Capítulo 64: Un cachorro muy alegre, y… Un gato disgustado…
Declaimer:
Como siempre… Bla, bla, bla, bla, bla, bla… Los personajes de YU – GI – OH!,
“No me pertenecen”… Chiquiris maquiris, son propiedad de su respectivo autor,
abra cadabra, solamente lo hago porque me encanta escribir, y que ustedes se
diviertan de mis locuras… Es mi manera de expresar lo que siento, y tener la
dicha de poderlo compartir con todos mis lectores…
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Meses después…
Un
hombre de estatura alta, piel morena, cabellos castaños, ojos azules, estaba
haciendo lo posible por concentrarse en su trabajo, pero el ruido que escuchaba
dentro de su oficina no le permitía hacerlo.
Ahora, ¿qué estás haciendo? – Preguntó
un poco molesto.
Lo siento mucho, solamente quería ver
el lugar. – Tenía una ventana abierta para ver todo el panorama.
¿No te puedes quedar quieto aunque sea
diez minutos?
Créame que lo intento, pero estoy
aburrido. – Caminó hacia el sofá para dejarse caer.
Baia, es el colmo contigo. – Abría una
gaveta de su escritorio, ahí sacaba un cuaderno y algunos libros,
posteriormente se levantó para ir a donde estaba el joven. – Porque no te
distraes leyendo estos libros y luego me escribes una reseña sobre lo que has
leído.
¿Queeeeeé? – Exclamó estupefacto. –
Esos libros se ven aburridos.
Claro que no, te aseguro que te van a
gustar y los escogí especialmente para ti.
¿Qué tienen de especial? – Los miraba
curioso.
Todos estos libros están ilustrados.
¿De verdad?
Si.
¿Son parecidos a uno que le vi a
Mokuba?
Así es.
En ese caso los leeré. – Sonrió feliz.
Está bien, en lo que tú haces eso, yo
terminaré de trabajar.
Si. – Comenzaba a abrir uno de los
libros.
El
hombre se le quedó viendo por un segundo y luego se fue nuevamente a sentarse a
su escritorio. En cuanto comenzó a trabajar pensaba para si mismo…
“Debido a la insistencia de Yami en
querer traer a esas personas, fue que decidí que Joey me acompañara todos los
días a mi oficina. Al principio no fue nada fácil porque nunca se quedaba
quieto, hubo más de una ocasión que me sacaba de mis casillas y sentía que no
lo soportaría por más tiempo tenerlo aquí. Luego de tres días, me atreví a
preguntarle a Mokuba como era que hacía para que Joey se mantuviera quieto en
un sólo lugar”. – Medio sonrió al recordar la plática con su hermano…
FLASH
BACK
Un joven de cabellos negros y ojos azules
se encontraba en su habitación haciendo su tarea de la escuela, cuando de
pronto alguien entraba al lugar.
Mokuba,
¿puedo pasar?
Pasa
hermano.
¿Qué
haces?
Estoy
haciendo mi tarea.
¿Necesitas
ayuda?
No,
pero creo que tú sí. – Medio le sonrió.
¿Cómo
lo sabes?
Si
estás aquí es porque quieres algo.
Tienes
razón. – Dio un fuerte suspiro. – Me he estado llevando a Joey todos los días a
mi oficina.
Ya
veo, eso explica el por qué no lo encuentro en las tardes.
Si,
el punto es que siento que me está volviendo loco.
¿Por
qué?
La
primera vez que lo llevé quería conocer todo el lugar, luego comenzó hacerme
muchas preguntas y por si eso fuera poco no se estaba quieto en un sólo lugar.
No me podía descuidar ni un segundo porque si lo hacia el salía de mi oficina.
Me tocaba que estarlo siguiendo a todas partes y no me dejaba trabajar. Sentía
que era un terremoto yendo de un lado a otro. – El hombre se quedó callado al
escuchar la carcajada de su hermano. – No le veo la gracia.
Pues
yo sí. – Hacia lo posible por no reírse. – Así nunca controlarás a Joey.
Entonces
dime, ¿cómo lo hago?
Primero
tendrás que ser paciente con él, luego deberás de explicarle el por qué se
tiene que quedar en tu oficina todo el día sin salir de ella.
Eso
ya lo intenté y al parecer no entiende de razones.
No
es eso hermano, lo que pasa es que aún no te has ganado su afecto.
Eso
es una tontería.
Claro
que no lo es, si quieres que se quede quieto tendrás que darle confianza, y
mantenerlo ocupado en algo que a él le
guste.
¿Mantenerlo
ocupado? Esa idea no suena tan mal. Y dime, ¿cómo lo mantengo ocupado?
Mmm…
A ver, déjame pensar… ¡Ya lo tengo!
¿Qué?
Joey,
me dijo una vez que le gustaría aprender muchas cosas, pero que no era muy bueno
leyendo libros con mucho texto y cuando le enseñé mi libro de ciencias
naturales pude notar que la ilustración le llamó mucho la atención.
¿Insinúas
que le gustan los libros con muchos dibujos?
Algo
así.
Creo
que no perderé nada con intentarlo. Gracias por tu consejo.
De
nada. Por cierto…
Dime.
¿Por
qué te lo llevas todos los días a tu oficina?
Porque
el idiota de Yami no ha dejado de hostigarme en que quiere traer a esas
personas a la mansión para que conozcan a Joey. Y conociéndolo bien… Me
atrevería a decir que está esperando la oportunidad perfecta para poder traer a
esas personas sin mi autorización.
Ooohhh,
entiendo. Es por eso que decidiste llevártelo todos los días.
Si,
y ya que tú pasas los fines de semana en la mansión, me puedo sentir un poco
más tranquilo en que él se quede también.
Creo
que haces bien.
Baia,
creí que estarías de parte de tu primo.
Pensaba
en apoyarlo, pero con eso de que Joey me dijo que no los quiere ver todavía...
Eso
quiere decir que estás de acuerdo en que me lo lleve.
Si,
además, creo que es una excelente oportunidad para que ustedes dos se vayan
conociendo mejor.
Mhg…
– Bufó el hombre.
FIN
DEL FLASHBACK
Joey…
Si,
¿qué pasa?
Tengo
que salir de la oficina por un momento y quiero que te quedes aquí.
¿Tardarás
en volver?
Creo
que sí.
En
ese caso lo acompaño.
No,
únicamente quédate aquí y lee los libros que te acabo de entregar.
Está
bien. – Respondió cabizbajo.
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Llevo
varios meses tratando de descifrar estos códigos, y a pesar que he tenido ayuda
de mi maestra aun siento que no he avanzado casi nada. Lo poco que he podido traducir
es algo difícil de creer. – Se levantó de la silla de su escritorio y caminó
hacia un archivero y ahí sacaba un folder con un montón de fotografías. – Estas
son las fotos que tomé cuando descubrí esa civilización antigua, habían salas,
cuartos, objetos y algunas reliquias que estaban intactas. Pero lo que más llamó
mi atención fue ver la imagen detallada de esta bestia. – Miraba la fotografía.
– Según lo que dice aquí, era una bestia temible, maligna, despiadada, destruía
todo lo que encontraba a su paso, en otras palabras, ni los grandes magos, ni
los hechiceros la podían controlar. Según la historia, era una civilización muy
pacifica en donde tenían sus propias costumbres, culturas, creencias y sus
dioses. Todo era tranquilo y pacífico. Y eso era gracias a los magos que con su
magia podían traer la paz y la tranquilidad. También existió un rey muy sabio
que amaba a su pueblo, gobernaba con valentía y se podía enfrentar ante
cualquier peligro. Este rey, no debía de tener ninguna maldad en su corazón, en
otras palabras, no debía de conocer el odio ni la tristeza, a él se le prohibía
que guardara alguna clase de rencor en su corazón y se le prohibía dormir. Un
rey tiene que estar siempre alerta, dormir pocas horas para estar al servicio
de su pueblo. – Le dio vuelta a la página para seguir leyendo para sí mismo. –
Si este rey no cumplía con sus obligaciones o no estaba apto para gobernar,
tendrá que ser sometido a un castigo impuesto por su pueblo. – Dejó por un
momento la lectura. – Baia, ser rey en aquel tiempo era muy tedioso y estricto.
Pero casi no habla de cómo era esa civilización antes. – Comenzó a hojear el
libro hasta que llegó a una imagen de sumo interés para él. – Este es el
medallón que es buscado por todos, y según lo que dice aquí, aquel que lo posea podrá controlar a la
temible bestia de la oscuridad. Pero no se dejen engañar por su poder, puesto
que en él hay un hechizo oculto muy poderoso que si no lo sabes usar, serás
dominado por la maligna bestia. ¡Cuidado exploradores! No todos son aptos de
portar este medallón, no olviden que dentro de él se encierra un misterioso y
extraño poder oculto. Hay de aquel que se atreva a levantarlo sin magia alguna,
puesto que su alma se le será arrebatada para alimentar a la oscuridad. –
Cerró el libro por un momento. – Lo que acabo de leer sonó muy tétrico, hasta
me dio algo de escalofríos. ¿Quién pondría una advertencia como esta? ¿A qué se
está refiriendo con que tiene un poder oculto? Son puras tonterías, toda mi
vida he buscado ese medallón, y no solamente yo lo ando buscando, son muchos
los arqueólogos y científicos que andan detrás de él. Debo obtenerlo a toda
costa y no descansaré hasta poder encontrarlo. Ya puedo imaginarme si lo
llegara a encontrar primero, sería uno de los investigadores más famosos del
mundo entero. Creo que seguiré estudiando este libro, tal vez me de alguna
pista de donde pueda buscar.
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Espera Yūgi.
¿Qué sucede Rebecca?
Descansemos un poco, quieres.
Pero…
No seas malo, mira que hemos estado
recorriendo toda la ciudad para ver si encontramos algo y no hemos tenido
ningún resultado.
Ya lo sé, a veces creo que venir hasta
acá no fue una buena idea después de todo.
Hey, no digas eso, sé que no hemos
encontrado mucho pero al menos tenemos algunas pistas.
Tienes mucha razón Rebecca.
Que te parece si vamos a comer algo
porque muero de hambre, y luego podemos volver a la biblioteca a seguir
revisando los libros.
Me parece una excelente idea.
Entonces vamos. – Lo agarró del brazo
para caminar rápido.
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En algún lugar de Ciudad de Tokio…
Una
persona estaba llevando a cabo una llamada bastante misteriosa. Y la
conversación se hacía cada vez más extraña.
Mi hija está haciendo un excelente
trabajo.
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Claro que me consta lo que le estoy
diciendo.
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¿Qué cómo lo sé? Pues porque ella me
cuenta lo que hace todos los días.
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Puedo asegurarle que no sabe nada.
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¿Qué si ha habido algún incidente?...
Déjeme pensar… Oh, antes de que se me olvide… Mi hija me comentó hace poco que
encontraron un libro muy extraño.
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No tiene por qué gritarme.
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La verdad es que no sé de qué trata el
libro.
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Porque yo no lo he visto.
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Lo que sí puedo decirle es que se trata
de un libro muy antiguo.
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Lamentablemente yo no lo tengo.
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Tampoco lo tiene hija.
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La verdad es que no se quien lo tiene.
Pero mi hija me dijo que lo tiene un hombre.
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No, ella ni siquiera ha visto a esa
persona.
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Solamente su amigo lo ha visto.
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Entiendo que no puede caer en manos
equivocadas.
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No sé cómo apareció ahí.
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Que yo sepa, había desaparecido hace
siglos.
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Lo que me pide es algo imposible.
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De acuerdo, veré que puedo hacer.
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Si, si, haré todo lo posible por
recuperarlo.
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Aunque sigo pensando que ya no tiene
caso seguir posponiéndolo.
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PORQUE LA MENTADA BESTIA HA VUELTO
APARECER EN ESTE MUNDO. – Comenzaba a alzar la voz.
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Lo lamento, discúlpeme por gritarle.
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Muchas gracias.
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Si eso llegara a ocurrir… Sé muy bien
lo que tengo que hacer.
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Así es, he tenido que ser tolerante
para esperar.
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Usted no más dígame lo que tengo que
hacer y lo haré.
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De acuerdo, se hará como usted quiera.
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Sí, no se preocupe, lo mantendré
informado de todo lo que pase aquí.
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Bien, hasta luego. – Una vez que colgó
el teléfono. – Baia, esto se va complicando cada vez más. Solamente espero que
las cosas no se salgan de control. Porque de lo contrario…– Sacudió un poco su
cabeza. – No, definitivamente no tendría el valor para hacerlo…
Continuará…
N/A: ¿Hace
bien el neko en llevarse al cachorro a su oficina? ¿Será una clase de
advertencia lo que está escrito en ese libro? ¿Quién estará haciendo esa
llamada tan misteriosa? Todo esto y más lo iremos descubriendo en los
siguientes capítulos. Los invito para que no se pierdan la continuación el
próximo viernes.
Quiero
agradecerles por todo el apoyo que me han brindado, por leer mis historias, por
sus comentarios y sobre todo por tenerme paciencia cuando me atraso en
actualizar. Por todo esto y muchas cosas más, les doy a todos y cada uno de
ustedes las gracias. Me despido cordialmente, no sin antes dejarles muchos
besos virtuales y un fuerte abrazo desde la distancia.
Atte.:
KAT.
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