós a todos.
Adiós. –
Respondieron al unísono.
******************************
En algún lugar del mundo…
Shādī se divirtió tanto este día que
quedó muy cansado.
Es verdad, así como esta de dormido
nadie podría despertarlo.
Es mejor que salgamos de la habitación
para dejarlo descansar.
Está bien amor. Buenas noches mi cielo,
duerme con los angelitos. – Acarició suavemente sus cabellos y luego le dio un
beso en la frente.
Una
vez que salieron de la habitación del niño…
Ya que estamos solos, tú y yo podríamos
pasar un tiempo, juntos. – Le daba un beso en los labios.
Me encantaría Marik pero yo también estoy
muy cansado.
Está bien mi amor.
Perdóname por favor.
Tranquilo amor, no tengo nada que
perdonarte.
Me iré a bañar para luego ponerme el
pijama e irme a dormir.
Espera Malik.
¿Qué sucede?
Antes de que entres al baño me gustaría
pedirte un pequeño favor.
Dime mi amor de qué se trata.
Cierra los ojos.
¿Qué?...
Por favor, sólo será por un momento, es
que no quiero que veas la sorpresa que tengo para ti.
De acuerdo.
No te atrevas a abrirlos.
Claro que no. – Medio le sonrió. – ¿Qué
haces mi amor? – Preguntó al sentir como su pareja lo guiaba hacia un lugar.
Tú confía en mí, ya casi llegamos. –
Una vez que llegaron el hombre dijo: – Ya puedes abrir tus ojos mi vida.
La
otra persona los abría lentamente y al hacerlo se sorprendió lo que miraba…
¡Oh Marik! Has decorado el baño con
velas aromáticas, pétalos de rosas y hasta el jacuzzi lo tienes listo.
A esto me refería cuando te dije que
pasáramos tiempo, juntos.
Ay mi amor que lindo detalle, ahora
entiendo por qué no me dejabas entrar.
No quería que arruinaras la sorpresa.
Eres un amor Marik. – Le da un beso en
los labios.
Entonces que, ¿nos bañamos juntos? – Lo
seducía sensualmente.
Por supuesto que si mi vida.
¿Me dejarás hacerte el amor?
Claro que si, además no me gustaría desperdiciar
este hermoso detalle que has tenido conmigo.
Oh Malik, te amo tanto mi cielo.
Ambos
se besaban apasionadamente y cada quien comenzaba a desvestirse rápidamente…
******************************
En algún lugar de Ciudad Domino…
Estaban llegando a su destino, en cuanto el conductor terminó de
parquearse apagó el motor de su vehículo. Durante todo el camino había reinado
el silencio, el hombre se le quedó viendo a su acompañante notándolo que estaba
callado y bastante pensativo por lo que decidió hablarle:
Ryou.
Eh… – Salió de sus
pensamientos, y únicamente lo volteó a ver sin decir nada.
Ryou, discúlpame por
haberte ido a traer tan noche.
Está bien, no te
preocupes, estaba por…
Ryou, antes de que
entremos hay algo que quiero pedirte.
¿Qué cosa? –
Preguntó algo preocupado.
¿Confías en mí?
¿Eh?... ¿Qué
dijiste? – Exclamó estupefacto.
Dime por favor si
confías en mí.
Ssi… Si confío en ti
Baki. – Su voz sonó segura.
El hombre se acercó a él para darle un beso en la frente,
posteriormente ambos se bajaron del vehículo. Y cuando comenzaron a caminar…
Espera Ryou.
¿Qué sucede?
Ponte esto por
favor. – Le entregaba una venda negra para que se tapara los ojos.
¿Por qué quieres que
me lo ponga?
Por favor amor no me
preguntes nada sólo póntela.
Si lo hago no podré
ver por donde camino.
Yo te voy a guiar mi
amor.
El joven se quedó viendo el objeto que tenía en sus manos y por
unos instantes dudó en ponérsela hasta que recordó la respuesta que el mismo le
había dado.
De acuerdo, me la
voy a poner. – Manifestó un poco nervioso.
Una vez que se la puso la otra persona le hizo algunos gestos
asegurándose que no viera nada.
¿Estás listo?
Si.
Dame tu mano y no te
preocupes por nada yo te guiaré en cada paso que des.
Confío en ti Baki.
Una vez que entraron al departamento, el hombre dirigió a su
pareja hacia la sala del comedor.
Espérame aquí Ryou.
¿A dónde vas?
Tranquilo amor no
tardo, será sólo un momento.
Está bien. – Se
quedó parado en el lugar donde su novio lo había dejado, aún se sentía un poco
nervioso por lo que decidió suspirar profundamente para calmarse. – ¿Baki?
Ya te puedes quitar
la venda de los ojos amor.
El joven comenzaba a quitarse la venda y al abrir los ojos se
llevó una gran sorpresa. La mesa del comedor estaba arreglada con un precioso
mantel de color dorado, la vajilla era de porcelana fina con bordes dorados,
copas de cristal color amarillo, una botella de vino Domaine
de la Romanée-Conti Grand Cru, Côte de Nuits, Borgoña Francia, un centro de mesa con velas aromáticas y una deliciosa
cena servida en la mesa.
¡Qué hermoso! –
Exclamaba sorprendido.
¿Te gusta?
Mucho, pero…
Pero que amor. – Se
acercó a donde su novio estaba parado.
A qué se debe que
has decorado todo muy bonito.
¿No te lo imaginas?
No.
Mira de nuevo la
mesa mi amor.
La otra persona se acercó un poco más hacia la mesa para poder ver
todo de cerca, observaba detenidamente cada detalle, cada arreglo, hasta que
una pequeña cajita le llamó la atención, por lo que decidió agarrarla para ver
su contenido.
¿Es lo que creo que
es? – Preguntaba todo emocionado e ilusionado al mismo tiempo.
¿Por qué no la
abres?
De acuerdo. – Sonrió
y se dispuso a abrirla y al terminarla de abrir entristeció al no encontrar
nada. – Aquí no hay na… – Al voltear a ver de nuevo a su pareja sus ojos
comenzaron a humedecerse al verlo de rodillas mostrándole otra pequeña cajita
de color negro.
Ryou, ¿quieres
casarte conmigo? – Abría la cajita para mostrarle el anillo de compromiso.
Ssi… Si quiero. –
Lloraba de la emoción que sentía en ese momento.
El hombre se paró rápidamente para ponerle el anillo en el dedo
anular de su mano izquierda.
¡Oh Baki, es
precioso!
¿De verdad te gusta?
Muchísimo, no sabes
lo feliz que me acabas de hacer.
No llores mi amor,
quiero que esta noche sea especial para nosotros.
Perdón, no lo puedo
evitar de la emoción.
Ay mi niño, ven acá.
– Lo abrazó fuertemente contra su pecho.
¿Era por eso que
actuabas extraño estos días? – Se separó un poco para verlo a los ojos.
Así es amor, es que
no sabía si ibas a aceptar o no.
Y yo que pensé que
ya no me amabas. – Volvía a llorar de nueva cuenta.
Pues no debiste de
pensarlo Ryou.
Lo siento mucho, es
que te sentía tan distante conmigo que…
Tienes razón,
perdóname por haberte preocupado mi amor.
No tengo nada que
perdonarte.
Te amo tanto Ryou.
Y yo a ti mi amor. –
Se dieron un beso apasionado en los labios.
Continuará…
N/A: Esta es una de las partes que quizás me ha costado escribir de
esta historia, quise que la propuesta de Bakura hacia Ryou fuera algo romántico
y fuera de lo común. Espero haber podido lograr mi objetivo. Cambiando de tema… Habrá boda, quiero ser la madrina de bodas… XD. Creo que Ryou no
se esperaba la sorpresa de Bakura. Los invito para que no se pierdan la
continuación de esta interesante historia, no olviden dejar sus comentarios que
yo con mucho gusto les responderé.
Me despido muy cariñosamente de todos y cada uno de ustedes, quini
mil gracias por todo su apoyo, sus consejos, por corregirme cuando me equivoco,
gracias por sus comentarios que me dejan, por todo esto y más les doy las
gracias. Cuídense mucho y pórtense bien, recuerden no bajar la guardia, sigan
con todas las medidas de bioseguridad y vacúnense. Les mando muchos besos
virtuales y un fuerte abrazo desde la distancia.
Atte.:
KAT.
No hay comentarios:
Publicar un comentario